Violento ataque de Obama contra Chávez

Violento ataque de Obama contra Chávez Artículos de Opinión | Nil Nikandrov | 07-01-2012 | Traducción desde el inglés por Sergio R. Anacona

A nueve meses de los escrutinios presidenciales en Venezuela, el presidente norteamericano B. Obama concedió una entrevista por escrito a El Universal, máximo vocero conservador y severo antichavista. Considerando el hecho que hasta hace poco Obama y Chávez parecían ajustarse a un pacto de no articulado de no agresión y se abstenían de cualquier intercambio rabioso, cosa que acontecía regularmente durante la presidencia de G. Bush. Los provocadores comentarios de Obama fueron de inmediato entendidos como una señal de movilización por parte de la oposición venezolana.

En su mensaje a El Universal, Obama acusa a Chávez que “las acciones de su gobierno han restringido los derechos universales del pueblo venezolano, amenazan los valores democráticos y no contribuyen a la seguridad de la región.” En cuanto a seguridad, la política exterior venezolana se sabe que figura en lugares destacados en la lista de preocupaciones de Estados Unidos al vincularse con Irán, Siria y Cuba, lo cual explica porqué Obama aseguró que tales relaciones no benefician al pueblo venezolano y que tarde o temprano los venezolanos tendrían que deshacerse de ellas. Chávez respondió con su habitual estilo intransigente diciendo que cualesquiera sean los reclamos del presidente norteamericano y sus asesores, hacen que se conviertan en parte de una gigantesca mentira con el objeto de justificar su agresión contra Venezuela y sus socios. “Obama, tú eres un farsante,” replicó Chávez durante una reunión televisada. “No seas irresponsable. Nosotros somos un país libre, nunca seremos una colonia, de Uds. ni de ningún otro. Anda y pregúntale a la comunidad negra de tu país qué significas para ellos: la mayor frustración en no sé cuántos años… Anda y pregúntale a los pueblos de África que pudieron haber creído en ti debido al color de tu piel, porque tu padre era oriundo de África. Tú eres un descendiente de África, pero eres una vergüenza para todos esos pueblos.”

Diosdado Cabello, alto dirigente del partido de Chávez, Partido Socialista Unido de Venezuela, PSUV quien es ampliamente visto como el posible sucesor del actual líder, reprochó a Obama de la misma manera. “Rechazamos las declaraciones de este hombre (el presidente norteamericano). Si hay alguien comprometido en asesinatos y terrorismo, ese es el gobierno de Estados Unidos.” En realidad –según Cabello—“Obama encabeza el club mundial de los terroristas. Se están retirando (Estados Unidos) de Irak pero dejan atrás más de un millón de personas muertas.” Cabello hizo hincapié que de ninguna manera Venezuela es hostil hacia los norteamericanos –más bien solidariza con el país que es regido por un gobierno antinacional—pero, agregó, mientras Washington habla duro acerca de la libertad de prensa y la democracia, la tasa de muertos es también alta en Libia y los abusos perpetrados por Estados Unidos siguen aumentando.

El gobierno de Venezuela está muy consciente que la Casa Blanca tiene la esperanza de descarrilar las venideras elecciones y está sentando las bases para una revolución de color en el país. Los esfuerzos que hace Washington hacia fuera apuntan a conseguir que la oposición presente una candidatura común en las primarias del bloque anti-Chávez –carrera en la que participan seis candidatos del Movimiento por la Unidad Democrática, MUD—programada para febrero del 2012. Algunos de los adversarios de Chávez tienen planeado participar por cuenta propia pero lo que une a todo este campo es el odio indisimulado por el régimen populista y su líder. En todo caso, los programas de los candidatos de la oposición tienden a ser poco específicos y claramente carecen de realismo. Ocasionalmente las fuerzas pro Chávez se quejan que la oposición recurre a la imitación o simplemente roban las consignas del gobierno. Esta táctica parece no funcionar a pesar que la oposición en Venezuela domina los medios de comunicación de masas: los sondeos indican que parte del electorado venezolano que intenta seguir el juego de la oposición se ha encogido desde un 30-35 por ciento a un modesto 20-22 por ciento antes del evento.

En consecuencia, se escuchan dentro de la oposición llamados con insistencia para evitar la vergüenza de cancelar las primarias y de manera callada llegar a un compromiso interno en torno a la candidatura anti-Chávez. Por supuesto que la asesoría al respecto y la confirmación final es competencia de los titiriteros de Washington.

Uno de los postulantes es Leopoldo López, graduado de Harvard que solía incitar disturbios, promover ataques contra el palacio presidencial y clamar por la toma del poder durante el período 2002-2005. Su involucramiento con la CIA se inició en la época cuando Primero Justicia se organizó — una ONG que luego devino en partido político. Preparándose para las próximas elecciones, López organizó un nuevo grupo denominado Voluntad Popular obteniendo financiamiento de las mismas viejas fuentes como ser, la comunidad norteamericana de inteligencia, el Departamento de Estado más la USAID. López tiene la esperanza que su pasado extremista y los escándalos de corrupción que estallaron en cadena cuando fungió como alcalde de la privilegiada municipalidad de Chacao en Caracas se hayan hundido en el olvido, confía mucho en los medios sociales y actualmente promueve su candidatura haciendo énfasis en el diálogo y el compromiso. Tratando de construir una imagen populista, López ocasionalmente se aparece en algunas barriadas donde conversa con ciudadanos mayores y generosamente lanza promesas de erradicar la delincuencia común.

El capitán Henrique Radonski, gobernador del Estado Miranda y miembro de Primero Justicia, es un postulante del mismo tipo que Leopoldo López. Radonski alegremente combina el apoyo norteamericano con infusiones financieras de la comunidad judía y es visto en Washington como una figura notablemente capaz: en noviembre del año 2008 superó a Diosdado Cabello por el cargo de gobernador. Radonski siempre trató de mantenerse alejado de cualquier actividad que pudiera proyectar una sombra de extremismo sobre su reputación, pero en abril del 2002 en medio de la furia del golpe anti populista en Venezuela y funcionarios de gobierno que buscaron refugio en la embajada de Cuba, él participó en el sitio a la embajada y exigió que el embajador cubano permitiera el allanamiento del recinto diplomático. El embajador no cedió a la presión y prometió resistir en respuesta a la amenaza de Radonski de utilizar la fuerza. Eventualmente los golpistas no se atrevieron a asaltar la embajada cubana y se conformaron con actos de vandalismo contra automóviles con placa diplomática, cortaron el suministro de agua, gas, energía eléctrica y las comunicaciones telefónicas de la misión.

María Corina Machado, Maricori en criollo, es el rostro femenino de la oposición en Venezuela. Gracias a la extraordinaria publicidad derivada de los medios, esta frágil ama de casa, madre de tres hijos, es también una dama de voluntad inquebrantable y actualmente disfruta de una fama sin comparación en el país. De hecho, ella podría ser el mayor éxito de la CIA en su batalla contra Venezuela. En el año 2001 tomó parte en la formación de Súmate, una ONG cuyo propósito declarado nacionalmente era el monitoreo electoral. La intención que asomaba detrás de la agencia era la de erosionar la credibilidad del Consejo Nacional Electoral. El financiamiento le llegaba a Súmate por vía de la US National Endowment for Democracy, fundada el año 1983 por el congreso norteamericano. Grandes cantidades de dinero también le fueron suministradas por la CIA la cual tenía planes de largo alcance para la carrera de Machado.

En el año 2005 comisarios de la Casa Blanca hasta lograron que Maricori fuera recibida por el presidente George Bush donde seguramente ella discutió la resistencia a la dictadura en Venezuela, la democracia y la promoción de los derechos humanos. Luego de ser elegida al parlamento en el 2010, Machado completó un plan para postularse a la presidencia diciendo que la continuidad de Chávez en el poder constituía una “amenaza nacional” y con confianza pronosticó que la oposición ganaría las elecciones del 7 de octubre del 2012. Su programa de política exterior es esencialmente idéntico al de sus pares en la oposición, que incluye la abolición del bloque ALBA, el retiro de Venezuela del Mercosur, revisión de la política petrolera de Venezuela hacia los países de América Latina y el Caribe y el alejamiento de Cuba. Las primeras medidas de política exterior que Machado promete aplicar si es elegida, serán la reconstrucción de las relaciones con Estados Unidos y restablecer las relaciones diplomáticas con Israel.

James M. Derjam es actualmente el Encargado de Negocios norteamericano en Venezuela. Derjam es un experimentado diplomático que regresó al Departamento de Estado después de tres décadas de haberse retirado. Habiendo estudiado las circunstancias en el mismo sitio en Venezuela, hizo varias cautelosas declaraciones en el sentido que Washington estaría feliz de tener relaciones normales con Caracas, aunque por el momento la situación sea tensa y que para su país Venezuela es un socio comercial significativo que importa productos norteamericanos por casi doce mil millones de dólares al año. Por supuesto que los intentos de Derjam de reactivar el diálogo se fueron momentáneamente por la borda en cuanto la entrevista de Obama en El Universal salió publicada.

Sondeos recientes le dan a Chávez una tasa de popularidad del 60 por ciento. La chance de la oposición de derrotar al líder venezolano en elecciones libres parece remota. Dada la cantidad y las proporciones de los programas de bienestar social vigentes actualmente en Venezuela, la oposición no está en condiciones de ofrecer una alternativa y el electorado no será atraído por una descarada demagogia. Chávez, irónicamente, dice que si ellos mantuvieran cerradas sus bocas, los candidatos opositores resultarían más atractivos, pero sospecha que el 2012 el futuro de su país en vez de ser disputado en elecciones legítimas, podría convertirse en una pieza de la estructura de un escenario organizado por los laboratorios norteamericanos de guerra secreta. No hay duda que en su condición de títere del complejo militar-industrial norteamericano, Obama daría luz verde a cualquier escapada que se le exigiera.

La quinta columna venezolana que constantemente está recibiendo apoyo material y entrenamiento en varios campamentos juveniles de la revolución de color, de seguro seguirá la línea de Estados Unidos. Los mercenarios se están reclutando en México, países centroamericanos y en Colombia con el objeto de desatar una masacre en Venezuela. Si los provocadores obtienen el control de las ciudades venezolanas, los candidatos presidenciales del MUD fácilmente abandonarían su retórica democrática. La oposición no tuvo oportunidad de demostrar de manera completa su carácter feroz durante el golpe del año 2002 aunque los seguidores de Chávez fueron duramente perseguidos. El plan norteamericano para la próxima ronda en la lucha será inmensamente más cruel. Esta vez el imperio le daría una sangrienta lección a toda América Latina.

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Notas del Remitente:

1-En el tercer párrafo el autor dice que Diosdado Cabello es “visto como el posible sucesor del actual líder”. No sabemos cómo Nikandrov llega a esa valoración, En primer lugar porque en ningún momento se ha hablado de posibles sucesiones ni nada que se le parezca. También en primer lugar porque este país tiene Chávez para rato y, por último, hay muchos nombres que cumplen con las orientaciones del PSUV y del Comandante Presidente y, al igual que D Cabello, están en la 1era fila de la batalla, rodilla en tierra, para cumplir cualquier tarea que se les encomiende: Elías JAUA, Fernando SOTO ROJAS, Tarek EL AISAMI, Jorge RODRÍGUEZ, Nicolás MADURO, Roy CHADERTON, Jacqueline FARÍAS, Aristóbulo ISTÚRIZ, Héctor NAVARRO …

2-En el párrafo 7, dice que Radonsky es ¿Capitán? Y olvida el 1er apellido de este señor (CAPRILES). No logramos develar de dónde viene lo de “capitán”.

3-La línea 5 del mismo párrafo 7, afirma que durante el golpe de estado de abril de 2002, “había funcionarios que buscaron refugio en la Embajada de Cuba”, cosa que es incierta.

Alfredo VILORIA P

Obama Slamming Chavez – Will Venezuela Be Able to Hold Elections As Planned?Nil NIKANDROV | 24.12.2011 | 19:25



Nine months ahead of the presidential poll in Venezuela, US President B. Obama gave a written interview to the country's top-conservative and sternly anti-Chavez outlet El Universal. Considering that until recently Obama and Chavez seemed to abide by an unarticulated non-aggression pact and refrained from the kind of angry exchanges that broke out on a regular basis during G. Bush's presidency, Obama's provocative comments were immediately read as a mobilizing signal by the opposition in Venezuela.
Obama charged Chavez in the message to El Universal with “government actions that have restricted the universal rights of the Venezuelan people, threatened basic democratic values, and failed to contribute to the security of the region”. As for security, the Venezuelan policy of connecting to Iran, Syria, and Cuba is known to feature prominently on the US list of security concerns, which explains why Obama chose to assert that such relations do not benefit the Venezuelan people and that, sooner or later, Venezuelans would have to opt out of them. Chavez responded in his usual uncompromising manner, saying that whatever claims the US president and his advisers make they become parts of the tremendous lie they need to justify an aggression against Venezuela and its partners. "Obama, you're a phony”, Chavez hit back during a televised meeting - ”... Don't be irresponsible. We are a free nation and will never be a colony, yours or anybody else's. …Go and ask the black community in your country what you are to them: the biggest frustration in I don't know how many years …Go and ask the many people in Africa who may have believed in you because of the color of your skin, because your father was from Africa. You're a descendant of Africa, but you are the shame of all those people”.
Diosdado Cabello, a leading member of Chavez's United Socialist Party of Venezuela who is widely seen as the likely successor to the country's incumbent leader, similarly rebuked Obama: "We reject the statements made by this man (the US President). If anyone is involved in crimes and terrorism, that is the government of the United States". Actually, according to Cabello, “Obama leads the club of world's terrorists... They (the US) are withdrawing from Iraq after leaving more than one million people dead". Cabello stressed that Venezuela is in no way hostile to North-Americans – rather, it has compassions for the nation run by an anti-national government - but said that, while Washington talks a lot about media freedom and democracy, the death toll is also high in Libya and the abuses perpetrated by the US continue to multiply.
Venezuela's administration is permanently aware that the White House hopes to derail the upcoming elections and is laying the groundwork for a color revolution in the country. Outwardly, the efforts made by Washington are focused on having the opposition in Venezuela launch a common candidacy at the poll, with the anti-Chavez bloc “primaries” - a race played out between six candidates from the oppositional Coalition for Democratic Unity (MUD) – scheduled for February, 2012. Some of Chavez's foes do plan to run on their own, but what unites the whole camp is undisguised hate for the populist regime and its leader. The opposition candidates' programs, though, tend to be unspecific and clearly lack realism. The pro-Chavez forces occasionally complain that the opposition resorts to mimicry and simply steals the regime's slogans. The tactic does not seem to pay even though the opposition dominates the media in Venezuela: surveys show that the part of the Venezuelan constituency which intends to play the opposition primaries game has shrank from 30-35% to the modest 20-22% way ahead of the event.
As a result, calls are increasingly audible across the opposition to avoid embarrassment by scrapping the primaries plan and to quietly reach an internal compromise on the anti-Chavez candidacy. The related advising and the final confirmation are of course up to the Washington puppeteers.
One of the contenders is Leopoldo López, a Harvard graduate who used to incite riots, urge attacks on the presidential palace, and call for power seizure in 2002-2005. His involvement with the CIA began in the epoch when Primero Justicia, an NGO which later morphed into a political party, came into being. Bracing for the coming elections, López assembled Voluntad Popular, a new group drawing money from the same old sources like the US intelligence community and the Department of State plus USAID. López hopes that his extremist past and the corruption scandals which erupted serially when he served as mayor of the privileged Chacao municipality in Caracas have sank into oblivion, relies heavily on social media, and currently sells his candidacy emphasizing openness to dialog and compromise. Building a populist image, López occasionally shows up in urban slums where he chats with senior-aged citizens and generously dispenses promises to eradicate street crime.
Miranda State governor and Primero Justicia captain Henrique Radonski is a campaigner of the same type as Leopoldo López. Radonski happily combines the support from the US with financial infusions from the Jewish community and is seen in Washington as a remarkably capable figure: in November, 2008 he outran Diosdado Cabello in a competition over the governor post. Radonski generally tried to stay clear of activities that could cast a shadow of extremism over his reputation, but in April, 2002, when the anti-populist coup in Venezuela was raging and the country's government sought refuge in the Cuban embassy, he did take part in laying siege to it and demanded that the Cuban ambassador consent to a search in the diplomatic compound. The ambassador did not give in to pressure and pledged resistance in response to Radonski's threat to use force. Eventually, the opposition did not dare to storm the Cuban embassy and sufficed with acts like vandalizing cars with diplomatic license plates and cutting off water, gas, electric power supply, and phone communications of the mission.
María Corina Machado, MariCori in vernacular, is the female face of Venezuela's opposition. Thanks to extraordinary media spin-off, the fragile housewife and a mother of three, who is also a lady with unbreakable willpower, currently enjoys unparalleled fame in the country. In fact, Machado may be the greatest success scored by the CIA in the agency's battle against Venezuela. In 2001, she took part in establishing Súmate, an NGO whose stated purpose nationwide was vote-monitoring. The pursuit that loomed behind the agenda was to erode the credibility of the Venezuelan national elections council. Money was fed to Súmate via the US National Endowment for Democracy founded in 1983 by the US Congress. Large amounts also came from the CIA which had far-reaching plans for Machado's career. In 2005, curators even arranged for MariCori to meet with US President G. Bush at the White House, where she predictably discussed resistance to dictatorship in Venezuela, democracy, and human rights advocacy. Upon being elected to parliament in 2010, Machado rolled out a plan to run for president, saying Chavez's continued power was a “national threat” and confidently projecting that the opposition would win the October 7, 2012 election. Her foreign policy program is essentially identical to those of her opposition peers and includes abolishing the ALBA bloc, Venezuela's withdrawal from Mercosur, revising Venezuelan oil policies vis-a-vis Latin American And Caribbean countries, and distancing from Cuba. The first foreign-policy steps Machado promises to take if elected are to rebuild the relations with the US and to restore the diplomatic ties with Israel.
James M. Derjam currently serves as the US chargé d’affaires in Venezuela. Derjam is an experienced diplomat who returned to the US Department of State after three decades in retirement. Having studied circumstances on site in Venezuela, he made several cautious statements to the effect that Washington would be happy to have normal relations with Caracas though the situation is tense at the moment, and that for his country Venezuela is a significant trade partner importing US products worth slightly under $12b a year. Of course, Derjam's attempts at reviving dialog went down the drain momentarily as Obama's recent El Universal interview saw the light of day.
Fresh surveys give Chavez a 60% rating, and the opposition's chances to defeat the Venezuelan leader in fair elections appear slim. Given the multitude and proportions of welfare programs on-line in today's Venezuela, the opposition can't offer a serious alternative, and the constituency is not going to be swayed by downright demagoguery. Chavez says ironically that keeping their mouths shut makes the opposition candidates look more attractive, but suspects that in 2012 the future of his country may, instead of being contested in legitimate elections, become a stake in the framework of a scenario compiled in the US secret war laboratories. There is no doubt that, as a puppet of the US military-industrial complex, Obama will greenlight whatever escapades it would be pressing for.
The Venezuelan fifth column which constantly receives material support and training at various color revolution youth camps etc. is sure to follow the US lead. Mercenaries are recruited in Mexico, Central American countries, and Columbia to start a massacre in Venezuela. If provocateurs gain control over Venezuelan cities, MUD presidential hopefuls will easily shed their democratic rhetoric. The opposition did not have enough opportunity to fully demonstrate its ferocious character during the 2002 coup, though Chavez's supporters were severely persecuted. The US plan for the next round of the fight is immensely more cruel – this time the Empire is going to teach a bloody lesson to the whole Latin America.