Un día como hoy, 3 de agosto, pero de 1566 sucede la conclusión de la primera conspiración de independencia en México

 Un día como hoy, 3 de agosto, pero de 1566 sucede la conclusión de la primera conspiración de independencia en México, capital de lo que entonces apenas tenía unas décadas de haberse estrenado como Nueva España. Hubieron dos medios hermanos llamados de igual manera, Martín Cortés (como el padre del Conquistador), uno criollo (nacido en Cuernavaca en 1532) y el otro mestizo y junto a su otro medio hermano Luis Cortés fueron invitados a una conjura hecha por algunos prominentes. Martín Cortés, el español, fue de inmediato reconocido como el heredero de las voces de los hijos de los conquistadores a quienes las Leyes Nuevas les limitaban derechos, terrenos y fortunas por hacer desaparecer las encomiendas, unidad económica inicial de las tierras conquistadas en la Provincia de Indias (como se llamó a lo que luego sería el Virreinato de Nueva España). La coyuntura la dio la muerte del virrey Luis de Velasco, lo que aceleró el plan de poner a Martín Cortés, el español, como rey de la Nueva España, teniéndose gente lista en Veracruz para secundar esta moción, pero el heredero del Marquesado del Valle de Oaxaca de Martín Cortés no deseaba decir si apoyaba o no este plan, jugando el papel del deseado. Alrededor de un banquete realizado en casa de Martín, y al calor de las copas, es que finalmente se decide abiertamente a no enfrentarse al rey de España, Felipe II.

El resto fue lógico, la Audiencia se enteró del plan, detuvo a todos el 16 de julio de 1566, les sentenció de sedición en contra del rey y todos serían pasados a degüello. Eventualmente llegó el virrey (Gastón de Peralta) y absolvió a los medios hermanos Cortés, a quienes mandó a España para que se encargaran allá de ellos, lo mismo que a otros prominentes a fin de evitarse un problema mayor. Los protagonistas principales de esta conspiración, Alonso de Avila y su hermano Gil González de Avila, fueron degollados el 3 de agosto de 1566 en la Plaza Mayor, hoy Zócalo, frente a sus propias casas. Durante las excavaciones del Templo Mayor, en 1978 se encontró una placa de la época que habla justamente de este hecho, y dice (sic): "Estas casas heran de Alonzo de Avila Alvarado, vezino de esta Ciudad de México al qual le fve confizcadas estas casas (...) por traidor (...) ejecutada la sentencia de su persona en esta área (...) donde sus casas fueron derribadas... Año de 1567". Monedas acuñadas en México durante esa época por Luis Rodríguez y Bernardo de Oñate como ensayadores. Acá más información si te interesa esta interesante parte de nuestra historia... http://revistas.uned.es/index.php/…/article/view/17553/15009

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