"Es difícil imaginar una guerra total en Oriente Medio"

Hasan bin Talal: "Es difícil imaginar una guerra total en Oriente Medio"
"La mentalidad occidental siempre necesita un enemigo externo"
Entrevistas - 24/07/2010 8:50 - Autor: Isabel Ramos Rioja - Fuente: La VanguardiaVota:- Resultado 4 votos | Más... Etiquetas: oriente medio, israel, iran, palestina, magreb, occidente, integrismo

Hasan bin Talal propugna una iniciativa que lleve a una comunidad de agua y energía, elementos básicos y desigualmente distribuidos en Oriente Medio (Foto Xavier Gómez).La conferencia inaugural del Congreso sobre Oriente Medio y Norte de África (Wocmes, en inglés) que, organizado por el Institut Europeu de la Mediterrània (IEMed), se celebra esta semana en Barcelona, corrió a cargo del príncipe Hasan bin Talal. El pasado lunes el príncipe Hasan habló de "La ruta de las ideas", ahí donde antes había la ruta de las especias, de la seda y de la peregrinación.

Las únicas ideas que llegan a Occidente son las del integrismo. ¿Por qué no llegan otras?

El integrismo es una forma de aislamiento. Puedo mostrarle un mapa de las "nuevas rutas de la seda" que excluyen WANA [Asia Occidental y Norte de África, en sus siglas en inglés]. No hay infraestructuras en absoluto. Yo cuestiono la tesis de que Occidente no conoce más que los aspectos terroristas o integristas de WANA. El congreso Wocmes en sí mismo muestra el interés por conocer nuestra región. Eso era quizá verdad después de la tragedia del 11 de septiembre, pero desde hace dos años Europa ha empezado a enfrentarse a importantes desafíos que tienen sus raíces en las relaciones culturales.

¿Por qué son tan difíciles los intercambios entre el Magreb y Oriente Medio?

Los países magrebíes tienen la posibilidad de ser más eficaces que los países del Mashreq porque están más cerca de Europa, son más occidentales que nosotros porque ustedes tienen millones y millones de inmigrantes y ellos tienen una identidad francófona e hispanohablante e hispanófila. En nuestra frontera tenemos la teocracia iraní. Por otra parte, está Turquía. Son dos países en la definición árabe son aayam, musulmanes no árabes. Para mí la historia otomana, la historia turca (mi madre nació en Estambul) forman parte de nuestra identidad islámica y pluralista. En los últimos años hay una contradicción: Turquía ha proporcionado servicios diplomáticos para tender puentes entre sirios e israelíes, y entre Irán y el resto del mundo. Pero la verdadera contradicción es que los árabes no son capaces, en el Mashreq, de resolver sus propios problemas, sus propios conflictos. Todo el mundo ve que EE.UU. es la superpotencia. Y ve que Israel tiene una relación profunda, privilegiada, con EE.UU. que lleva a creer que es imposible actuar, mejorar la calidad de vida, sin una solución al conflicto israelo-árabe.

Ha hablado de Irán y de Turquía, los dos grandes países que pugnan por el liderazgo en la región, lo que ha llevado a Irán a buscar la energía nuclear.

Permítame que le comente algo que me pasó durante una reunión sobre una zona sin armas de destrucción masiva, MAD [Destrucción Mutua Asegurada, en iglés]. Yo veo más importante la MAS (Supervivencia Mutua Asegurada). Un israelí me dijo que era imposible para ellos llegar a una solución con los árabes a causa de Irán. Si Israel es el blanco de Irán, nosotros, como jordanos, vamos a evaporarnos. Tenemos Dimona [central nuclear israelí] al lado, y Bushehr [central nuclear iraní] por el otro. Si empezamos con Irán, mañana será Pakistán, y quizá India y China después. Adoptar una posición de crítica frontal a todo lo iraní lleva a los iraníes a formar una piña para ser potencia regional porque no tienen otra opción.

Se dice que Israel es el único país democrático de la región.

Me parece bastante difícil hablar de democracia en un país que existe por la ocupación del territorio del otro, que niega los derechos del otro. Es difícil decir que son democráticos cuando expulsan a sus parlamentarios árabes de su Kneset por intentar criticar el ataque a la flotilla humanitaria para Gaza. Sí eligen a su gobierno, pero Hamas también fue elegido. ¿Por qué Israel decía que no iba a hacer progresos políticos con Hamas por su posición sobre la existencia de Israel? La OLP no renunció a su carta, que pedía el fin del Estado judío, hasta años después de Oslo.

Cuando hay elecciones libres ganan los islamistas y no les dejan gobernar.

Si buscamos paralelismos, la UE ha reconocido Kosovo, de mayoría musulmana, el Chipre griego, no el turco. No ha reconocido el Estado palestino y cuento como posibilidad que los palestinos anuncien su declaración de independencia. Esta región es importante sólo por dos razones: los impuestos del petróleo y la compra de armas. Desde los acuerdos de Oslo se han gastado 12 billones de dólares en armas. La dignidad humana no cuenta. Si conviene reconocer a Hamas lo harán, como hicieron con la OLP. La mentalidad occidental siempre necesita un enemigo externo. Es una industria el odio. El odio de los mercenarios, de grupos fanáticos de Bin Laden por una parte, de Blackwater y similares por otro.

Se habla mucho de la diversidad interna de Israel. ¿Cómo ve el país dentro de 20 años?

Veo la posibilidad de un Israel que sea parte de nuestra región en una unión federada de países de Oriente Medio como una bella previsión. Estabilizar esta región es preferible a que cuando matan a un uigur en Xinjiang se vengan en Marruecos contra los obreros chinos, como hizo Al Qaeda. La alternativa para Israel es difícil de imaginar: una guerra total en nuestra región. O una guerra que destruya Irán, Pakistán o Israel.