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miércoles, 30 de diciembre de 2020

RACISMO Y DISCRIMINACIÓN ÉTNICA, SOCIAL Y RELIGIOSA EN MÉXICO

 RACISMO Y DISCRIMINACIÓN ÉTNICA, SOCIAL Y RELIGIOSA EN MÉXICO: SU ORIGEN Y CÓMO SE REPRODUCE EN LA SOCIEDAD CON FUERTES TONOS DE ANTISEMITISMO

El racismo que México niega
La evidencia estadística sobre el aumento de la discriminación por el color de piel, los ataques de la religión preponderante hacia otras a las que llama sectas y el discurso antisemita disfrazado de anti sionismo y sus efectos en la vida de los mexicanos es abrumador, sin embargo en nuestro país apenas se empieza a hablar de este problema. Hace unos días hubo un artículo de una persona que como Dijo Cervantes: “De cuyo nombre no quiero acordarme”, hace referencias “documentadas” del apoyo Judío a la propaganda, ideas y metas protestantes en el siglo 15. Utiliza constantemente el término “Marranos” para referirse a los judíos conversos al catolicismo. Ello sería equivalente a usar los términos Nigger o Caffir; el primero usado en la subcultura segregacionista (WASP o BANCO ANGLOSAJÒN PROTESTANTE) , el segundo usado por la etnia blanca BOER, en el apartheid sudafricano. Entendemos que los términos derogatorios SÌ fueron empleados y que se pueden y hasta deben ocupar en una referencia histórica, pero solo como mención. Si estos son continuamente usados en un artículo, se les da legitimidad. Pongo un ejemplo: Los Judíos conversos en España a los que se les llegó a llamar “MARRANOS” apoyaron las ideas….. y entonces estos conversos distribuyeron folletos y…
Sin embargo lo que encontramos es lo siguiente: EL NUNCIO CATÓLICO OLEANDRE INFORMÓ EN EL AÑO 1521, DESDE EL REISCHSTAG ALEMÁN DE WORMS, QUE "SE DICE QUE LOS MARRANOS CONTRIBUYEN CON MUCHO DINERO PARA LA EDICIÓN DE LAS OBRAS DE LUTERO EN ESPAÑOL".
EL MARRANO MARCO PÉREZ (NACIDO EN 1527) SE CONVIRTIÓ EN EL JEFE DE LA IGLESIA CALVINISTA EN AMBERES. SU MUJER, ÚRSULA, EMPLEÓ SU ENTUSIASMO MARRANO EN LA ORGANIZACIÓN DE ESCUELAS CALVINISTAS CLANDESTINAS. EL MARRANO XIMÉNES, MAGNATE DEL AZÚCAR, EDITÓ UNA DE LAS OBRAS DE CALVINO EN 30,000 EJEMPLARES Y LAS DISTRIBUYÓ CLANDESTINAMENTE EN ESPAÑA. EL MARRANO FERDINANDO BERNIU SE CONVIRTIÓ EN AMBERES EN EL JEFE DE UNA NUEVA SECTA ANTICATÓLICA DE MARTINISTAS. Y así hasta que el artículo termina
No es sorprendente la retórica de dicho individuo, el racismo, clasismo y discriminación en Mèxico, son velados per tristemente existentes : el discurso de una parte de los sectores progresistas es antisemita. Vaya por muestra este botón: en enero de 2013, el Programa de Posgrado en Derechos Humanos de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) organizó un evento para apoyar a Palestina Ya. Colectivo de Solidaridad con Palestina. En el marco de su respuesta a ciertas preguntas, Raquel Rodríguez, integrante de dicha organización, señaló:
Hay mucha literatura que habla de que el Holocausto no fue lo que ellos nos plantearon [...] ni es cierto que había ese gas con el que los encerraban para ducharse ni nada [.]; que el Holocausto fue una gran mentira. Si hubieran matado a seis millones de judíos, ya tendríamos la suerte de que no hubiera judíos en este planeta [...]. Los votos en la ONU [Organización de las Naciones Unidas] a favor del Estado de Israel fueron comprados [...]. Recibieron un cheque en blanco con todos los ceros que le pudieron poner. Y hoy en día, cuidado con México, porque [...] todas las empresas inmobiliarias que están funcionando en México son de judíos. Y nos están acabando y nos están vendiendo nuestros espacios verdes.
El actor mexicano Tenoch Huerta. GLADYS SERRANO
México 30 NOV 2019 - 12:04 EST
México cierra los ojos ante el racismo, pero siempre ha estado ahí. Un velo de discriminación se extiende desde los rincones más públicos hasta los más íntimos y lo cubre todo. La oportunidad de estudiar y tener un empleo digno. Ser condenado por un crimen que no cometiste o ser sometida a tratamientos anticonceptivos contra tu voluntad. La entrada a un bar, un restaurante o un centro comercial. Los noticieros de todas las cadenas, los bombardeos de publicidad aspiracional y las telenovelas que se exportan a decenas de países con protagonistas rubios, héroes blancos y villanos prietos. Se dice que "hay que mejorar la raza" al buscar pareja, que "trabajaste como negro" cuando vuelves a casa y se te pide que "no seas indio". La lista de frases y dichos racistas es interminable, pero en el fondo hay un hecho ineludible: el estigma de ser llamado "indio" o "negro" aún marca la vida de las personas, lo que pueden reclamar y hasta dónde se les permite llegar.
"En México es más fácil hablar de política, fútbol y religión que de racismo", afirma el actor Tenoch Huerta, que tuvo que esperar más de ocho años para recibir un papel protagónico en el cine. "No venía de ninguna dinastía de actores, no tenía un apellido de abolengo, no era caucásico", cuenta. "Estaba formado al final de la cola, con los que nunca reciben una oportunidad y siempre se topan con puertas cerradas". Hasta que alguien se olvidó de cerrar la puerta y recibió su primer gran papel como un jardinero –moreno, por supuesto- en Déficit, la ópera prima como director de Gael García Bernal.
Huerta pasó de las calles de Coacalco, una ciudad dormitorio en la periferia de la capital mexicana, hasta la alfombra roja del Festival de Cannes en 2007. Siguieron más de 60 apariciones en producciones de México, Estados Unidos y España: desde Narcos de Netflix y Mozart in the Jungle de Amazon hasta clásicos modernos del cine mexicano como Güeros y créditos al lado de Mel Gibson y Lucy Liu. El éxito no evitó que se sintiera encasillado. "Un día le pregunté a un amigo que trabajaba en castings por qué siempre me daban papeles de pobre, ignorante y violento", recuerda el actor. "Porque eres moreno", contestó su amigo.
La historia de Huerta no se trata de un triunfo de superación personal. Es una anomalía en el sistema. La apariencia física es la principal causa de discriminación en México y más de la mitad de la población indígena y afro descendiente considera que sus derechos se respetan poco o nada, de acuerdo con la última Encuesta Nacional sobre Discriminación (Enadis). "La discriminación étnico-racial es estructural porque se funda en un orden social y en una relación de poder que tienen antecedentes históricos en el país desde hace varios siglos y se reproduce de manera permanente en la sociedad, por lo que también sus efectos son estructurales", apunta Patricio Solís, investigador del Colegio de México (Colmex). "Aun así, se nos enseña que 'el cambio está en nosotros' y que 'le echemos ganas', se nos pide estar avergonzados de quiénes somos y eso nos confunde a tal grado que no dimensionamos en lo cotidiano lo que implica buscar ese ideal europeo, blanco u occidental. Y nos frustramos", agrega Judith Bautista, académica de origen zapoteco y directora del Colectivo para Eliminar el Racismo en México.
"El racismo, ya como un discurso y una ideología, funciona en México desde el siglo XVIII dándole todos los atributos negativos a las personas negroides o indígenas de América", señala María Elisa Velázquez, del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). El concepto de raza, importado desde Europa y ya sin ninguna evidencia científica que lo respalde, parte del aspecto físico, pero engloba además la historia, el origen, la lengua y la moral para justificar falsa superioridad y la dominación de unas personas sobre otras, explica Velázquez. Mientras el concepto de raza se ha desechado, el racismo ha mutado generación tras generación, desde los indios que no podían caminar por la misma banqueta que los blancos durante la Colonia hasta los insultos contra la actriz Yalitza Aparicio por ser nominada a los Óscar.
Ser de piel más oscura implica tener en promedio dos años menos de escolaridad, menor ingreso, menor acceso a puestos directivos y menores probabilidades de mejorar la posición socioeconómica. "Decimos que queremos combatir la pobreza, la desigualdad e, incluso, la violencia, pero no hemos hecho un análisis profundo de cómo la discriminación desempeña un papel en todos estos fenómenos", cuestiona Alexandra Haas, presidenta del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación hasta noviembre.
El componente racial de la pobreza hace que las líneas entre la clase y la "raza" sean difusas y que se tienda a reconocer más el clasismo que el racismo. Lo cierto, coinciden los especialistas, es que ambos existen y que sus efectos son acumulativos. Se puede ser víctima de discriminación racial y socioeconómica, pero la experiencia discriminatoria será peor para mujeres y personas con otras identidades de género, por ejemplo, que ya son discriminadas por esos motivos. La Enadis, por ejemplo, revela que la mitad de la población indígena cree que sus derechos se respetan poco. La cadena de discriminación se extiende en todos los sectores de la población y crea un sistema soterrado de abusos y privilegios. "Eso trae el problema a casa", apunta Solís: "Esto va más allá de ser indígena, basta solo parecerlo o tener rasgos racializados para sufrirlo, ya no estamos hablando del México profundo o lejano, estamos hablando de lo que vivimos todos los días".
Tras un proceso doloroso y prolongado de denuncia social, el país se ha puesto poco a poco frente al espejo del racismo. "Hemos pasado de un periodo de invisibilización a un periodo de visibilidad incómoda", sostiene Solís. Más sectores de la sociedad indagan sobre la pigmentocracia, el blanqueamiento, los prejuicios, el doble papel que implica discriminar y ser discriminado, y quiénes se benefician de un sistema de privilegios.
El fenómeno no es nuevo, pero la conversación apenas empieza y el trecho para las políticas públicas que combatan el problema es largo. "Tenemos que hablar de esto y aceptar que vivimos en un sistema que nos da más o menos valor por nuestra apariencia, nuestras facciones, cómo vestimos y hablamos", sentencia Bautista. "El reto es tan urgente como tener que cambiar una tendencia histórica", advierte Haas. La batalla contra la discriminación étnica y racial no solo se libra en el pasado ni es una simple promesa hacia el futuro. Es una realidad que ya daña y limita a millones de personas. "Luchar contra el racismo es luchar por el respeto a nosotros mismos y a lo que somos", concluye Huerta.
El 21 de marzo de 1960 es un día histórico para la humanidad pues sentó el precedente del impacto que tiene la discrimanación racial en la sociedad. Fue precisamente ese día, cuando la policía abrió fuego y mató a 69 personas en una manifestación pacífica contra las leyes de pases del apartheid que se realizaba en Sharpeville, Sudáfrica. El recuerdo de ese acontecimiento llevó a la Asamblea General de las Naciones Unidas a proclamar “El Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial” el cual se conmemora el 21 de marzo de cada año, desde 1966.
Lo ocurrido en Sharpeville fue una oportunidad para evidenciar un fenómeno de exclusión y afectación social que se presenta en el mundo y que se materializa, cada vez, de diferentes maneras, ahora no sólo contra la población afrodescendiente, sino además, contra indígenas y población migrante.
Para 1979, la Asamblea General aprobó un programa de actividades que se realizarían durante la segunda mitad del Decenio de la Lucha contra el Racismo y la Discriminación Racial. En esa ocasión, decidió que debería organizarse todos los años y en todos los Estados, a partir del 21 de marzo, una semana de solidaridad con los pueblos que luchan contra el racismo y la discriminación racial.
SOBRE EL APARTHEID Y SU INCIDENCIA EN EL RECONOCIMIENTO DE LA DISCRIMINACIÓN RACIAL
El apartheid fue el sistema de segregación racial ocurrido en Sudáfrica y Namibia el cual existió hasta 1992. Este sistema consistió separar a las personas según su grupo racial, en ese momento, raza blanca y afrodescendientes. De esta manera, las personas denominadas blancas tenían acceso a derechos y se se prohibía el relacionamiento entre blancos y negros.
El objetivo del apartheid era era conservar el poder, que en el caso de Sudáfrica y Namibia era minoría blanca (21 % de la población), que en otras condiciones habría perdido su posición de privilegio. Cabe resaltar que antes de la victoria del Partido Nacional en 1948 los negros podían votar, pero con restricciones.
Desde el Programa Inclusión para la Paz, de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) implementado por la Organinización Internacional para las Migraciones (OIM) se acompañan y lideran diferentes actividades y campañas que buscan evidenciar las diferentes formas de discriminacion racial que afectan, fundamentalmente, a las poblaciones étnicas, afro descendientes e indígenas en algunos países

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