Indonesia se pone dura con los escépticos de la vacuna COVID-19 cuando comienza la fase dos de las inoculaciones

Indonesia se pone dura con los escépticos de la vacuna COVID-19 cuando comienza la fase dos de las inoculaciones

Un hombre reacciona cuando un trabajador médico recoge sus muestras de hisopo nasal durante una prueba de coronavirus en el Hospital Universitario de Sumatra del Norte en Medan, Sumatra del Norte, Indonesia, el martes 16 de febrero de 2021. (AP)

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Actualizado el 17 de febrero de 2021

ISMIRA LUTFIA TISNADIBRATA 

16 de febrero de 2021

23:55

Las personas que se nieguen a aceptar la vacunación se enfrentarán a una multa y a la retirada de la asistencia social como parte de las sanciones del gobierno.

JAKARTA: El gobierno indonesio ha declarado que impondrá una serie de sanciones progresivas a las personas que se nieguen a vacunarse contra la COVID-19. Las sanciones incluyen multas, retirada de prestaciones sociales y pérdida de acceso a los servicios administrativos y públicos.

El miércoles comienza la segunda fase de una campaña de vacunación en todo el país, durante la cual se vacunará a las personas mayores y a los trabajadores públicos de primera línea.

"Hago un llamamiento a los ciudadanos para que participen en el programa de vacunación, de modo que podamos lograr la inmunidad de rebaño, ya que la obligación de participar en el programa está establecida en la normativa presidencial", dijo Wiku Adisasmito, portavoz del grupo de trabajo nacional del COVID -19-.

Se refería a una orden presidencial emitida el fin de semana para una campaña nacional de vacunación COVID-19, que incluye las posibles sanciones a quienes se nieguen a participar. La normativa también servirá como referencia legal para que los gobiernos regionales emitan sus propios estatutos que regulen el programa de vacunas. La administración provincial de Yakarta, la capital de Indonesia, ya emitió un reglamento en virtud del cual los ciudadanos que se nieguen a vacunarse podrían ser multados con cinco millones de rupias (360 dólares).

Adisasmito instó al público a ignorar los falsos rumores y conceptos erróneos sobre la vacuna.

"No hay que dudar de que la vacuna es segura y halagüeña", dijo. "La vacuna no ha causado hasta ahora ningún efecto secundario grave".

Las autoridades indonesias pretenden vacunar a unos 181,5 millones de personas de los 270 millones de habitantes. La campaña nacional se lanzó hace un mes, cuando el presidente Joko Widodo fue uno de los primeros en recibir la vacuna CoronaVac, desarrollada por la empresa china Sinovac.

Más de un millón de los 1,46 millones de trabajadores sanitarios a los que se dirige la campaña, principalmente en las islas de Java y Bali, infestadas por el virus, han recibido hasta ahora la primera de las dos dosis necesarias de la vacuna.

A partir del miércoles se comenzará a inocular a 21,5 millones de habitantes mayores de 60 años, más 16,9 millones de trabajadores públicos de primera línea.

Los expertos afirmaron que las sanciones deberían utilizarse sólo "como último recurso" contra las personas que se niegan a vacunarse y que las autoridades deberían intentar emplear primero métodos educativos y persuasivos.

Masdalina Pane, experta en política sanitaria de la Asociación de Epidemiólogos de Indonesia, dijo que hay un largo camino por recorrer antes de considerar las sanciones.

"Todavía estamos lejos de alcanzar el objetivo de vacunar a los grupos prioritarios, como los trabajadores sanitarios y los trabajadores públicos de primera línea, y mucho menos a la población en general, y todavía no tenemos suficientes dosis de vacunas", declaró a Arab News.

"Lo que más importa es tener listos los suministros de vacunas primero. El gobierno no debería ocuparse demasiado de sancionar a la gente. Debería ser el último recurso. Lo que el público necesita más ahora son comunicaciones y promociones persuasivas".

Según una encuesta nacional en línea de 115.000 personas de las 34 provincias realizada en septiembre del año pasado, alrededor del 65 por ciento de los encuestados dijeron que estarían dispuestos a recibir la vacuna COVID-19 si el gobierno la proporcionara. Casi el 8 por ciento dijo que no lo aceptaría.

La encuesta, realizada conjuntamente por el Ministerio de Salud, el Grupo Asesor Técnico de Inmunización de Indonesia, UNICEF y la Indonesia se pone dura con los escépticos de la vacuna COVID-19 cuando comienza la fase dos de las inoculaciones

Indonesia se pone dura con los escépticos de la vacuna COVID-19 cuando comienza la fase dos de las inoculaciones

A man reacts when a medical worker collects his nasal swab samples during a coronavirus test at the North Sumatra University Hospital in Medan, North Sumatra, Indonesia, Tuesday, Feb. 16, 2021. (AP)

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Updated February 17, 2021

ISMIRA LUTFIA TISNADIBRATA 

February 16, 2021

23:55

People who refuse to accept vaccination will face a fine and withdrawal of welfare as part of government sanctions.

JAKARTA: The Indonesian government said it will impose a series of progressive sanctions on people who refuse to be vaccinated against COVID-19. The sanctions include fines, withdrawal of social benefits and loss of access to administrative and public services.

The second phase of a nationwide vaccination campaign begins on Wednesday, during which seniors and front-line public workers will be vaccinated.

"I call on citizens to participate in the vaccination program so that we can achieve herd immunity, since the obligation to participate in the program is established in the presidential regulations," said Wiku Adisasmito, spokesman for the national COVID working group -19. he said Tuesday.

Se refería a una orden presidencial emitida el fin de semana para una campaña nacional de vacunación COVID-19, que incluye las posibles sanciones a quienes se nieguen a participar. La normativa también servirá como referencia legal para que los gobiernos regionales emitan sus propios estatutos que regulen el programa de vacunas. La administración provincial de Yakarta, la capital de Indonesia, ya emitió un reglamento en virtud del cual los ciudadanos que se nieguen a vacunarse podrían ser multados con cinco millones de rupias (360 dólares).

Adisasmito instó al público a ignorar los falsos rumores y conceptos erróneos sobre la vacuna.

"There is no need to doubt that the vaccine is safe and halal," he said. "The vaccine has not caused any serious side effects so far."

The Indonesian authorities intend to vaccinate some 181.5 million people out of the 270 million inhabitants. The national campaign was launched a month ago, when President Joko Widodo was one of the first to receive the CoronaVac vaccine developed by the Chinese company Sinovac.

More than one million of the 1.46 million health workers targeted, mainly on the virus-infested islands of Java and Bali, have so far received the first of two required doses of the vaccine.

A partir del miércoles se comenzará a inocular a 21,5 millones de habitantes mayores de 60 años, más 16,9 millones de trabajadores públicos de primera línea.

Experts said sanctions should be used only "as a last resort," against people who refuse to be vaccinated and that authorities should try to employ educational and persuasive methods first.

Masdalina Pane, a health policy expert at the Indonesian Epidemiologists Association, said there is a long way to go before sanctions are considered.

"We are still far from reaching the goal of vaccinating priority groups, such as health workers and front-line public workers, much less the general population, and we still do not have enough doses of vaccine," he told Arab News.

“Lo que importa más es tener listos los suministros de vacunas primero. El gobierno no debería ocuparse demasiado de sancionar a la gente. Debería ser el último recurso. Lo que el público necesita más ahora son comunicaciones y promociones persuasivas ".

Según una encuesta nacional en línea de 115.000 personas de las 34 provincias realizada en septiembre del año pasado, alrededor del 65 por ciento de los encuestados dijeron que estarían dispuestos a recibir la vacuna COVID-19 si el gobierno la proporcionara. Casi el 8 por ciento dijo que no lo aceptaría.

The survey, conducted jointly by the Ministry of Health, the Indonesian Immunization Technical Advisory Group, UNICEF and the World Health Organization, found that the remaining 27 percent had doubts about the government's intention to distribute COVID-19 vaccines. People in this group are critical to a successful vaccination program, but the survey noted that their numbers should be interpreted with caution, as there may be varying levels of concern about vaccines due to the limited information that was available at the time of the vaccination. poll. on the type of vaccine, when it would be available and safety profiles.

El martes, el regulador de alimentos y medicamentos de Indonesia, BPOM, autorizó el uso de emergencia de 13 millones de dosis de vacuna que la estatal Bio Farma terminó de producir la semana pasada, utilizando materiales proporcionados por Sinovac.

“Actualmente estamos aumentando nuestra capacidad de producción para producir vacunas a partir del material a granel de Sinovac, mientras que (también) seguiríamos importando vacunas de otros fabricantes, como Moderna, Pfizer, AstraZeneca, Sinopharm y Novavax”, dijo Honesti Basyir, CEO de Bio Farma.

As of Tuesday, 1,233,959 cases of COVID-19 had been confirmed in Indonesia, including 10,029 new infections. Of these, more than 160,000 remain active and the death toll in the country has exceeded 33,000.Organización Mundial de la Salud, reveló que el 27% restante tenía dudas sobre la intención del gobierno de distribuir las vacunas COVID-19. Las personas de este grupo son fundamentales para el éxito de un programa de vacunación, pero la encuesta señaló que sus cifras deben interpretarse con cautela, ya que puede haber distintos niveles de preocupación sobre las vacunas debido a la escasa información disponible en el momento de la encuesta sobre el tipo de vacuna, cuándo estaría disponible y los perfiles de seguridad.

El martes, el regulador de alimentos y medicamentos de Indonesia, BPOM, autorizó el uso de emergencia de 13 millones de dosis de vacuna que la estatal Bio Farma terminó de producir la semana pasada, utilizando materiales proporcionados por Sinovac.

"Actualmente estamos aumentando nuestra capacidad de producción para producir vacunas a partir del material a granel de Sinovac, mientras que (también) seguiríamos importando vacunas de otros fabricantes, como Mod

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