Nadie duda que la designación de Delfina Gómez, como nueva titular
de Educación, resultó una total sorpresa. Nadie lo imaginó.

¿Por qué?

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Porque si bien es una de las más desprestigiadas “recaudadoras” del
primer círculo de López Obrador –junto con Rocio Nahle, Eva Cadena y
Yeidckol Polevisnki, quines acercaron a López Obrador, al dinero del crimen
organizado–, lo cierto es que también es una eficaz operadora electoral.
¿Y eso qué tiene que ver?

Tiene que ver todo, ya que Delfina Gómez fue llevada a la SEP para
preparar el fraude electoral de junio del 2021.

Y es que, como saben, en junio del 2021, México vivirá la mayor
elección de la historia; el relevo total en la Cámara de Diputados, en 15
gobiernos estatales y 30 congresos locales, además de miles de alcaldías.
Todo ello sin contar con la alianza impensable e imposible de antaño y
que hogaño se hizo realidad; alianza de “los tres grandes”; PAN, PRI y PRD,
además de la sociedad civil agrupada en “Sí por México” y México Libre, el
fallido partido de los Zavala Calderón.

Esos partidos pactaron una alianza total en 171 de 300 distritos
electorales; de 23 entidades federativas. En 18 estados la alianza para diputado
federal es total; en cinco es parcial y en nueve entidades los partidos van por
separado. Además de alianzas a gobiernos estatales.

En pocas palabras, que a partir de hoy, todo lo que haga o deje de hacer
López Obrador –como la grosera manipulación de las vacunas contrra la
pandemia–, va en dirección de evitar la debacle de Morena y de su gobierno,
en junio próximo.

Y para eso llegó a la SEP, Delfina Gómez, para operar el fraude desde
el mejor lugar posible; el magisterio nacional.

Sin embargo, en buena parte de los medios mexicanos y de la prensa
extranjera –como es el caso del cada día más desacreditado El País–, el
“lopoezobradorismo” consiguió remontar la ”paliza mediática” contra Delfina
Gómez, gracias “las jaurías babeantes” que hicieron del tema un asunto de
clasismo, racismo y hasta misoginia.

Pocos quieren ver el transforndo del tema; que Delfina Gómez no va a
la SEP para lograr una mayor y mejor educación para los pobres de México.

No, Delfina va a la SEP para dirigir al mayor ejército de leales lopistas,
los maestros, mediante el mayor presupuesto del Estado, el de la SEP, el
servicio de los fines político-electorales de Morena y de López Obrador.
La crítica a Delfina no es porque sea hija de un albañil y una ama de
casa; tampoco por no saber expresarse de manera correcta y menos por su
ignorancia literaria, como lo sugiere en forma maniquea El País, No, se le
critica por sus antedecedentes y su historia rapaz en la política mexicana.
Y si lo dudan, a continuación reproducimos el Itinerario Político del 21
de marzo de 2017 –entonces en Milenio–, titulado: “Delfina robó en Texcoco,
igual que AMLO en el GDF”.

“El paralelismo es asombroso. Se convirtió, según reputados
morenistas, en una calca de las prácticas depredadoras del gobierno de Andrés
Manuel López Obrador en el Distrito Federal.

¿A qué nos referimos?

A que hoy los gobiernos con las siglas de Morena –en municipios del
Estado de México y delegaciones de la CdMx–, “ordeñan” la nómina de los
trabajadores para destinar ese dinero a la actividad partidista de Morena.
“¿Recuerdan que cuando López Obrador era jefe de Gobierno del DF le
quitaba 20 por ciento del salario a los trabajadores capitalinos vía nómina? ¿Se
acuerdan que el dinero robado a trabajadores era utilizado para activismo
político personal de AMLO?

Bueno, pues esa misma práctica se impuso en municipios como el de
Texcoco, donde la entonces alcaldesa Delfina Gómez canalizaba cada
quincena un cuarto de millón de pesos –250 mil pesos–, al Grupo de Acción
Política (GAP), que desde hace dos décadas regentean Higinio
Martínez y Horacio Duarte, entre otros.

“Esa práctica –de “ordeñar” la nómina de los trabajadores para robar el
dinero y usarlo políticamente–, la practica el hoy alcalde de Texcoco, Higinio
Martínez, quien de humilde médico texcocano hoy es un adinerado político
mexiquense, principal apoyador de López Obrador y promotor de la
candidatura de Delfina Gómez.

“Y no, la denuncia sobre malversación de fondos y robo a la nómina de
los trabajadores municipales de Texcoco por parte de la alcaldesa Delfina
Gómez no es una ocurrencia, tampoco un invento y menos un complot.
“No, resulta que el PAN tiene lista una denuncia que presentará a la
Fepade, en la que documenta que, durante su gestión como alcaldesa de
Texcoco, Delfina Gómez pagó quincenalmente un promedio de 250 mil pesos
–medio millón mensual y seis millones al año–, al Grupo de Acción Política
para impulsar el activismo de Morena (por cierto, según reputados morenistas que confirmaron el saqueo, el mismo robo se lleva a cabo con la nómina de los
trabajadores de todas las delegaciones de Morena en la Ciudad de México).

“Y es que según documentos oficiales, la transferencia de dinero
público del municipio de Texcoco se hizo desde la cuenta municipal número
252544745 de Banorte, a la cuenta de Grupo de Acción Política, bajo el
concepto de apoyo al GAP.

“El dinero fue utilizado para los actos proselitistas que, a la vuelta de
los meses, convirtieron a Delfina Gómez en candidata de Morena al Estado de
México.

“Según cálculos de los denunciantes, Delfina Gómez habría saqueado
por lo menos 20 millones de pesos del municipio de Texcoco —vía el GAP
de Higinio Martínez—, para construir su candidatura al gobierno mexiquense.

Lo curioso del caso es que Delfina Gómez, AMLO, Higinio
Martínez y Horacio Duarte –integrantes de la pandilla que saqueó Texcoco–,
omitieron en el reporte de gastos de campaña al Instituto Electoral del Estado
de México, la compra de más de 580 espectaculares promocionales de la
candidatura de Delfina Gómez.

¿De dónde salió el dinero? Queda suficientemente claro. ¿O no?
Pero la historia del empoderamiento de la peculiar pandilla política de
Texcoco, conocida como Grupo de Acción Política, no es una novedad. En
realidad se remonta a finales de la década de los 80, del siglo pasado, cuando
un joven médico texcocano, de nombre Higinio Martínez, se vinculó con el
PRI municipal y estatal.

“Higinio creció a la sombra del ex gobernador Alfredo del Mazo
González, hasta que traicionó su origen priista y se afilió junto con todo el
GAP al PRD.

“En 2011, junto con Horacio Duarte, Rosendo Marín, Fabiola Gallegos,
José Luis Gutiérrez Cureño, Agustín Corona y otros, crearon una mafia en el
PRD mexiquense, que llevó a Higinio Martínez a diputado federal y senador.
“A su vez, Horacio Duarte llegó a ser representante de AMLO ante el
INE en 2012. En su oportunidad, el Grupo de Acción Política se afilió a
Morena e inició la búsqueda de nuevos cuadros. En 2013, el GAP impulsó
a Delfina Gómez como candidata de Morena a la alcaldía de Texcoco.
“Desde entonces, la alcaldesa ordenó descontar 20 por ciento de la
nómina a cada trabajador del municipio, para financiar su campaña…
“¿Así o más claro? Al tiempo”.

Como queda claro, desde la SEP, la fuerza del “magisterio” y el
poderoso presupuesto de la educación, servirán a la dictadura de López
Obrador para intentar “el fraude del siglo”. ¿Lo dudan?
Se los dije.