"En realidad el conflicto en torno a Corea del Norte es único, ya que tiene un nivel muy alto de amenaza pero una probabilidad baja de derivar en una guerra real", explicó el politólogo Guevorg Mirzaián en un artículo publicado por RIA Novosti.
El nivel de guerra entre dos países con armas nuclerares ha sido señalado por varios especialistas en guerra como la causa de la Tercera Guerra Mundial, ahora latente con el programa de misiles de Corea del Norte y la ‘Madre de todas las bombas’ (MOAB) que lanzó Estados Unidos recientemente.
De acuerdo a Mirzaián, ninguno de los actores en la península coreana está dispuesto a hacer el primer ataque, pues la élite norcoreana es consciente de que cualquier guerra culminaría en la toma de Pionyang.
Estados Unidos, Japón, Corea del Sur y otros -explica- tienen que pagar muy caro empezar la guerra, especialmente por el último país en mención.
Según publica Russian Today, contempla el experto politólogo que si esto ocurriese:
-Seúl dejaría de existir porque la artillería norcoreana reducirá a cenizas la ciudad, situada a tan solo a 50 kilómetros de la frontera.
-El costo de integración de una Corea del Norte destruida por la guerra sería inmenso y equivaldría a varios PIB anuales del Sur.
-No hay garantías de que Pekín no se involucre en el conflicto para defender a Pionyang.
Por eso ningún presidente estadounidense ha atacado Corea del Norte y ninguna de las crisis en la Península ha terminado en una guerra", asevera Mirzaián. "Todos entendieron perfectamente las reglas del juego y no cruzaron las líneas rojas".
Asimismo dijo que podría buscar Estados Unidos una operación militar con Corea del Sur y Japón para contender a Pekín también, lo que sería el objetivo de Donald Trump de querer la guerra en Asia.
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