ANGELA PERALTA GUERRERA DE LA PAZ
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EN HOMENAJE AL 171 NATALICIO (6 DE JULIO) DE MEXICO AL MUNDO
*Erubiel Ángel
Camacho López con dedicación a YOATZIN
“El siglo veintiuno será
religioso o no será” André Malraux (1901-1976) escritor
y político francés
"De nada presumo, ni aun de aquello por lo cual el
mundo me ha dado un nombre que acaricio, no por orgullo, sino por las lágrimas
que me ha costado" ¡Ojalá que estas pobres flores regadas con mi llanto,
no sean un pretexto para que se me ultraje, cuando me parece que con ellas a
nadie ofendo!" Ángela Peralta
El 1 de septiembre del año 1883, a las 9 de la noche, la
Secretaría de Gobernación recibía un telegrama extenso en donde se informaba el
deceso de la famosa cantante mexicana: Ángela Peralta en el puerto de Mazatlán.
Días después se anunciaba en la Ciudad de México, la cual contaba con cerca de
220 mil habitantes y escasa urbanización, grandes homenajes póstumos y un gran
duelo nacional, por parte del gobierno, artistas, poetas, intelectuales,
funcionarios y dependencias oficiales, presididas en ese entonces, por el
presidente Manuel González, sobre el cual pesaba la acusación de ser un
“títere” del general Porfirio Díaz, en honor a la gran artista. Justo en ese
mismo año empezaría la primera gran crisis económica mundial decretada desde
Wall Street. Su deceso fue el 30 de agosto, cerca de las 10 y media de la
mañana, después de haber cumplido su última voluntad y deseo en su lecho
mortal: el de casarse en in artículo mortis con su representante y también
viudo como ella, el licenciado, poeta y penalista quien después llego a ser
diputado en el periodo porfirista y director de la Biblioteca del Congreso;
Julián Montiel y Duarte. Su muerte fue consecuencia de haber sido contagiada
desde su llegada a Mazatlán, Sinaloa, al Hotel Iturbide, cuarto número 10,
lugar en donde hoy se asienta el teatro
y la Casa de la Cultura que lleva su nombre, el 22 de agosto, mismo día en que
se dice, canto a Capela la Paloma desde un balcón, (canción que mucho gustara a
la emperatriz Carlota), por la fiebre Amarilla o el vómito negro, (el Zika hoy
se le llamaría), lo que causo también la muerte y de casi toda su compañía
artística la mayoría italianos, tenor, músicos y cerca de 74 miembros de 80 que le
acompañaban. Sobreviviría casualmente también un joven violinista de
Guanajuato, que sería famoso a nivel nacional e internacional, Juventino Rosas
(1868-1894) del cual hablaremos más adelante. Es enterrada ese mismo día a las
5 de la tarde en el panteón 2, mismo que adoptaría su nombre años después, en
un féretro cargado por cuatro soldados y pocas personas acompañándolo en un
silencio sepulcral pesado e imponente. Con su fallecimiento, acababa una
leyenda viviente y comenzaba un mito que aun subyace en la memoria colectiva de
nuestro pueblo mexicano, siendo un referente obligado del siglo diecinueve y de
nuestra historia nacional plagada de tragedias, guerras, terremotos, revueltas,
asonadas, mortíferas epidemias, hambrunas y múltiples calamidades naturales.
Exhumada en abril de 1937,
fueron llevados sus despojos mortales a la Rotonda de los Personajes Ilustres,
(antes de los hombres ilustres) entre festejos y festivales en la Ciudad de
México, donde una placa dice en su tumba: “EL RUISEÑOR MEXICANO. CANTO COMO
NADIE HA CANTADO EN EL MUNDO Y FUE NUESTRA CONSPICUA EMBAJADORA EN LOS MAS
ALTOS EMPORIOS DEL ARTE MUSICAL” NACIÓ 1845 MURIÓ EN 1883. Enterrada junto a
los poetas, Amado Nervo y Luis G.
Urbina. POLVO, POLVO, NADA.
NACIMIENTO E INFANCIA
Nuestro Ruiseñor era capitalina, chilanga o mexiqueña, había
nacido en la “Real Ciudad de México” en un fatídico año de 1845, ya que en ese
entonces habíamos ya casi perdido más de la mitad de nuestro territorio
nacional en guerra contra los “gringos”, cabe aclarar, que este peyorativo
acuñado a los estadounidenses se había creado en México y era popular entre los
habitantes en esos tiempos, ya que por el uniforme verde de las tropas
invasoras, la gente les decía “verde vete” en inglés para que entendieran su
nada grata estancia en el Palacio Nacional ocupado. Registrada en el libro de
bautizo 654, con el nombre de MARÍA DE LOS ÁNGELES MANUELA TRANQUILINA CIRILA
EFRENA PERALTA Y CASTERA. Su casa en el centro de la ciudad, aún conserva una
placa grabada en piedra, donde se asienta su lugar de nacimiento en la calle de
Aldaco número 11. Dice así; “A la
eminente Diva Ángela Peralta quien nació en este lugar” 1926, a unas cuadras de
la calle-andador misma que sigue conservando su nombre junto al Palacio de
Bellas Artes, por lo que todo acto que se realiza en ese recinto y calle, es un
homenaje a su honor. Su madre durante su embarazo fue testigo del terrible
terremoto de “Santa Teresa” el 9 de abril a las 3 y media de la tarde, cuando
por más de cuatro minutos miles de casas de adobe sucumbían junto al templo de
Santa Teresa, cerca de la Catedral Mexicana en el Zócalo, el cual desde ese
momento ya no se utilizó nunca para iglesia, siendo destruidos allí, El famoso
“Cristo del Cardonal” que emanaba agua permanentemente, siendo de un árbol de
ahuehuete, sagrado para los aztecas porque se decía que “hablaba” así como los
murales de la “Capilla Sixtina Mexicana” pintadas las cúpulas por el reconocido
pintor valenciano Rafael Ximeno. 13 años después otro temblor a las 9 y media
de la mañana duraba cerca de 6 minutos con peor intensidad, proveniente también
de la temida “Brecha de Guerrero” calculándose en más de 8 grados Richter, siglo de temblores era
el siglo diecinueve. “…Y retiemble en su centro la Tierra…”
Su padre al parecer era un modesto peluquero accidentado,
enfermizo y tenía dos hijos más, Manuel mayor que ella y Elena menor, su madre,
una clásica madre mexicana apegada y abnegada,
mestiza como el 98 por ciento de los mexicanos, origen humilde y le
ayudaba a los mandados a su papa y su mama, la que llegaron a emplearla de
sirvienta con una señora de Puebla a los 8 años, en donde hasta la actualidad
hay un monumento-pináculo en un barrio poblano en su honor. Pero no fue sino
hasta los 9 años de edad en que fue llevada por su maestro el reconocido
director de ópera y jurado del concurso
del Himno Nacional Mexicano, Agustín Balderas, a conocer a la prestigiada
Henriette Sontag, contratada por el Teatro Nacional de México en 1854, para la
próxima temporada de Ópera y cantar el reciente aprobado en concurso, convocado
por el presidente Santa Anna “el mocho”(así le decían por haber perdido una
pierna en una batalla, el cual contaba con gran apoyo eclesiástico y toda la
curia religiosa católica, de allí que a los apegados mucho a la religión se les
llame también “mochos”), Himno Nacional Mexicano. Hay que recordar que
Enriqueta Sontag o la Condesa Rossi como
también se le llamaba, era una hermosísima señora prusiana nacida en 1806 y que
había cantado por primera vez en la historia junto al gran sordo Beethoven la
novena sinfonía, actual himno de la Unión Europea compuesta por 28 países, por
lo cual era más que famosa y reconocida como la mejor soprano del mundo. Esta
prima donna, accedió a conocerla, no sin antes soportar antes y con paciencia distintos
halagos de la aburrida aristocracia de la cual estaba cansada de que les
llevaran a sus hijas a oírlas cantar.
Cuando vio aparecer a la pequeñuela en la sala de su
residencia por única vez en su vida, quedo aturdida por la sorpresa. Pobremente
vestida, chaparra y regordeta, de piernas flacas y torcidas, la niña tenía una
cara ancha, el cutis de un moreno amarillento y picado por huellas de viruela,
la nariz chata, gruesa y una boca enorme. Pero lo menos grato y desagradable,
eran sus ojos saltones y estrabicos. Con una acentuada torpeza de sus
movimientos por el miedo de estar frente a la admirada cantante, el saludo fue
con una total falta de gracia y sin más preámbulos se puso a cantar la Cavatina
de la opera Belisario. La expresión de la gran diva alemana cambio de expresión
al reconocer y percibir un timbre de increíble dulzura y voz potente que su
garganta modulaba con una asombrosa flexibilidad. Entusiasmada y con
desbordante ánimo, cuando acabo la niña de cantar, el abrazo y beso con una
enorme ternura fue su respuesta, aparte
de algunos apuntes de partitura y ejercicios que puso en sus manos.
-¿Cómo te llamas, maravilla? Pregunto en un buen español
Enriqueta Sontag
-Ángela Peralta… contesto la chiquilla
-Si te llevaran a Italia, llegarías a ser una de las
cantantes más grandes de Europa, le dijo antes de retirarse a descansar.
Pronostico que
llegaría a ser una verdad indiscutible realizada años después.
Enriqueta Sontag moriría una semana después de haber viajado
al pueblo de Tlalpan y contagiarse de Cólera.
Su muerte fue una conmoción mundial, cientos de telegramas
de todo el orbe lamentaban lo sucedido, gobiernos y artistas estaban conmovidos
por su repentina muerte en tierras mexicanas. A su entierro acudían miles de
personas, se había declarado oficialmente 3 días de duelo. Solemnes exequias se
realizaron y se decretó luto universal. Una orquesta encabezaba la procesión,
donde miles de personas entre funcionarios y diplomáticos extranjeros se daban
cita en la calle de San Francisco, hoy
Madero hacia el panteón de San Fernando. México tenía una deuda al mundo
que después sería compensada con Ángela Peralta escribirían los diarios años
después. Sus restos fueron llevados a su natal Dresde, gracias a los tramites
de su esposo el conde Rossi meses posteriores
.
VIAJE A EUROPA Y ESTUDIOS EN ITALIA
Después de arduos estudios musicales con los mejores músicos
de la época, Manuel Barragán, solfeo,
Agustín Balderas, canto, piano y composición, Cenobio Paniagua, piano y
composición, conjuntamente con idiomas que abortaron su infancia, el miércoles
18 de julio de 1860, la alta sociedad mexicana fue testigo del nacimiento de un
astro en el firmamento musical con la presentación de Ángela Peralta en el Gran
Teatro Imperial, a bombo y platillo se anunciaba y a tambor batiente se presentó
con un éxito inigualable a sus escasos
15 años, naciendo a la fama, una jovencita que produjo un estremecimiento
musical, con el papel de Leonor de la
opera el Trovador de Verdi, siendo el director y pianista su querido maestro
Balderas. En esa presentación la critica
la catalogo como una futura gloria nacional, con un triunfo publico
indiscutible por su “ejecución correcta con suma precisión, inspiración y
sentimiento “dirían los periódicos.
Siete meses después gracias a un ocasional mecenas que
contribuyo con el pago del viaje, se trasladó a Italia para estudiar,
acompañada de su padre y su maestro Balderas. Salió rumbo a España vía Veracruz
en un barco de vapor, travesía que duraba cerca de 40 días.
Desembarcaron en el puerto de Cádiz a la ciudad del mismo nombre, donde su
padre decidió que su hija fuera escuchada por los españoles de la “madre
patria” como se le decía a España en esos tiempos. Grande fue su sorpresa ya
que el triunfo fue total. El diario Constitucionalista de Cádiz publico una
crónica que entre otras cosas decía: “….México es tierra capaz de producir
voces admirables…nos ha enviado como regalo y prenda de reconciliación una
soprano que debe bastar para perdonar a México sus desafueros…la señorita
Ángela Peralta va a Italia a completar en Milán y en Roma su educación
musical…le predecimos que su nombre no será conocido por donde quiera que vaya;
no la reconocerán por otro, por el de “El Ruiseñor mexicano”. Ya en Italia se
perfecciono en la ciudad de Turín, con el célebre maestro Francisco Lamperti,
quien al escuchar a su nueva discípula, exclamo: “Sei Ángela di voce e di
nome”. (Eres Angélica por voz y por nombre).
SU ESTANCIA EN EUROPA
Sobre sus estudios y presentaciones con éxitos rotundos de
nuestra embajadora del arte y cultura mexicana, existe bastante información en
internet, su brillante trayectoria la hizo principalmente en el extranjero, de
sus tres giras en Europa, 1860-1865,1867-1871 y 1872-1874, así como fechas y lugares que recorrió con
presentaciones todas con éxito indiscutible en los mejores teatros del mundo,
incluso debuto en el teatro cuna de la ópera, con el público más exigente de
todos: “Scala de Milán” en donde su triunfo fue rotundo. En Turín obtuvo varios
contratos para diferentes ciudades, siendo a los 18 años de edad una completa
triunfadora por su calidad artística. El periódico local “La Monarquía
Nacional” en su edición del 22 de agosto de 1862, citaba: “Ayer por la noche a
la última y definitiva representación de la Sonámbula en el Teatro Víctor
Manuel. Sentimos la necesidad de decir una palabra más de encomio para la joven mexicana, la señorita
Peralta, que interpreto tan dulcemente las melodías, siempre nuevas y siempre
deseadas de Bellini. Esta artista domina de manera admirable el Bel Canto
italiano que ha valido a nuestro país tantos elogios de los extranjeros; ella
siente ese canto, lo expresa con notas frescamente moduladas con respiración
larga y bien sostenida y con voz insinuante. Por ello encuentra en quien la
escucha el camino del corazón y también de la Naturaleza que fue generosa al
dotarla con aquellos dones que aprovechados mediante un estudio severo y
asiduo, producen a los grandes maestros…, la señorita Peralta es americana,
pero podría enseñar el modo de pronunciar a muchos de nuestros artistas.
Demostró poseer una sensibilidad exquisita y una inteligencia verdaderamente
soberana”.
Sobre sus presentaciones se cuentan varias anécdotas muchos
de ellos trasmitidos de manera oral, algunos de ellos exagerados o de dudosa
veracidad, como cuanto canto en Italia frente el Rey Víctor Manuel II en donde
ante gritos de ¡Ángela, Ángela¡ salió cerca de 32 ocasiones a recibir los
aplausos de un público entregado a la jovencita. Incluso se dice que llego a
presentarse al Papa Pio nueve IX en un relato en donde se dice que cuando
estaba frente al sumo Pontífice en Roma, antes de realizar su presentación, se
le dijo al representante de San Pedro que era mexicana y no de Italia, centro
mundial del Bel Canto y crisol de artistas de la única escuela italianizante
musical y operística, no lo creyó. Y ya después de haber cantado Ángela Peralta, el papa se le hinco, le beso
las manos, diciendo que así se canta en el paraíso y que ya podía morir
tranquilo porque ya conocía y había escuchado como “cantaban los ángeles en los
dinteles de la gloria”.
Sobre sus estancias en Europa de Ángela se quedara en
el tintero mucha información, solo nos
limitaremos a destacar, sus actuaciones en los mejores teatros de Egipto,
Lisboa, Bolonia, nombrándola de la Sociedad Filarmónica de esa ciudad. Entre
tanto en nuestra nación seguía una lucha intestina fuerte entre liberales y
monárquicos, por lo cual gobernaba Maximiliano de Habsburgo, traído por los
conservadores en el llamado segundo imperio mexicano entre otros por el general
Juan Nepomuceno Almonte, hijo del prócer José María Morelos, niño guerrillero
de Cuautla y ex embajador de México en Washington. El vástago de Morelos y
combatiente contra el ejército norteamericano en la batalla de la “Angostura”,
pensaba que trayendo a los franceses detenía la invasión norteamericana futura.
Maximiliano quien quería ser el sucesor de Moctezuma y era voluble, idealista e
inconsistente como gobernante, manipulado por su ambiciosa mujer que acabo loca
y que lo llevo a la muerte, porque él pensaba en su abdicación y Carlota no lo
dejo. Maximiliano busco en su imperio
promover entre los pobladores el gusto por la Opera, la cual gustaba mucho a su
incondicional y niño héroe mexicano a los 14 años y el ex presidente más joven
y honesto que ha tenido México durante un año en 1860, el valiente general
Miguel Miramón, por lo que Maximiliano mando construir el TEATRO NACIONAL ya
que a la gente le gustaba y era algo conocedora y admiradora de la ópera.
Sabedores de sus éxitos de la Peralta en Europa, le enviaron un contrato que
ella acepto de inmediato porque quería regresar a su patria, haciendo las
gestiones el emperador francés, llego
después de haber permanecido unos meses en Paris, Francia, en donde actuaba
para la aristocracia, embarcándose después en un vapor francés llegando a
Veracruz el 19 de noviembre de 1965.
SU RETORNO A MÉXICO
Un empresario italiano Aníbal Bianchi, estaba organizando en
la Ciudad de México una compañía lírica, con un elenco predominantemente
italiano, pero al informarse Bianchi de los éxitos de Ángela Peralta en Europa,
le envió un contrato que la artista acepto gustosa. La prensa mexicana organizo
una campaña publicitaria a favor de la soprano “Esta joven que ha llevado con
gloria el nombre de México por toda Europa y hasta en los más apartados climas
de África, ha desechado partidos brillantes por volver, aunque por poco tiempo,
a visitar su adorada Patria, a dar un abrazo a sus paisanos y amigos….a
rechazado a su turno las propuestas que se le hicieron para ceder su contrato,
entre ellos una de treinta mil francos. La empresa cree hacer hecho su deber y
no se arrepentirá nunca. Esta artista, este astro luminar de la profesión, ha
trabajado en casi todos los primeros teatros pasando de ovación en ovación
encontrando siempre el camino regado de flores, sembrado de coronas. Se le
llama la sola rival de Adelina Patti, y muchos públicos inteligentes le dan la
preferencia por su voz conmovedora y por la limpieza de su ejecución”.
Ángela Peralta ya insigne triunfadora en los mejores lugares
del mundo donde había puesto en alto el nombre de nuestra patria y había
cautivado al público europeo, llego a la ciudad de México entre las más grandes
demostraciones de júbilo de nuestra compatriotas, ya que había dado a conocer a
nuestra nación como embajadora artística, emisaria del arte y la cultura
mexicana, aunque al pueblo no gustaba mucho la opera por no conocerla música
culta, asistió con una ganar locas por vitorear libremente a México oprimido
por la administración franco imperialista. Las crónicas de su llegada y
recepción apoteótica describen el entusiasmo popular llegando más allá de
Mexicatzingo, cerca de Iztapalapa a las seis de la tarde, donde dejo la
diligencia y tomo una carreta tirada por cuatro caballos que la condujo a la
garita de San Antonio Abad, allí desde una improvisada tribuna, se leyeron
discursos, versos y le fue ofrecida una hermosa corona por los alumnos de la
Academia de San Carlos, se tocaron dianas por parte de la banda del Batallón de
Policía y el himno nacional. Después se organizó una comitiva de varios jinetes
con hachas encendidas, miles de personas escoltaban y cargaban el carruaje
entre sus hombros, lluvias de flores de colores arrojadas por familias desde
los balcones, todas las clases sociales participaban en este evento hasta
pasadas las 8 de la noche, saludaban su entrada miles de señoras con pañuelos
blancos acompañadas de sus hijos con banderas tricolores. Ángela lloraba de
emoción y casi se desmayaba del entusiasmo y gratitud, cuentan los relatos.
NOMBRAMIENTO PARA ANGELA
Maximiliano y Carlota la nombraron “Cantarina de la Cámara
Imperial” y le regalaron un aderezo de diamantes parecidos a los que le habían
regalado en Francia unos condes y que ambicionaban varios aristócratas entre
ellos el general Bazaine, por lo que Ignacio M. Altamirano declaro: “Toda la
frescura de los laureles que Ángela Peralta había traído de Europa, se
marchitan tristemente, vergonzosamente, ante la aceptación de ese nombramiento
de una corte Bufa y oprobiosa”. Pero pese a todo eso sus triunfos eran
definitivos, estrenando obras y cantando como la opera mexicana ILDEGONDA de
Melesio Morales. El público llenaba totalmente los teatros en donde se
presentaba en donde era común regalos, flores, versos y una compañía hasta su
casa entre partidarios que quitaban los caballos de los carros del carruaje
para llevar el coche entre abrazos y vítores. Poco antes de salir para Puebla
contrajo matrimonio con su primo, poeta, escritor y literato, Eugenio Castera,
hermano de otro gran periodista y escritor, Pedro Castera, autor de la novela
corta “Carmen”, el cual le regalo una
cadena de plata y un Cristo negro que llevara siempre hasta su muerte. Pero con
el tiempo su esposo le pegaría tratándola muy mal, perdiendo la razón
tristemente, enloquecido por la esquizofrenia, moriría en un hospital de
dementes en Paris años después. Su hermano moriría en circunstancias parecidas
por demencia en la capital mexicana a los 60 años.
El 6 de enero de 1866 en el puerto de Veracruz dio su última
función de opera en donde la gente
gritaba de emoción vivas a Peralta, México y gritos y consignas contra el
imperio de Maximiliano que la Peralta apoyo en forma patriótica. Al día
siguiente retorno a Europa pasando por la Habana en donde se presentó en varias
funciones al público de esa ciudad. Canto después en Nueva York y se embarcó a
Europa a fin de 1867 en donde residió en
Madrid y actuó con enorme éxito durante cuatro meses, muchas de sus
presentaciones fueron en Barcelona entre aclamaciones y reconocimientos
diversos.
Hay que recordar que la primera ópera que se cantó en Nueva
España fue llamada “El Filósofo Burlado” representada en el Coliseo de México
en 1803, se anunciaba como “zarzuela y ópera bufa”. Aunque el traductor cambio el título, de cualquier
forma se inició con esto la iniciación en América de la opera como arte lirico
y dramático de representación. Desde finales del siglo XVIII se cantaron operas
italianas en Filadelfia y Nueva York sustituyendo las tonadillas españolas por
operas italianas. Entronándose este género en el Coliseo de México, en 1827 se
cantó la primera ópera en italiano (El Barbero de Sevilla) aunque ya antes se
habían presentado obras del mismo autor, pero mal traducidas al español. El
verdadero ingrediente que vino a dar nacimiento a la canción mexicana fue la
ópera, desarrollado con gusto por la
melodía italiana entre los habitantes de las ciudades. Pronto esta moda
descendió a las clases campesinas al grado de que en las rancherías más
alejadas y apartadas, los labriegos caminaban con sus organillos en la boca con
trozos de ópera que ni ellos sabían que existían (un agente viajero vendedor de
la casa Hohmer fabricante de organillos, dijo que en ninguna parte vendió como
en México). Se tocaban marchas, vals, mazorcas, chotis, polcas y habaneras y ya
después hacia el siglo XX se fue desarrollando el nacionalismo musical
mexicano, dejando atrás la escuela italianizante, la francesita y la germánica,
borrando estilos y tendencias del romántico siglo XIX, para encaminarse a el
moderno siglo XX.
Cuando acabo el imperio efímero de Maximiliano liquidado en
Querétaro, la sociedad mexicana tenía miedo, se resintió la zozobra política,
los espectáculos liricos se acabaron, la gente pensaba que la opera no volvería
a triunfar, por esos años el esposo de la Peralta agravaba su estado de salud,
por lo que Ángela decide regresar. En
esos tiempos se estrenó la opera mexicana GUATIMOTZIN de Aniceto Ortega el
“Chopin mexicano” (eminente medico estudiado en Paris, músico de talento
extraordinario). El 28 de julio de 1872 Ángela forma su propia compañía auto
empleándose, “COMPAÑÍA ÁNGELA PERALTA” para competir sanamente con otras
operas italianas y se convierte en una
empresaria destacada. Después de la muerte del presidente Benito Juárez
envenenado por la una planta que le llamaban la “veintenilla” decían los
chismes populares, empezarían a resurgir los espectáculos operísticos. De
Juárez se ha querido borrar en la historia su complicidad y participación al
ordenar matanzas de sus paisanos zapotecas en Juchitán, Oaxaca, la de los
burócratas 2 de octubre de 1871 en Balderas y la destrucción del Templo
sanatorio de “San Andrés “en donde hoy están oficinas de la casona de
Xicoténcatl del Senado de la República y el Museo Nacional de Arte, demolido
justo después de haber llevado el cuerpo de Maximiliano ese lugar para
embalsamarlo con cera y ser llevado a Europa.
Si bien el ambiente social era asfixiante, ya que el clero
era censor y controlaba toda actividad intelectual, social y artística, muchos
artistas sobresalieron pero se morían de hambre, tal es el caso del genio
Juventino Rosas, autor del famoso y tocado por varios años como inicio de todas
las fiestas; Vals “Sobre las Olas”, el cual algunos lo descalifican negándole
su autoría, creador incomprendido y sin recursos económicos muere en Cuba joven
a causa del alcoholismo, caso similar y de tragedias son como el del gran compositor “el Indio de Tecámac”,
Felipe Villanueva, quien también muere joven víctima del Alcohol, ya no digamos
del quien compuso los versos de nuestro Himno Nacional, Luis González
Bocanegra, sobrino de un ex presidente de México que duro una semana en la
presidencia, el cual muere de fiebre por contagiarse de tifo, perseguido por
políticos injustamente, además nadie le pago como había sido convenido en el
concurso de Santa Anna, por la composición de nuestro glorioso himno. Julián
Carrillo Trujillo inventor del sistema y revolución musical del sonido 13,
jamás se le ha reconocido esta aportación mundial en nuestra patria, por haber
sido diputado en la época del dictador
Victoriano Huerta, pero a él le
debemos los arreglos del Himno Nacional.
SURGE OTRO AMOR GRAVE DELITO Y CRASO ERROR
En 1877 surgió en la vida de la Peralta un incipiente poeta
y abogado de profesión, viudo igual que ella por prematura muerte de su
esposa, el licenciado Julián Montiel y
Duarte, amigo de Justo Sierra, quien había publicado sin éxito un libro de
poemas, el cual le dedico unos versos en una tertulia: “Muchas, muchísimas flores
y luces indeficientes para coronar las frentes de ese par de ruiseñores”. Este
personaje quien hablaba y escribía en italiano algunas poesías, se hace su
representante artístico y apoderado, el cual le publica unas composiciones de
piano propias de Ángela en 1875, pero con el tiempo se hace su enamorado algo
que no era bien visto en la sociedad debido a que las “viudas negras” en el
decimonónico siglo, tenían que resignarse a una vida triste y de duelo
permanente, vestir siempre de negro y con un velo negro tapando toda la cara, sumidas en el resignación eterna. Con una
idiosincrasia puritana que rayaba en lo inverosímil, vulgar y corriente
mojigatería barata. Condenadas a quedarse en casa velando la memoria de su ex
marido porque les era prohibido volverse a casarse, ya que el divorcio era un grave pecado, hasta
la fecha en todos los dogmas de la iglesia católica se mantiene esta creencia,
además que tener un sentimiento de culpa que llevar a cuestas, permeando toda
su existencia triste.
Durante las tres temporadas que visita Europa, siempre los
escenarios europeos codiciaban su presencia, aparte de que algunos condes la
pretendían por su fama, Rusia gustaba de sus cantos, Francia la reconocía pero
la crítica era muy aguda por su aspecto regordete, pero en su patria, a raíz de
que la veían con su representante, era condenada en los chismes y corillos fáciles de la sociedad mexicana en
donde el analfabetismo alcanzaba un 90 por ciento de la población y la
banalidad era la forma de vida junto con la frivolidad y trivialidad, la
estigmatización social era impulsada desde los pulpitos eclesiales, las cuales
a las mujeres condenaban si eran “disolutas”, de “cascos ligeros” y no tenían
“buen proceder”, ya que la vida religiosa regia la vida junto a los
campanarios, las oraciones de los ángelus, la señal de la cruz en las manos,
hincarse cuando las campanas daban la
señal de llamar a misa en donde quiera que uno estuviera, lo que era casi obligatorio para toda la población, donde
hombres estaban de un lado y las mujeres cubiertas las cabezas estaban del otro
lado y sin asientos en las iglesias. Era el siglo diecinueve de una vida
atormentada, las gentes, víctimas de los destinos puritanos y clericales, una
época sombría, oscura y fatalista, sociedad plena de prejuicios morales, gentes
murmuradoras, acosadoras, difamadoras, con
referidas ofensas clandestinas a las mujeres, por eso las vicisitudes y
los sinuosos caminos de la vida, hacían difícil trascender a la historia por
las reglas absurdas impuestas, tabús preconcebidos, por un accidente ocasional tormentoso
y fortuito existencial, en donde la muerte era inevitable y el sufrimiento no
era opcional.
Los mexicanos que antaño la vanagloriaban con afecto,
admiración y estimación, la condenaban
por ignorancia, ya que andaba decían las
lenguas viperinas con sarcasmo grotesco como una “mujer de la calle”,
“pecadora”, “pecaminosa”, la boicoteaban, castigaban, reprochaban, repudiaban,
envidiaban, cuando otrora época le habían puesto su nombre con letras de oro al
Teatro Nacional, que cargaban su carruaje desmontando sus caballos previamente
en sus presentaciones, tanto en la llegada como en la despedida, montando un
busto de bronce en la entrada del Teatro Nacional, hecho por el escultor José
Días, ahora la rechazaban, si a esto le añadimos, como los periódicos
propalaban noticias malévolas sobre la vida privada de Ángela, los juaristas no
perdían ocasión para atacarla, si a esto le añadimos el asesinato de un
extranjero y llevado su cadáver desfigurado del rostro al Teatro Nacional donde
hacia sus representaciones, hicieron que La Peralta suspendiera toda sus
funciones en México, por lo que planeo una gira en provincia, sentenciando lo
cual hizo cabalmente que nunca más cantaría en la ciudad de México. “Espero no
regresar nunca jamás a estos lugares”, sentencio enfáticamente.
Su última actuación en la capital seria el 18 de noviembre
del 1882 en un festival benéfico, porque la gente ya no concurría a sus
espectáculos y si asistía era con escasas 20 personas que irrespetuosamente
siseaban con burla, ella gustaba cantar
en eventos para la beneficencia pública, donde las ganancias iban a dar a los
pobres, ya que ella personalmente se dirigía casa por casa a vender boletos,
regalar tamales y atole, junto con juguetes para los niños a las clases más
desprotegidas. De allí se dirigió a una gira por provincia de la cual nunca
regresaría, inaugurando el Teatro Degollado en Guadalajara, antes llamado Juan
Ruiz de Alarcón, pasando por San Miguel
de Allende en Guanajuato, donde hasta la fecha el principal teatro de ese lugar
lleva su nombre.
ÁNGELA PERALTA NUNCA MORIRÁS
Clasificada como gloria nacional Ángela Peralta es asimismo junto a la “Décima Musa” y novohispana Sor Juana Inés de la Cruz,
quien también tuvo un final trágico similar: víctima de las epidemias en el
pináculo y culmen de su exitosa trayectoria y cenit creativo, destacando su
profunda madurez estética ajena a la
mediocridad, sin parangón en la historia, siendo reconocidas estas brillantes
genios adelantadas a la época que se hacen
inmortales, llegando a ser las mejores
joyas artísticas del país, tesoros nacionales pero con los bemoles del drama,
carga fatalista y nefasta de la eterna maldición femenina de Casandra, la profeta muda agorera y
pitonisa.
¿Pero quién fue este célebre personaje ídolo e icono cuyos
restos y despojos mortales reposan en la “Rotonda de los Personajes Ilustres” a
quien jamás de los jamases se le ha hecho un homenaje digno a su memoria? El pueblo capitalino llego a quererla y
adorarla con sumo orgullo patrio y después denostada, gracias a calificativos y
difamaciones de una elite social cerrada, fue repudiada de manera injusta,
denigrada, condenada, finalmente boicoteada y saboteada por arguendes y
remilgos sociales de una sociedad moralina intolerante que imponía paradigmas
religiosos de pensamientos medievales, sociedad enclaustrada de políticos
masones decadentes y entreguistas, atrasados, que nunca perdonaron a esta artista libre, rebelde a las cadenas y
prejuicios morales primitivos de esta era decimonónica, influida por el apogeo de la corriente
romántica ponderadora de la fatalidad fúnebre, la melancolía, soledad y el
destino por encima de la voluntad. Niña prodigio. Ángela Peralta, cantante
soprano, pianista, compositora, arpista, poetisa, empresaria de personalidad
fuerte, admirada por la aristocracia mundial, triunfadora siempre en los
escenarios, dio a conocer a nuestra incipiente nación como representante de
arte y cultura conquistando a Europa, hablando con fluidez el francés e
italiano, educada en el bel canto fue un fenómeno musical, nadie cantaba como
ella, su registro tonal y canto erizaba la piel, con un agudo que flautistas,
arrojaban su flauta al suelo al no dar su tono, decían algunas crónicas y quien
transportaba a otras dimensiones a quien la escuchaba, bautizada por los poetas
en España como el “Ruiseñor Mexicano “murió a los 38 años de edad en Mazatlán,
Sinaloa, donde existe para la posteridad un teatro y patrimonio universal que lleva su nombre. México tiene una deuda
histórica con ella, urge reivindicarla siempre.
Don Justo Sierra le compuso unos versos. “Vuelve tu canto al oriente, tu patria no
tiene olvido, Ángela Peralta de Castera Lleva su nombre en tu mente y la corona
en su frente y el corazón en su nido” Manuel Acuña le compuso un gran poema a esta gran diva mismo que reproducimos más
adelante.
Sobre Ángela podríamos hablar mucho ponderándola, pero no es nuestra intención, la podríamos
definir como un “Dramatis Personae” usando esta locución latina, en un afán
acorde con el culteranismo afrancesado de esa época, en que esta gran artista
surgió y declino como un ave fénix. William Shaspeare decía hace más de 450
años, “Si no hay tragedia no hay drama y sin drama la vida sería un
aburrimiento inenarrable, añadiendo también en la obra de Macbeth, acto V,
escena V, citamos: “La vida no es más que una sombra que pasa, un pobre cómico
que se pavonea y agita una hora sobre la escena y después no se le oye más…un
cuento narrado por un idiota con un gran aparato y que nada significa”
LA BELLEZA INTERIOR DE ÁNGELA
Sobre su acentuada supuesta fealdad, de que “había que oírla
pero no verla”, es parte de la ingratitud mexicana, quien solo reconoce a sus
héroes cuando están muertos o murieron trágicamente. “La belleza exterior no es
más que el encanto de un instante. La apariencia del cuerpo no siempre es el reflejo
del alma” George Sand, escritora francesa.
Era una soprano ligera de un timbre inigualable, manejaba toda una
amplia coloratura musical, con repertorio extenso y gratas melodías, soprano
ligera, llevaba a sus oyentes a esferas
angelicales cautivadoras, era un gorjear de jilguero con trinos y arpegios
agradable a los tímpanos, “Era fea, pero
resplandeciente a su hermosura interior a través de su voz de Oro” decían
algunos cronistas quienes reconocían que llevaban al éxtasis a sus oyentes a
quienes encandilaba divinamente, llevándolos a orbitas insospechadas y
agradables estados de ánimo. Su canora garganta hacia soñar despiertos a sus
receptores acústicos. Sobresalió como artista en un siglo donde decía Ignacio
M. Altamirano el poeta más famoso, “En México, triste es decirlo pero es
cierto, los artistas son parias, no tenemos ni bastante población, ni bastante
cultura para poder ofrecer a un artista, un porvenir capaz de hacerle grata la
vida”.
VIDA EN MÉXICO EN LA POST INDEPENDENCIA
Es de destacar que en el siglo diecinueve no había casi
carreteras, abundaban los salteadores de caminos y la vida “no valía nada”
porque según cuentan algunas narraciones, el carácter del mexicano era
violento, bronco, salvaje, su imagen era similar a la estampa del “valiente”
del juego de la Lotería, porque siempre andaba con un puñal escondido mismo que
mostraba con suma facilidad, tanto para amenazar o matar por cualquier cosa o
discusión, precursora de la imagen estereotipada del “charro” mexicano con
sombrero y pistola al cinto que para todo disparaba con ira, fue años después. El caso de la Universidad
Pontificia creada desde 1553, por el virrey Luis de Velasco, quien murió en la
indigencia, es aparte, ya que esta fue suprimida por Benito Juárez y Clausurada
en definitiva por Maximiliano, por ser un recinto clerical decadente y
anacrónico, en donde solo se giraba sobre una teología absurda, sin posibilidad
de realizar estudios realmente humanistas. La clausura duro hasta 1910, cuando
Justo Sierra fundo la nueva universidad la cual obtuvo su autonomía en 1929
junto con su añorada laicidad.
En 1866 el poeta Luis G. Ortiz (1832-1894) le dedico una
poesía para Ángela que se hizo famosa y que hoy la calificaríamos de bastante
cursi: “Bondadoso quiso radiante el cielo, dones que ramos en la tierra
existen, ciño en tu frente la piedad su velo y el genio hermoso y el amor te
asisten, virtud y caridad en dulce anhelo, con sus galas lindísimas te visten y
te ciñe la fama y lo pregona de gloria y virtud doble corona”.
ÁNGELA PERALTA VIVIRÁS SIEMPRE
En el nombre de Dios creyendo en los ángeles como lo pudo
haber sido Ángela Peralta, jurando por el que sostiene el cielo sin ningún
pilar, así se puede ver, destacando lo harto difícil y complicado que resulta
abordar algo del “Ruiseñor Mexicano” porque su existencia devela visiones
emblemáticas de una de una parte de la memoria colectiva mexicana perdida,
simbolismo y significado, pervivencia de un mito cultural, con un enfoque y
óptica abarcadora y revisionista, la misma que debe de hacernos reflexionar y
comprender las fugacidades humanas, temas sepulcrales, melancólicos de soledad,
propios del romanticismo artístico y el positivismo político, moda
contestataria y vehículo de transformación y metamorfosis social, para así
encontrar cimientos de las ideas y caminos vinculantes con un siglo XXI
desafiante, para entender al artista que tiene a su disposición el tesoro de la
ensoñación e introspección para soñar despiertos, con un amplio sentido de vida
para la paz interior, ponderando en este contexto la importancia ejemplar de
Ángela Peralta, de su percepción creativa con valores espirituales intrínsecos
con su biografía, más en estos momentos existentes de profunda crisis mundial
polarizada y multipolar, por lo que urge reivindicar su obra de estrella
fulgurante que nunca se apaga, una autentica heroína mexicana y orgullosamente
nacida en la capital.” Las cadenas de la esclavitud solamente atan las manos:
es la mente la que lo hace al hombre libre o esclavo” Franz Grillparzer
dramaturgo austriaco.
Por eso primero que nada hay que desmitificar la historia
oficial plagada de mentiras, llena de falacias, conjeturas, lagunas y amnesias
mentales, engaños preconcebidos mentalmente con el fin de seguirnos mintiendo,
olvidando el sentido patriótico de pertenencia nacionalista verdadera,
contándonos mitos y leyendas absurdas, repetidas miles de veces para hacerlas
parecer verdad, datos falsos triviales, cimentados en supuestos héroes e
historiadores veraces, ya que con esto se pretende hacer de los mexicanos seres
desmemoriados, castrados y serviles a ideologías dominantes, consumistas e
imperialistas adoradoras del becerro de oro, rendidos al yugo imperial
occidental-judeo-cristiano. Sumisos a los gobernantes títeres de los poderes
absurdos consumistas y dictatoriales. Formando personas acéfalas carentes de
criterio, totalmente acríticas y domesticadas, uncidas al carril globalista,
enajenante y despojador, humanos zombis, llevados al despeñadero
autodestructivo. La auténtica historia patria nos debe de servir para ya no
repetir los errores. Basta de estupideces encuadernadas llamados “Libros
Históricos”. Forjar la mexicanidad verdadera debe de ser nuestra misión con
identidad y conocimiento de la idiosincrasia nativa altiva y autosuficiente de autonomía
y autorrealización plena.
UN POCO MAS DE HISTORIA PATRIA
En realidad muy poco se sabe de la vida de Ángela Peralta en
los años anteriores al encuentro con Enriqueta Sontag, quien la quiso conocer
en su hotel hospedada y que ya nos referimos anteriormente, porque le habían
dicho que una niña mexicana la imitaba y que su familia la presumía cantando en
casas de gente adinerada en pequeñas tertulias y fiestas desde los siete años.
Algunas tradiciones orales años después, hablan de un anécdota acontecido en
Europa, cuando la hermosa soprano italiana considerada la mejor del mundo,
Adelina Patti, (quien años después cantaría en México), compitiendo y cantando
en un estrado con Ángela, quien al ganarle está en buena lid y superioridad
operística, mucha gente acudió en masa a felicitarla, susurrando la mexicana:
Así cantamos en México- y cuentan que uno de los violinistas grito: ¡Así se
canta en la gloria¡ gritando a coro los asistentes, ¡Ángela, Ángela¡.
Si bien Ángela Peralta tenía limitaciones como actriz por
los gestos y gesticulaciones fuertes y notorios, con falta de gracia escénica y
mímica exagerada, utilizaba biombos de tela junto de ella para tapar su rostro,
por su apariencia no había relación alguna
entre la hermosura de su voz y los cánones de belleza europea, pero
actuaba en prestigiadas compañías de ópera y zarzuela en Madrid y en grandes
salas de Europa: Algunos datos refieren que Ángela canto carca de 166 veces
Lucia, 166 veces los Puritanos y 122 la Sonámbula. Muy desenfrenada fue la forma
en que exploto su garganta, gastada prematuramente, pero su admirada
trayectoria y acrecentado nacionalismo le perdonaba todo. Era un orgullo de
México. Algunas narraciones cuentan que era capaz de romper una copa de cristal
con su acentuado agudo cerca de su boca. Antes de ir a Europa hablaba con suma
facilidad el francés e italiano. La bienvenida en los en los teatros y regalos
con lluvias de flores, poemas, reconocimientos y medallas eran frecuentes,
agotándose todos los boletos de taquilla, donde desenganchar los caballos de su
carroza que la transportaba en sus representaciones y cargarla para
transportarla eran parte de su rutina. Aprendió a desenvolverse en un medio
difícil de aristócratas y músicos parlanchines donde la timidez se había
perdido, era una señorona en el espectáculo con seguridad y aplomo. Pronto se
convirtió en una mujer muy capaz de
energía insospechada, de espíritu combativo que nunca se dio por vencida. Mujer
indomable capaz de ir contra viento y marea. La bohemia internacional la admiraba
con profundo respeto en una época en que no abundaban en la opera grandes
actores y sopranos.
Con la vida efímera de Ángela Peralta de carácter férreo,
culta, historiadora, investigadora, con
excelso conocimiento de geografía y política, se nos permite ver metas humanas,
un puente de luz sobre luz, en el túnel oscuro de la vida, por su fructífera excelsitud
artística, energía, disciplina, auto sacrificio, exacerbado profesionalismo,
estoica, sencilla, delicada de placentera digestión vivencial, hecha en México,
añadiendo además su imponente y heroica resiliencia: esa gran capacidad de
superar las circunstancias adversas y desfavorables, proyectándose para el
tiempo futuro como un faro iluminador de Amor y entrega incondicional.
Precisando la fuerte personalidad que emanaba, suma de carácter y temperamento
enérgico, telúrico y volcánico, como la orografía de nuestro país. Tuvo la
osadía de luchar contra la corriente avasalladora y mediocre. Esta artista
prolífica, con su existencia breve y pasajera, jamás paso inadvertida, marcando
inicialmente la lucha por la dignidad nacional mexicana, post independencia,
que ya emergía como una potencia cultural, modelando la identidad nacional
ajena a la mediocridad como estándar de pensamiento, construyendo un pujante
nacionalismo mexicano único en el mundo y que busca la paz mundial, aportando
enriquecimiento al desarrollo humano universal.
México tiene una enorme y gran deuda con Ángela Peralta,
nuestra gran cantante de voz dotada de un gran fa sostenido, un timbre limpio
como su nombre. Maestra de solfeo. Soprano (suprema) estímulo y ejemplo digno
para generaciones actuales y futuras. Un homenaje vivo para Ángela Peralta, el
“Ruiseñor Mexicano” es reivindicarla siempre, homenajearla es hacer un acto
justiciero de desagravio a su persona y de resistencia patriótica, la estigma
que sufrió de una intolerancia oprobiosa, el calificativo discriminador,
apabullante, vergonzante y humillante, todo por ser siempre rebelde al desamor,
a la incomprensión inquisitorial que acuso falsamente su vida personal, juzgada
con ideas preconcebidas por ser sensible y siempre adelantada al momento, ya
que nunca hizo daño, sino al contrario nos dio placer infinito, nos llevaba a
otras dimensiones cuando su voz se escuchaba, con sinfonías de esferas repletas
de felicidad. Su existencia jamás paso inadvertida en circunstancias desfavorables.
Ya basta de cargar cruces ajenas, estas deben de ser rotas para quitar peso y
volar dejando lo bajo, atrasado y sucio. La finalidad es pasarla bien o al
menos tratar, ya que Dios es bello y ama lo bello como fue la esencia de
Ángela, buscando lo fácil no lo difícil en la vida.
“No hay amor sin tus amores, sin ti no quiero vivir lejos de
ti”
“Busco la luz de tus
ojos
Tus caricias y ternura
Y me llena de amargura
La soledad en que vivo
Ven mi tesoro y reclina
Tu frente sobre mi seno
De amor y amargura lleno
Por ti mi bien lo haremos
Con estos versos escritos de manera directa y sencilla, sin
empleo de metáfora alguna, esta composición resume la misión profética de su vida, cantándola
además de manera majestuosa y magistral única, para que no se olvide y pase a
la posteridad como realmente lo fue.
EL MÉXICO DE ANTES
En esos ayeres históricos y pretéritos, se reconocía la
aportación grata de todas las aves de la abundante avifauna mexicana, la cual
eran muy amplia y apreciada por la gente. Pajareros o vendedores de aves, eran
un oficio muy reconocido, ya que este gremio pasaba por las calles ofreciendo
su mercancía con jaulas de carrizo, privilegiando a los pequeños pajaritos
coloridos que trinaban y cantaban en los patios de las casas: Era un gusto común
para cualquier familia tener en sus patios o puertas de las entradas de las
casas, jaulas con pájaros aprisionados que les cantaban desde la mañana los
cuales apreciaban, añadiendo que con su música se modifica y altera los estados
de ánimo, mueven estados de existencia y armonía, disipa la tensión y evoca
relajamiento con sonidos placenteros. El canto del ave ruiseñor se considera el
más bello del mundo.
ÁNGEL CAÍDO
Seres nacidos de la luz son
sin duda alguna todos los ángeles existentes en el universo, son siervos incondicionales de nuestro
sustentador, así como también actúan como emisarios celestiales, ejércitos
cuyas misiones y ordenes son encargados por el altísimo omnisciente. En algunos
tratados de angelología se habla de la que nacemos con 4 ángeles designados,
dos de los cuales permanecen en nuestra vida junto a los hemisferios
cerebrales, aconsejándonos sobre el bien y el mal y otros dos para juzgarnos en
el juicio final. Ángela Peralta fue seguramente un ángel caído, una mujer fuera
de la común un fenómeno artístico de los que nacen pocos en cada siglo, sin
comparación alguna, con un don divino, lástima que no hay registros, nunca se
pudo grabar su voz, no existe semejanza lo que le permitió alcanzar con su arte
sonoro de gran excelsitud, llegando a las alturas casi paradisiacas inefables
del cielo, porque con su potente voz y registro tonal de finos agudos, los
cuales nunca han sido igualados, potente voz privilegiada de rareza musical,
dotada de fuerza magnética y dulzura angelical, era culpable con su canto
cautivar a un público que la escuchaba hechizado, transportándolos a los
cielos. La griega María Callas mejor soprano del mundo y única diva del siglo
veinte, vino a México para conocer donde había nacido Ángela Peralta, la diva
mexicana del siglo diecinueve. Hemos tenido otras grandes sopranos mexicanas
triunfadoras en el extranjero como Irma González y Fanny Anitua que deleitaban
con sus cantos a públicos mundiales, pero nunca enloquecían a la gente con su
gran tesitura de timbre cálido y conmovedor de almas como el de Ángela Peralta.
Gran parte del olvido para Ángela, es por la ingratitud de
la idiosincrasia mexicana, la tendencia al estereotipo mental, la
desinformación y la demonización oficial y sobre todo, por los cronistas como Ramón
del Valle-Arizpe y Francisco Sosa, quienes ni la conocieron y se encargaron de
señalarla con epítetos populares ingratos y difamatorios, producto de la auto
denigración del mexicano y el complejo de inferioridad de mentalidades
colonizadas. El pueblo mexicano es discriminador e intolerante muchas veces
para desgracia de sus propios hermanos.
Ángela Peralta escribió en 1881 en una pared con un carbón en la pared de un
cuarto donde Maximiliano pasó su última noche en el convento de las Capuchinas
en Querétaro antes de ser fusilado: “! Pobre Maximiliano ¡El mundo entero te
llora, pero el destino fue inflexible. Moriste como hombre grande y fuiste
digno, hijo de Carlo Magno. El Emperador murió pero el hombre vivirá siempre en
la memoria de los hombres de corazón, recibe pues un recuerdo pequeño, quien te
consagra, quien te vive agradecida y nunca olvidara que lo distinguiste con tu
cariño”.
EL AMOR A LAS AVES EN MÉXICO SE REFLEJABA EN LA POESÍA
Quiero morir cuando decline el día,
En alta mar y con la cara al cielo,
Donde parezca sueño la agonía,
Y el alma, un ave que remonta el vuelo.
Juan
de Dios Peza (México 1852 - 1910)
LA FUNCIÓN DEBE CONTINUAR
Dentro de la historia musical mexicana algunos
etnomusicólogos registran que la canción de las mañanitas, “que cantaba el rey
David” como la más antigua canción que se sigue cantando hasta la fecha, pero
existe otra todavía más añeja, siendo además una advertencia para generaciones
futuras, nos referimos la cantada en la infancia en algunos lugares del país.
Entonada a todos los bebes y que el musicólogo reconocido Vicente T. Mendoza
define como una canción arrullo con rítmica
influencia de los miles de negros esclavos traídos a México para
trabajar en las minas durante cerca de dos siglos, dice así: A la rorro, niño a
la rorro ya ay, si viene el COCO y te comerá. Si se analiza este soneto
infantil, el cual cantaban las nanas indígenas a sus hijos o a los niños que
cuidaban, cantándoles para dormir, porque a los infantes el decirles el COCO no
es más que decir el apocope de la palabra náhuatl cocoliztle o pequeña peste,
lo cual eran por las epidemias que mataba a la población, desde la llegada de
la viruela, por parte del ejercito de Hernán Cortes y que diezmo a la población
indígena y fue el causante de la derrota del señorío Mexica, por parte de los
hispanos. Diez millones de nativos jamás pudieron con no más de 1000 soldados,
unos cuantos caballos y cañones gracias a las pestes y epidemias que acabaron
con el “invicto” Cuitláhuac.
Hoy por hoy el virus del ZIKA que amenaza al mundo entero,
el cual fue genéticamente modificado
para diezmar poblaciones tropicales, el
cual es una mutación evolucionada de la Fiebre
Amarilla inoculada por el vector
del “mosquito tigre”: Aedes
aegypti Es un virus semejante
filogenéticamente a los del dengue, chikunguya
y la fiebre amarilla. Se
descubrió por primera vez en el bosque de Zika en Uganda, en 1947. Esta peste o
enfermedad fue la que antaño se le llamaba fiebre amarilla, provoco la muerte
de Ángela Peralta y millones de mexicanos, llamada también “Níquel” por el
color de piel que adquirían los enfermos en esas épocas. Es por eso que el
nombre de Ángela revive en estos tiempos en que las guerras y pestes, H1N1,
Ebola, SIDA y otros flagelos acaban con el mundo. Pero Ángela seguirá viviendo. Más allá no hay nada. Solo Dios
sabe más.
Si a tu ventana llega Una Paloma,
Trátala con cariño
Que es mi persona.
Cuéntale tus amores,
Bien de mi vida,
Corónala de flores
Que es cosa mía.
¡Ay! ¡Chinita que sí!
¡Ay! ¡Qué dame tu amor!
¡Ay! Que vente conmigo,
Chinita, a donde vivo yo!
Canción cantada por última vez en Mazatlán, Sinaloa.
Ángela Peralta “El Ruiseñor Mexicano un mensaje de Paz de
México al Mundo”
“Va con ella el alma entera
Y el laurel, humilde don…
Sencilla ofrenda…sencilla…
Tú sabes. Ave viajera
Que es un mundo de corazón.
Vuelve tu canto al oriente,
Tu patria, no tiene olvido,
Ángela Peralta de Castera
Lleva su nombre en tu mente
Y la corona en su frente
Y el corazón en su nido”
Don Justo Sierra
“…Yo os comparo señora con esa sierra nevada que aunque el
humo tiene cerca ella está siempre blanca”
Sor Juana Inés de la Cruz “Décima musa”
“De nada presumo, ni aun de aquello por lo cual el mundo me
ha dado un nombre que acaricio, no por orgullo, sino por las lágrimas que me
han costado”” ¡Ojala que estas pobres flores regadas con mi llanto, no sean un
pretexto para que se me ultraje cuando me parece que con ellas a nadie ofendo!”
Ángela Peralta
"Les larmes" (Lágrimas):
Lágrimas que caéis sobre la tierra,
subiendo del corazón bajo los párpados,
vuestra fuente es un dulce misterio.
¿De dónde venís? ¿Dónde está, pues, la mano vigorosa
Que manda vuestro caudal doloroso siempre sobre todos?
Lágrimas de temor y de esperanza;
lágrimas de alegría y de sufrimiento;
lágrimas de esposo, de amigo, de hermano,
lagrimas de niño, lágrimas de madres;
de odio, de cólera; lágrimas que corréis, corred solitarias.
Caed, caed lágrimas de amor.
Lágrimas que corréis devoradoras, caed,
seguid vuestras pendientes.
Haced surcos en las almas ardientes.
Lágrimas de amor que nos quemáis y que encontráis encanto en
nuestros dolores, corred;
puesto que Dios quiere lágrimas, llorad, llorad, lágrimas,
corred.
Ángela Peralta
“Aquila not capit muscas”
Las águilas no están para cazar moscas”
“Cammina scheletro cammina che la vita comiencia redoma ni”
(Camina esqueleto camina, que la vida empieza mañana)
Guido Verona
ÁNGELA PERALTA FUE CONSIDERADA LA MEJOR CANTANTE SOPRANO DEL
SIGLO DIECINUEVE. Nunca se le ha hecho un homenaje póstumo digno como se lo
merece.
Al “Ruiseñor Mexicano”
(Ángela Peralta)
Hubo una selva y un nido
y en ese nido un jilguero
que alegre y estremecido,
tras de un ensueño querido
cruzó por el mundo entero.
Que de su paso en las huellas
sembró sus notas mejores,
y que recogió con ellas
al ir por el cielo, estrellas,
y al ir por el mundo; flores.
Del nido y de la enramada
ninguno la historia sabe;
porque la tierra admirada
dejó esa historia olvidada
por escribir la del ave.
La historia de la que un día
al remontarse en su vuelo,
fue para la patria mía
la estrella de más valía
de todas las de su cielo.
La de aquella a quien el hombre
robara el nombre galano
que no hay a quien no le asombre
para cambiarlo en el nombre
de Ruiseñor Mexicano.
Y de la que al ver perdido
su nido de flores hecho,
halló en su suelo querido
en vez de las de su nido
las flores de nuestro pecho.
Su historia... que el pueblo ardiente
en su homenaje más justo
viene a adorar reverente
con el laurel esplendente
que hoy ciñe sobre su busto.
Sobre esa piedra bendita
que grande entre las primeras
es la página en que escrita
leerán tu gloria infinita
las edades venideras.
Y que unida a la memoria
de tus hechos soberanos,
se alzará como una historia
hablándoles de tu gloria
a todos los mexicanos.
Hoy al mirar tus destellos
resplandecer de ese modo
bien puede decirse de ellos
que el nombre tuyo es de aquellos,
que nunca muere del todo.
Autor Manuel Acuña
Manuel Acuña Narro (1849 - 1873) Médico y poeta, nació en la
ciudad de Saltillo, Coahuila, el 27 de agosto de 1849.
“Si el libro
Y el Ruiseñor
No dicen
Lo mismo
Escucha
Al Ruiseñor”
Dicho Sufí
“…Y el rosal gritó al ruiseñor que se apretase más contra
las espinas.
-Acércatele más, solitario ruiseñor -le decía-, o llegará el
día antes de que la rosa esté terminada.
Entonces el ruiseñor se apretó aún más contra las espinas, y
las espinas tocaron su corazón y él sintió en su interior un cruel tormento de
dolor.
Cuanto más profundo era su dolor, más impetuoso salía su
canto, porque cantaba el amor sublimado por la muerte, el amor que no termina
en la tumba…
”El Ruiseñor y la Rosa de Oscar Wilde
“
Ahora presento un vals para canto, compuesto por nuestra
célebre Ángela Peralta, e interpretado por la mezzosoprano mexicana Verónica
Alexanderson, proveniente del "Álbum Musical de Ángela Peralta",
impreso en 1875 y grabado en el 2003. Como puede apreciarse, es una pieza muy
bella, con mucha coloratura, muy del gusto de Peralta.
Y por supuesto, la letra en español:
Loin de toi.
Lejos de ti, llorando a cada hora
Doliente del alma y herido el corazón,
Vago por el mundo como vaga una flor,
Siempre llena de aroma y llena de amor.
Te vi un día como un sol nuevo,
Que alejando todo dolor, con tu calor quemaste el corazón,
Corazón que sólo palpita
Por ti de amor.
Hasta que yo sienta el amor en el pecho,
Morirá contenta quien tanto amó.
Ah, ven, mío, ven.
Del Álbum Musical de Ángela Peralta, México, 1875.
Ángela Peralta - Les larmes (Lágrimas) Romanza-
Desafortunadamente, nunca conoceremos la voz de Ángela
Peralta; sin embargo, nos legó su "Álbum Musical de Ángela Peralta,
publicado en 1875, en México, del cual se proviene esta romanza para canto
"Les larmes" (lágrimas). Aunque las coloraturas no aparecen en esta
pieza (a diferencia del vals para canto "Loin de toi") si nos
encontramos ante un profundo sentimiento de los seres humanos: las lágrimas.
Now, this
romanza for chant, "Les larmes" ("The tears"), composed for
Angela Peralta (1845-1883) and sung by Mexicanmezzo-soprano Veronica
Alexanderson, in this recording (2003) of "Angela Peralta's Musical
Album", printed in Mexico, in 1875.
Disfruten de esta romanza, interpretada por la mezzosoprano
mexicana Verónica Alexanderson. Les dejo el texto en español.
"Les larmes" (Lágrimas):
Lágrimas que caéis sobre la tierra,
subiendo del corazón bajo los párpados,
vuestra fuente es un dulce misterio.
¿De dónde venís? ¿Dónde está, pues, la mano vigorosa
Que manda vuestro caudal doloroso siempre sobre todos?
Lágrimas de temor y de esperanza;
lágrimas de alegría y de sufrimiento;
lágrimas de esposo, de amigo, de hermano,
lagrimas de niño, lágrimas de madres;
de odio, de cólera; lágrimas que corréis, corred solitarias.
Caed, caed lágrimas de amor.
Lágrimas que corréis devoradoras, caed,
seguid vuestras pendientes.
Haced surcos en las almas ardientes.
Lágrimas de amor que nos quemáis
y que encontráis encanto en nuestros dolores, corred;
puesto que Dios quiere lágrimas, llorad, llorad, lágrimas,
corred.
COLOFÓN
México por desgracia
es un país muy conflictivo y complejo. A pesar de ser una nación muy rica en recursos; flora, Fauna, Petróleo,
Minerales, etc. Aunado a una naturaleza prodiga en paisajes prístinos y de gran
mega diversidad ecológica, la mentalidad de sus habitantes y ciudadanos es en
ocasiones sumamente contradictoria, lo que es algo incomprensible. Por una
parte obedece con sumisión e ignorancia, resignada y burlona a una elite de
gobernantes corruptos e impunes hasta la medula, quienes gobiernan con un poder
despótico, perpetuándose en cúpulas cómplices de instituciones partidistas y
masónicas. Estamos bajo el yugo de una
eterna clase política cínica, amafiada y adoradora del “becerro de oro” en una
alianza con toda una gama de geometrías políticas carentes de principios,
pragmáticas y eclécticas, hacia el dinero y subsidio de la ubre oficial
institucionalizada, quien orquesta simulaciones dizque democráticas, para la
diosa pagana democracia y seguir engañando a millones de incautos y así seguir
controlando decisiones políticas y económicas. Paralelamente somos gobernados
bajo un terrorismo de Estado, consistente en aplicar sistemáticamente la
violencia por parte del aparato estatal, junto con organismos policiales
represivos, conjuntamente con un sistema coercitivo jurídico, injusto y
distractor, desapareciendo y amedrentando
en ocasiones a los opositores o cooptando algunos con insignificantes
puestos gubernamentales, sobornos y cohechos.
Pero también tenemos
a un pueblo mexicano aburrido, apocado, adorador de lo extranjero, malinchista
y traidor. Machista que esconde su perversión, homosexualidad y afeminamiento,
desde la llegada del aventurero Fernando (Hernán) Cortes el “señor malinche”
como le decían al usurpador quien se apropió el nombre de la deidad
Quetzalcóatl, emisario de los Tránsitos de Venus, como lo referimos
anteriormente en el libro “Atl Chinolli, Agua Quemada, el Regreso de
Quetzalcóatl, un mensaje de México al mundo”, quien prometió su retorno en
algunas tradiciones mayas y mexicas, precolombinas o precuahtemicas.
También hay algunos mexicanos, hay que reconocerlo aunque
nos duela y no generalizando, son violentos, brabucones, con hábitos malos y
negativos, pendencieros pero amables, ponderadores de la fraternidad y unidos
en las desgracias y en los desastres, ingratos, informales, pervertidos,
sodomizados, hipócritas cuando les conviene, así como faltos de palabra, se
auto denigra mucho y con facilidad, la vida humana no tiene valor, relataba la
señora Calderón de la Barca y cronistas francesas las cuales añadían que “son
feísimos de fuerte color moreno pardo
sin brillo”. Muchos compatriotas faltos de identidad y pertenencia son enemigos
en muchas ocasiones de su misma estirpe, no se ayudan, son simplistas y
personalistas, carecen de sensibilidad en acciones de camaradería muchas veces
con sus paisanos. Con una mentalidad derrotista y dual, buscan
inconscientemente honrar a sus héroes que muchas veces abandonan y repudian en
vida y ya muertos les rinden culto e idolatría, porque si no son muertos no le
son auténticos en un pesimismo fatalista, una idea cándida de dejadez al no
terminar lo que empieza subsiste. La vocación familiar mexicana se ha ido
perdiendo desgraciadamente, por el factor económico y la crisis social que
provoca grandes divisiones y reyertas, una carga de agravios, envenenan la
existencia efímera, dejan y olvidan el perdón como una guía y descanso, incluso
el lastre toxico del resentimiento, no hace posible crear una barrera necesaria
entre sentimiento y realidad. Prevalece la idea del asombro a la falta de
fraternidad, como el clásico ejemplo de la cubeta llena de cangrejos, quienes
en lugar de ayudarse para salir de la misma se pelean infructuosamente entre
ellos.
Todo es en
consecuencia del mestizaje de los mal nacidos mexicanos, producto de la
violación en que fuimos engendrados, diría eufemísticamente el premio nobel de
literatura, Octavio Paz. Todo esto ha traído aparejado una consecuencia
nefasta, la irrupción agresiva de la imposición de una ideología sin conciencia
existencial y auténticamente religiosa, una invasión apabullante de cultura y
visión europea, occidental judeo cristina nos ha traído muchas desgracias. Por
eso muchos mexicanos estamos llenos de envidias absurdas, resultado de la
mezcla del indio traidor vencido y del hispano ambicioso lleno de “fiebre de
oro”. El “Gachupin” como lo designaron nuestros antepasados, bautizándolos así
los nativos autóctonos, por las espuelas de los zapatos: cacles-zapatos y
pin-espinas, “cactepin”. Asimismo dicen
extranjeros que han residido en nuestro país, que el mexicano es enemigo muchas
veces de sus propios hermanos. En las “típicas” familias mexicanas lloronas, las
crisis pasionales y las emociones encontradas, provocan cuitas y muinas frecuentes, resentimientos y peleas, son el
pan de cada día en las clases populares, las pequeñas transas alejan la
convivencia y hermandad, perdiéndose en muchas ocasiones el sentido de unidad
familiar, convirtiéndonos muchas veces en seres desobligados, ladinos,
viciosos, alcohólicos, obesos y diabéticos. Gravitando aparte en torno a la madre mexicana abnegada,
consentidora y solapadora, muchas veces ante la ausencia de responsabilidad e
indiferencia paterna, aunque esto es propio del latino, hay asimismo un culto
tanático a la vida, festejando a la muerte arrebatadora en fiesta.
Somos el segundo país
con más volcanes del mundo después de Indonesia, pero también estamos
vaticinados como el centro de una gran misión histórica. El nombre de México
tiene más de 200 definiciones, desde el epónimo Mexi, fundador y gobernante
azteca que encabezo la peregrinación desde el mítico Aztlán, hasta Mexiolotl o
maguey doble, justo como es la orografía de nuestro agreste territorio. Unir a
Oriente y Occidente en eterno conflicto, debe de ser su gran tarea
reivindicadora, para la urgente Paz Mundial ante una avasallante humanidad
autodestructiva que se encamina hacia el precipicio y el abismo de la hecatombe
y el auto aniquilación apocalíptica. El Águila mexicana como lo fue Ángela
Peralta, representa un gran vuelo de profunda espiritualidad, misma
que debe de hacernos cambiar en nuestro beneficio para trascender y así tener
amplio valores humanos universales irrenunciables, ofreciendo la esencia de
nuestro corazón para la sumisión a la Paz, rechazando el desamor, la falta de
comprensión, buscando lo fácil no lo difícil, en un término medio de
entendimiento, negociación, conciliación y respeto.
Ángela Peralta fue un
ejemplo fue un ejemplo juvenil, un orgulloso icono mexicano, una excelente y
sublime diva mexicana, digna y extraordinaria, carácter fuerte, amable,
pacifista, rebelde, delicada, fina, apasionada y amante abrazadora de las más
sublimes causas del género humano. Entregada siempre privilegio su vida al arte
y la Paz, desafiando al tiempo y a los contratiempos de la adversidad, la falsa
moral de una sociedad inculta y etiquetadora. Sufrió la crítica injusta con un
odio feroz y despiadado, cruel e inhumano, victima ocasional todo por ser
libre, creadora, pero jamás renuncio a ese espíritu imponente: amalgama de real
orgullo pavoneado, lucha y disciplina la misma que la llevo a fenecer inesperadamente. Con una gran fuerza de
voluntad. Lucho contra la indignante misoginia estúpida. Fue heredera sin dudad
alguna y digna representante de raigambre, de nuestros sublimes cantos náhuatl,
(In Xóchitl in Cuicatl), fue nuestra Ángela una depositaria ancestral de los
sabios nahuatlatos, los mismos que aprendieron con facilidad durante la conquista
en la Nueva España, los cantos gregorianos, mejorando su interpretación de sus
mismos maestros religiosos, constructores también de clavicordios desde el
siglo dieciséis y siglos después pianos. Canto con una dicha y frescura musical
virtuosa, una conexión intima de reto a la interpretación celestial.
Hoy por hoy y lejos
de los aviesos pensamientos negativos y pesimistas, característicos de
mexicanos de corazón podrido, podríamos decir fuera de los paradigmas de la
victimización social, la vida de Ángela Peralta es un viaje revelador de
cicatrices profundas, fuera de convenciones absurdas, esquemas y del culto
egocéntrico, propio de los críticos pseudointelectuales y esnobistas del club
de elogios mutuos, quienes deben de reconocer lo controvertido que resulta
naufragar en los avatares de la vida difícil y complicada, como la que paso nuestro
“Ruiseñor Mexicano”, creadora polifacética quien con una auto exigencia
sobrenatural, exploro ámbitos metafísicos, por lo que su obra majestuosa que es
lo valioso existente y lo que vale de un artista, se hizo en el temple de la
fragua de la creación aprisionada de la época de un siglo en que abundaban los
traviesos léperos de las clases populares, quienes temían más al Diablo que a
Dios, fumaban marihuana en las calles, asaltaban y violaban ocasionalmente, en
donde la diversión de la ciudad se limitaba a escasos espectáculos de
Palenques, corridas de toros y cadenas de gentes que se paseaban los domingos
frente a Catedral. Ángela imprimió un sello de la creación para la posteridad,
su vida fuera de serie, impulso un sobresaliente gusto por lo autóctono, el
incipiente gusto hacia lo mexicano.
Tiene un lugar ocupado en la historia cuyas fuentes vertidas en múltiples
testimonios dejan un legado convertido en orgullo, que abarco desde la
frustración vivencial, hasta un reconocimiento con amplías reflexiones grabadas
en la mente de quienes queremos a nuestra generosa Patria mexicana. En la actualidad, existen múltiples foros, auditorios,
coros, festivales, teatros, escuelas, salones, que llevan su nombre, revelando
a generaciones de mexicanos su existencia imponente y que la miran con respeto.
Su trascendental vida sobresaliente se impone, resguardando su vasta creación,
en una línea de tiempo de un histórico recorrido fecundo y fértil. En la década
de los sesentas, tele sistema mexicano, hoy la empresa Televisa, trasmitió una
telenovela de su visión algo fatalista
sobre las tragedias y vida difícil de Ángela Peralta, por eso se le
recuerda con pesares lastimeros, en lugar de situarla en un podio de
personalidad arrolladora, magnificente, por su lucha continua de supervivencia
próspera siempre en lucha combativa y ejemplar.
Figura irrevocable,
insumisa siempre, Ángela Peralta personaje apasionado grandilocuente, supo superar
el viento en contra. Triunfadora tanto en el extranjero como en su misma
patria, donde fue reconocida con suma respetabilidad por su grandeza de méritos
propios, pero en su vida trágica y tormentosa, ni un paso atrás dio y nunca
aflojo su ritmo vigorizante, sus convicciones nunca las doblego. Un férreo y
templado temperamento impávido e imponente. Fue un volcán en erupción apagado.
Pocas personas nacen en la Tierra con esos dones divinos. Su canto llevo a la
dulzura infinita, escalofríos en la piel y el erizar los cabellos a quien la
escuchaba era parte de su trabajo cotidiano. Enloqueciendo los tímpanos de sus
receptores con un gratísimo placer inefable. Portadora de visión estimulante
con una claridad mental y real ser, era una guerrera implacable, mensajera de
paz duradera, desdeño a los críticos obsoletos que yacían debajo de ella,
estaba por encima de ellos, más allá del bien y el mal, sabedora de que al
final nadie puede ir contra el destino
que está escrito en las tablas de la ley. “El mundo es como un sueño que
contempla el hombre dormido” Muhammad (paz y bendiciones).Ángela Peralta el
recuerdo imborrable de tu existencia fugaz, es una huella placentera,
olvidándonos de tu dolor que aún nos duele, pero que se transforma en un mañana
y devenir grandioso pletórico de felicidad por disfrutar, con tu ejemplo
palpitante de mexicanidad indomable y perenne como el diamante.
Finalmente para despedirnos con este escrito de modestas
palabras, diremos exclusivamente que, el Leitmotiv o motivo conductor de nuestro
trabajo, es más que nada para exponer la urgente necesidad imperiosa de que en
nuestra Patria Mexicana, se levante y se enarbole la bandera de Paz Mundial
como una misión vital de supervivencia, ante las guerras, violencia,
inseguridad, cambio climático, epidemias, pandemias, volcanismo, terremotos,
huracanes y un sinnúmero de desastres que asolan al planeta, Pero lo más
importante es detener y postergar, el peligro que representa una posible
conflagración de Tercera Guerra Mundial, la misma que es posible. Por eso
nuestra nación mexicana, junto con sus ciudadanos y la sociedad civil y
política, debemos de unirnos para llamar a la humanidad doliente a detener la
carrera belicista, suicida y autodestructiva que se cierne sobre el mundo
impunemente, principalmente en el conflicto milenario que se debate entre
oriente y occidente, concretamente en el Medio Oriente; Siria y Palestina.
Para esto necesitamos muchos guerreros y guerreras de la Paz
como nuestra Ángela Peralta, que llamen a formar un gran movimiento pacifista,
pronunciarnos contra las crueles guerras, decir que Basta a la muerte y
desolación, si hay solución en el camino de la Paz, por eso necesitamos líderes
y dirigentes con el ejemplo de Ángela Peralta, nuestra gloriosa guerrera
mexicana, quien a pesar de la vicisitudes que paso, siempre fue capaz con el
arte y la cultura de levantar orgullosamente su linaje heroico de tradición
sagrada sincrética mexicana, moviendo los hilos invisibles del canto florido de
paz y armonía.
Rescatar a nuestra Ángela es estos tiempos convulsos y de
guerra, es tener un rostro y corazón sabio, las claves de un inmenso espejo de
obsidiana y jade, en donde nos reflejemos para el saber de la piedra filosofal
angular, en un marco adecuado de amor, orientado para la firme conciencia de
grandes valores labrados en sublimes tejidos humanos espirituales. El actual
vacío existencial existente, nos obliga y convoca a luchar con valor ardiente,
por un verdadero ecumenismo religioso donde el centro de la fuerza sea la Paz
Mundial, con un amplio y abierto dialogo intercultural, ante una humanidad deshumanizada que se autodestruye, es nuestra
tarea actual. Ángela Peralta con sus cantos abrió corazones para la Paz, por
eso necesitamos muchas y muchos Ángela Peralta, guerreras y guerreros
valientes que luchen con arrojo por una
urgente Paz Mundial, con un mensaje esperanzador como el que siempre esgrimió
nuestra gloriosa Ángela Peralta. Fin
Mi corazón comprende toda forma
Es un monasterio del monje,
templo de ídolos,
prado de gacelas, la Kaba votiva,
las tablas de la Tora, el Corán…
El amor de mi credo,
donde quiera que vayan sus camellos
El sigue siendo mi creador y mi fe.
Ibn Al-Arabi
Para toda sugerencia y opinión al correo:
erubielcamacho43arroba yahoo.com.mx cel. 04455 29885634
* ERUBIEL ÁNGEL
CAMACHO LÓPEZ PERIODISTA Y ESCRITOR DEL TRONCO FAMILIAR DE ANGELA PERALTA,
DIRECTOR DE LA AGENCIA INFORMATIVA ISLÁMICA MEXICANA mexicoinformaislam.blogspot.com
y CREADOR DEL “20 DE JULIO DÍA NACIONAL DE LOS VOLCANES”. Y DEL CONSEJO
MEXICANO CONTRA LA TERCERA GUERRA MUNDIAL. GANADOR DE UN PREMIO INTERNACIONAL
POR SU LIBRO “BUSCAR CONOCIMIENTO”.
§ BIBLIOGRAFÍA MÍNIMA: “ÁNGELA PERALTA EL RUISEÑOR MEXICANO”
ARMANDO DE MARÍA Y CAMPOS 1944
§ HISTORIA DE MÉXICO
BIBLIOTECA SALVAT
§ “MIL PERSONAJES DEL
SIGLO DIECINUEVE” SOMEX
§ INTERNET BIOGRAFÍAS
DE ÁNGELA PERALTA
§ ARCHIVO GENERAL DE
LA NACIÓN
§ Febrero del 2016
“Año del Tránsito de Mercurio”
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