CARTA SEGUNDA.
ENVÍADA A SU SACRA MAJESTAD DEL EMPERADOR NUESTRO SEÑOR POR EL CAPITÁN GENERAL DE LA NUEVA ESPAÑA,
LLAMADO DON FERNANDO CORTÉS.
"Muy alto y poderoso y muy católico príncipe, invictísimo emperador y señor nuestro......."
a la llegada de Cortés a Temixtitán (Tenochtitlán)
(parece que a la superioridad técnica en armamento, a los caballos y a la división y enfrentamiento de las naciones indígenas también hay que unir ciertas leyendas, por la que se consideraría a los españoles, envíados de un gran rey y señor al que los aztecas consideraban su señor natural).
(Cortés secuestra a Moctezuma por seguridad y por "convenir al real servicio". Curioso también, ya en 1519 "Los españoles somos algo incomportables e importunos". Una constante en nuestra historia ).
(Cortés al tiempo que describe la ciudad, se da cuenta de la situación táctica y estratégica. Seguramente ya pensaría en la guerra)
......Cada género de mercaduría se vende en su calle, sin que entremetan otra mercaduría ninguna, y en esto tienen mucho orden. Todo lo venden por cuenta y medida, excepto que fasta agora no se ha visto vender cosa alguna por peso. Hay en esta gran plaza una muy buena casa como de audiencia, donde están siempre sentados diez o doce personas, que son jueces y libran todos los casos y cosas que en el dicho mercado acaecen, y mandan castigar a los delicuentes. Hay en la dicha plaza otras personas que andan continuo entre la gente mirando lo que se vende y las medidas con que se miden lo que venden, y se ha visto quebrar alguna que estaba falsa."
(Parece francamente impresionado de la grandeza y abastecimiento del mercado)
(Dos mundos sin contacto y qué similitudes entre las castas religiosas de uno y otro. En cuanto al templo: "no hay lengua humana que sepa explicar la grandeza".)
(Fatal encontronazo. Te tiro los tuyos para poner los mios. Con la iglesia hemos topado...)
(Este suceso ofrece dudas. Hay otras versiones que dicen que Cortés lo mató porque se negó a salir para intentar calmar la revuelta).
Y llegando a la dicha ciudad de Tacuba, hallé toda la gente remolinada en una plaza, que no sabían dónde ir; a lo cuales yo di priesa que se saliesen al campo antes que se recreciese más gente en la dicha ciudad y tomasen las azoteas, porque nos harían desde ellas mucho daño. E los que llevaban la delantera dijeron que no sabían por dónde habían de salir, y yo los hice quedar en la rezaga, y tomé la delantera hasta los sacar fuera de la dicha ciudad, y esperé en unas labranzas; y cuando llegó la rezaga supe que había recibido algún daño, y que habían muerto algunos españoles y indios, y que se quedaba por el camino mucho oro perdido, lo cual los indios cogían; y allí estuve hasta que pasó toda la gente, peleando con los indios, en tal manera, que los detuve para que los peones tomasen un cerro donde estaba una torre y aposento fuerte, el cual tomaron sin recibir ningún daño, porque no me partí de allí ni deje pasar los contrarios hasta haber ellos tomado el cerro, en que Dios sabe el trabajo y fatiga que allí se recibió, porque ya no había caballo, de veinte y cuatro que nos habían quedado, que pudiese correr, ni caballero que pudiese alzar el brazo, ni peón sano que pudiese menearse; y llegados al dicho aposento, nos fortalecimos en él, y allí nos cercaron y tuvieron cercados hasta la noche, sin nos dejar descansar una hora. En este desbarato se halló por copia que murieron ciento y cincuenta españoles y cuarenta y cinco yeguas y caballos y más de dos mil indios que servían a los españoles, entre los cuales mataron al hijo y hijas de Muteczuma y a todos los otros señores que traíamos presos."
(Es curioso el cambio de los artículos: "las puentes" y "el artillería". También me he informado de la expresión: "excepto ciertas velas que en ella estaban, las cuales apellidaban tan recio", velas eran guardias que tenían en los puentes y apellidar, en este contexto significa: gritar convocando, llamar a las armas.
Por lo demás : "ya no había caballo que pudiese correr ni caballero que pudiese alzar el brazo, ni peón sano que pudiese menearse". Más de 2000 indios aliados ,150 españoles y 45 caballos y yeguas, fueron los muertos. Realmente terrible.)
De la villa Segura de la Frontera desta Nueva España, a 30 de octubre de 1520 años. De vuestra sacra majestad muy humilde siervo y vasallo, que los muy reales pies y manos de vuestra alteza besa.
HERNAN CORTES.
No hay comentarios:
Publicar un comentario