Proyecto Pegasus: ¿Por qué dudo en defender al gobierno, pero debo

Proyecto Pegasus: Se ha espiado a activistas, periodistas y políticos que supuestamente utilizan malware para teléfonos móviles desarrollado por Israel .

El llamado Proyecto Pegasus , que llegó a los titulares de los medios de comunicación, ha destacado a la India en un grupo de países donde el espionaje de los teléfonos de los ciudadanos se practica ampliamente como política de estado. 

The Washington Post, que encabezó el Proyecto Pegasus,   propone monitorear las respuestas de estos 10 países seleccionados. Presumiblemente, estos son los primeros días.  De hecho, Hungría, uno de estos 10 países, ha lanzado el guante al WaPo planteando algunas preguntas incómodas:

“¿Ha hecho las mismas preguntas a los gobiernos de los Estados Unidos de América, Reino Unido, Alemania o Francia? En el caso que lo haya hecho, ¿cuánto tiempo les tomó responder y cómo respondieron? ¿Hubo algún servicio de inteligencia para ayudarlo a formular las preguntas? " Lee mas 

Ciertamente, preguntas muy pertinentes. El espionaje es uno de los pecadillos más antiguos del hombre, tal vez tan antiguo como la prostitución. Se convierte en voyerismo responsable, pero un estado depredador puede abusar de él. Narraré un incidente para reforzar este punto. 

Era el año 1992. Aproximadamente dos meses después de mi asignación como jefe de la División Irán-Pakistán-Afganistán en el Ministerio de Relaciones Exteriores, una tarde tuve un visitante no anunciado en South Block que estaba a cargo de la "contrainteligencia" de la India. Después de bromear con una taza de té, me tranquilizó yendo directamente al tema para decirme que no tenía nada que hacer conmigo, sino que simplemente tenía curiosidad por conocerme. 

Dijo - no mencionaré su nombre por respeto a la rara integridad y fibra moral de mi colega fallecido - que la División de la API cayó en el ámbito de su "cargo", dada la alta sensibilidad del trabajo para la seguridad nacional. Dijo que quería conocerme en persona después de escuchar mis conversaciones telefónicas, observar mi funcionamiento y estilo de vida e incluso indagar en mi pasado, sintiendo que yo era alguien con quien podía caminar en la noche.  

Ese fue mi primer "encuentro" en la vida real con el espionaje. No me sobresaltó, ya que acabábamos de regresar después de la asignación en Islamabad, y el espionaje se tomó como un hecho de la vida en las relaciones interestatales. 

A medida que pasó el tiempo y mi amigo del IB y yo nos hicimos amigos íntimos, llegué a saber cosas que no tengo más remedio que llevar a la tumba. Ahora, todas esas travesuras tuvieron lugar bajo los gobiernos del Congreso. Por lo tanto, incluso si el gobierno actual realmente hizo todo lo que alega el Proyecto Pegasus, fue solo "negocios como de costumbre". Esta es una cosa. 

En segundo lugar, las preguntas que Hungría lanzó al WaPo son muy relevantes. El ex denunciante de DIA Edward Snowden ha reaccionado al Proyecto Pegasus que pide una moratoria global en el comercio internacional de software espía. Lee mas 

Pero los poderes atrincherados nunca abdican. El conocimiento es poder y el poder de chantajear o defraudar a los adversarios o actuar en tiempo real proporciona una ventaja decisiva. Sin esa ventaja, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, no podría haber asesinado al general iraní Qassem Soleimani o Barack Obama decapitado a Osama bin Laden. 

La raíz del problema es que los intereses nacionales son definidos arbitrariamente por las élites gobernantes. Obama pensó que estaba en los "intereses nacionales ilustrados" de Estados Unidos intervenir el teléfono celular privado de la canciller alemana, Angela Merkel. Claramente, fisgonear no se limita a las autocracias o al autoritarismo posmoderno. 

Por lo tanto, difamar selectivamente a Hungría e India es intrigante. ¿Porque? Los dos países son democracias con rastros de autoritarismo posmoderno, quizás. Ambos son lo que los estrategas estadounidenses llaman "estados oscilantes globales". 

Dicho de manera sucinta, los estados indecisos globales son democracias influyentes que brindan las oportunidades más significativas para la política exterior de Estados Unidos a principios del siglo XXI, ya que poseen la capacidad y legitimidad para reforzar la red entrelazada de normas, instituciones, reglas y relaciones que durante seis años décadas preservaron la paz entre las grandes potencias, fomentaron la prosperidad económica y facilitaron la expansión de la libertad.

Pero el orden global actual enfrenta numerosos desafíos, algunos que emanan del ascenso de China y otros de un conjunto diverso de desarrollos internacionales. Estos desafíos tienen el potencial de fragmentar seriamente el orden internacional de manera que Estados Unidos y sus aliados sufrirán las consecuencias. 

Hungría e India ofrecen un gran potencial como socios para extender el orden global no solo en su compromiso común con las instituciones democráticas, sino también en sus economías en crecimiento y sus ubicaciones geográficas en sus respectivas regiones, lo que es altamente estratégico. Por lo tanto, las decisiones que tomen, ya sea asumiendo nuevas responsabilidades como aliados de Washington o su preferencia por el viaje gratis, podrían, en conjunto, influir decisivamente en la trayectoria del mundo actual. 

Esto les da un impacto mayor de lo que su población o producción económica podría justificar de otra manera y explica por qué se les da prioridad en el cálculo estratégico de EE. UU. Si las cosas se complican, Washington no dudará en utilizar la coerción o incluso el "cambio de régimen". 

Hungría e India son estados indecisos con un nacionalismo asertivo. Para los no iniciados, Hungría es el primer país europeo en utilizar la vacuna COVID-19 de China Sinopharm, y recientemente firmó un acuerdo para abrir un campus universitario chino en Budapest para 2024, lo que convertiría a la Universidad Fudan con sede en Shanghai en la primera universidad china. campus en Europa. 

Sinopharm es una vacuna eficaz y está fácilmente disponible, y China está abierta a la transferencia de tecnología. Hungría planea producir localmente la vacuna Sinopharm en una gran planta que se está estableciendo a un costo de US $ 193 millones en la ciudad oriental de Debrecen que haría que el país fuera autosuficiente en la producción de vacunas a partir del próximo año en términos mucho más económicos que si lo fuera. para importar Pfizer, AstraZeneca, Moderna, etc. 

Fudan se encuentra entre las 100 mejores universidades del mundo y ayudará a elevar el nivel de la educación superior en Hungría, proporcionando cursos a 6.000 estudiantes y el proyecto de $ 1.8 mil millones se cumplirá a través de un préstamo de $ 1.5 mil millones de un banco chino. 

Hungría llama a esto la estrategia de "Apertura Oriental", que favorece una mayor cooperación con países como China y Rusia. Claramente, existe la inquietud de que Hungría se esté transformando como "una especie de bastión avanzado de las grandes potencias orientales en la Unión Europea". La embajada de Estados Unidos en Budapest expresó sus reservas sobre la llegada de la universidad de Fudan a Hungría "dado el historial probado de Beijing de utilizar instituciones académicas para promover una agenda de influencia maligna y reprimir la libertad intelectual". 

Una vez más, el año pasado, Hungría negoció un préstamo de 2.000 millones de dólares del Exim Bank de China para la construcción de una línea ferroviaria entre Budapest y Belgrado, como parte de la Iniciativa de la Franja y la Ruta de China. Hungría también alberga el centro de suministro más grande de Huawei fuera de China. 

El primer ministro húngaro, Viktor Orban, ha difamado a las potencias occidentales por participar en el "imperialismo liberal" y su populismo de derecha se ha convertido en un serio obstáculo para la cohesión de la UE y el consenso entre Estados Unidos y la UE sobre China. 

Por supuesto, el primer ministro Modi ha tenido tacto y tomó la ruta "Chanakyan", pero su búsqueda de políticas exteriores independientes genera un síndrome de ansiedad en la mente estadounidense. Lo que molesta a Washington es que, a diferencia de Orban, que es abiertamente desafiante, Delhi siguió una política exterior abiertamente pro-estadounidense que convenció a la gente de Beltway de que estaban molestando a un estado crucial global en el “Indo-Pacífico”. Lee mas  

Bajo la supervisión de EAM S. Jaishankar, India hizo todo lo posible para armonizar con Washington. El ex presidente de los Estados Unidos, Trump, nombró deliberadamente a Jaishankar en el mega evento "Howdy Modi" en Houston por hacer profundas contribuciones a la asociación entre Estados Unidos e India. 

Pero entonces, en el entorno mundial multipolar de la era de Internet, la diplomacia chanakyana tiene limitaciones. Washington no permitirá que Delhi se salga de su abrazo, y últimamente ha comenzado a burlarse del gobierno de Modi, conociendo la sensibilidad de este último hacia su “imagen” internacional.

La reciente exageración en los lazos de India con Rusia, especialmente la bienvenida a la vacuna Sputnik V, y las reuniones de alto nivel hasta 2021 para dar arrogancia a la asociación especial habrían hecho sonar las alarmas en el Beltway. Lee mas

A pesar de los esfuerzos sostenidos de los cabilderos estadounidenses en los medios de comunicación para convertir el tono de las tensiones entre China y la India en un modo hostil, Delhi camina por la línea fina. La ambivalencia de la India sobre QUAD es evidente. No hay avances en la agenda comercial y económica para promover el proyecto Keep America Great de Biden. El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, se apresura a visitar Delhi .

Delhi no se está desempeñando como un estado indeciso para fortalecer la doble contención de Rusia y China por parte de Washington. ¡Seguro, el Imperio contraataca! WaPo, Guardian, Amnistía, etc. son viejos buques insignia de la era de la guerra fría. WaPo tiene fama de estar conectado al sistema de inteligencia de EE. UU. 

La tragedia de la India es, lamentablemente, hoy una casa dividida. Grandes sectores de la opinión son reacios a decir una palabra agradable sobre Modi Govt, especialmente las fuerzas progresistas que de otra manera pueden sentir la agenda oculta detrás del Proyecto Pegasus para presionar a India.