Palestina. El prisionero jordano Abdullah Barghouti se enfrenta a brutales torturas y negligencia médica en una prisión israelí, según su hija
Resumen Medio Oriente, 26 de abril de 2025.
alestina ocupada (Quds News Network) – El ingeniero y luchador de la resistencia palestino-jordano encarcelado Abdullah Barghouti enfrenta severas torturas y negligencia médica en una prisión israelí, según su hija Tala Barghouti.
En una publicación de Facebook, Tala describió la impactante escena que presenció el abogado de su padre durante una reciente visita a la prisión. “Salió llorando, sin poder hablar”, escribió Tala. “No fue una visita normal. Fue un shock humano; mi padre es torturado a diario y su dignidad es destrozada sin piedad”.
Abdullah Barghouti, quien cumple 67 cadenas perpetuas, fue arrestado por las fuerzas israelíes en 2003 y desde entonces ha soportado dos décadas de duro encarcelamiento.
Según Tala, los guardias de la prisión israelí golpeaban a su padre durante horas todos los días. Según informes, lo sacaban de su celda, lo dejaban solo y lo agredían con barras de hierro y látigos de cuero. “Tiene los huesos rotos y el dolor es insoportable”, dijo. “No puede mantenerse en pie ni moverse”.
Barghouti sufre heridas abiertas e infecciones dolorosas. Tala afirmó que la prisión no ofrece tratamiento médico. En cambio, sus compañeros de prisión intentan desinfectarle las heridas con jabón lavavajillas, ya que no tienen acceso a suministros ni atención médica adecuados.
No puede acostarse para dormir. Duerme sentado debido a las fracturas y el dolor. Pesó solo 70 kilogramos, escribió Tala.
La familia insta a una intervención inmediata. Tala instó al gobierno jordano, al Ministerio de Asuntos Exteriores y a la Embajada de Jordania a tomar medidas urgentes. «Deben visitarlo, presenciar la tortura con sus propios ojos y salvarlo antes de que sea demasiado tarde», suplicó.
Barghouti fue arrestado en 2003 mientras llevaba a su hija enferma al médico en Al-Bireh. Fue interrogado durante tres meses y posteriormente condenado a lo que se cree es la pena de prisión más larga de la historia: 67 cadenas perpetuas por unirse a la resistencia.
Pasó 10 años en régimen de aislamiento. Israel lo sometió a abusos psicológicos, incluso confinándolo con israelíes con problemas mentales.
En más de 20 años tras las rejas, su familia sólo lo ha visitado seis veces.
Ahora, advierte su hija, su vida está en peligro real.
“Lo torturan a diario”, dijo. “Si nadie se atreve, lo perderemos”.
Fuente: Quds News Network
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