El purgatorio de la republica de Texas

 El purgatorio de la republica de Texas

Con una victoria sacada de la manga gracias a la ineptitud de Santa Anna, los independentistas tejanos logran alcanzar la independencia para alcanzar sus metas providencialistas que les garantizaba que con su fe podrían llegar a la meta del “Destino manifiesto”. Sin embargo, contra sus pronósticos y también el del discurso nacionalista mexicano que lo ve como un plan estadounidense para arrebatarnos territorio las cosas no fueron sencillas, durante los nueve años que duro la independencia tejana las situación era muy gris y ni México ni Estados Unidos tenían garantizado, Texas era muy débil al igual que México y Estados Unidos no estaba en condiciones para poder garantizar la anexión, por lo que los tejanos pasaron su vida independiente en la zozobra y con una balanza que podía caer hacia cualquier lado.

A pesar de los temores tejanos, México no contaba con la capacidad de reconquistarlos, el país pasaba por un periodo turbulento caracterizado por una inestabilidad en todos los sentidos, por un lado el control político estaba en continua pugna entre federalistas y centralistas que hacían lo posible por llegar al poder, la economía se encontraba en una permanente decadencia con una producción agrícola que no podía solventar las necesidades de la población, siendo la explotación de la plata la única que podía garantizar una entrada a las exiguas arcas del gobierno, producto de los vicios del dominio colonial que termino por manifestar sus consecuencias en la independencias. El único punto que parecía prosperar era el comercio internacional, ya que su integración al mundo le permitió ser un punto importante para Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos, empezando a ejercer influencia en las elites políticas. La realidad mexicana con sus 7 millones de habitantes en la miseria explotados por la iglesia y la clase adinerada la hizo que solo aspirara a un ejército de leva que tenía que contener los diferentes conflictos autonomistas.

Como mencione antes, Texas no pasaba por buenos momentos y sobrevivió gracias a la debilidad mexicana, si bien su población se cuadruplicó gracias a las migraciones estadounidenses (de 30,000 pasaron a 125,000) su economía era muy pobre ya que no contaban con una moneda fija, dependían de intercambiar su producción de algodón por bienes importados, carecían de industria o de vida urbana que padecía de una inflación y devaluación continua, por lo que tuvieron que recurrir a préstamos y a la especulación de los terrenos por parte de Estados Unidos. Desde su independencia, tardaría seis años en lograr el reconocimiento diplomático por parte de Francia e Inglaterra, reforzando el discurso que apoyaba la anexión a EU.

A pesar de su estado deplorable, no impidió que se mantuvieran incursiones militares mexicanas hacia Texas, que si bien sabotearon la estabilidad del joven país, no tenían la fuerza suficiente para poder garantizar la reconquista, haciendo que la región entre el rio Nueces y el Bravo fuera tierra de nadie. Entre 1839 y 1841 haciende a la presidencia tejana Mirabeau Bounaparte Lamar, quien intenta una política más agresiva con México poniendo como meta su expansión hacia el océano Pacifico, por lo que empieza con el apoyo a las insurrecciones en el sur de la frontera y en Yucatán, sumado a una expedición que pretendía conquistar Santa Fe, todas estas empresas fracasarían.

Este clima de continua crisis que no encontraba fin dio entrada para que la facción anexionista se fortaleciera al ser la única garantía que pudiese asegurar su sobrevivencia, lo que no contaban era con la indiferencia política que tendría EU para aventurarse a dar el paso a la expansión territorial. El primer intento se daría durante la presidencia de Martin Van Buren en 1837, donde la amenaza de entrar en guerra con México y sobre todo que fortalecería el bando de los estados esclavistas, esto hizo que excusara el tratado de amistad se tenía y a la imposibilidad constitucional de la anexión de una nación independiente como obstáculos que los impedía acceder a la petición tejana. Durante el gobierno de Lamar manifiesta su resentimiento hacia cualquier propuesta de anexión a EU por el rechazo que tuvieron, pero no dejo de solicitar su ayuda tratando de usar el tratado de amistad con México como aplicable a Texas aduciendo que los mexicanos alentaban a los indígenas a saquear a las poblaciones, excusa que la cancillería estadounidense no hace caso.

La llegada de John Tyler a la cabeza de EU en 1841 también fue una desilusión debido a que permanecía la amenaza de los estados esclavistas, para ese momento asciende Samuel Houston a la presidencia tejana donde solicita la mediación estadounidense para los conflictos fronterizos con México, peticiones que fueron ignoradas y que lo llevan a aceptar el armisticio propuesto por Francia e Inglaterra en el que se aceptaba la soberanía mexicana como un intento de lograr la autonomía, esta tuvo el visto bueno del ministro estadounidense en México Waddy Thompson. Con un intenso mensaje victimista que manejaban el representante tejano Isaac Van Zandt en Washington se intentaba que por fin se aceptara la anexión alegando el salvajismo de los mexicanos, pero estos argumentos eran rebatidos por el secretario de Relaciones Exteriores que presentaba las quejas de los mexicanos donde exponían las tropelías de los tejanos, a lo que Van Zandt excusaba que se trataban de casos aislados como respuesta a los ataques mexicanos.

La suerte de los tejanos empieza a aflorar en 1843 con el ascenso de Abel P. Upshur como secretario de Estado quien era favorable a la anexión a quien se agrega el ministro Thompson que ve con desagrado las acciones de Santa Anna y al interés de los abolicionistas británicos que amenazaban a los empresarios esclavistas lo que hizo que se alejara de su postura mediadora. A pesar de que por fin contaban con el respaldo de un miembro del gabinete, un sector de la población que incluía al mismo Houston no estaban a favor de la anexión y veían que la propuesta europea les podía asegurar mejores condiciones, pero la presión popular hizo que cambiara su postura y empezara las negociaciones con el gobierno estadounidense. La causa tejana por fin tendría éxito con la ascensión a la presidencia por parte de James K. Polk en 1845 quien era partidario de la “reanexión”, concepto que usa en su campaña política y que tuvo éxito, por lo que una vez al mando acelera el proceso y finalmente se logra su incorporación s EU. De haber tenido mejores condiciones, México tenía más oportunidades de lograr la reconquista, lamentablemente la balanza se inclina a favor de EU cuya política interna hizo conveniente la anexión tejana.

Gracias por su atención y los espero en la siguiente lectura

Bibliografía: