El Sagrado Corán, Revelación de Dios para la Humanidad

El Sagrado Corán, Revelación de Dios para la Humanidad
El propósito del islam es alejar a la gente de la adoración a los seres creados y dirigirla solo al Creador
Corán & Sunna - 18/10/2010 2:16 - Autor: Dr. Armando Bukele Kattán - Fuente: Webislam
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Etiquetas: filosofia, coran, ser humano

Mushaf al-Qur'an (La portada de una edición del Corán)
El último de los Libros revelados que Dios envió es el Corán, el cual es un atributo de Dios. Allah reveló por vez primera el Corán en la noche del "Qadr" (Destino, Poder o Decreto) (Leilatu-al-Qadr). Habiendo honrado Allah esa noche con la primera revelación del Corán: “Por cierto que revelamos el Corán en la noche del “Destino”. ¿Y que te hará comprender lo que es la noche del Destino? La noche del Destino es mejor que mil meses.” (Al-Qadr, 97: 1-3). El primer versículo revelado es: “Lee, en el nombre de Allah que todo lo ha creado”. Creó al ser humano de un coágulo. Lee y a tu Señor adora. A quien enseñó a través de la pluma. Le enseñó al ser humano lo que no sabía. (Sura 96. 1-5). “Que lo revelamos en una noche bendita” (44,3)
Allah reveló el Sagrado Corán en idioma árabe, y las traducciones a otras lenguas son aproximaciones al original, como versiones de su significado, que pueden servir para orientar al creyente musulmán, no árabe parlante. Todos los musulmanes recitan el Corán en su forma original, lo que es para ellos una fuente de bendiciones, ya que por cada letra que de él pronuncian, reciben una gracia divina. El estudio del Corán es un deber, así como el cumplimiento de sus dictámenes, la devoción por él y su veneración.
Dice Allah: “… que es un Corán sagrado; cuyo original está en un libro custodiado, que no lo toquen sino los purificados” (Al-Waqi'a, 56:78-79).
Las Revelaciones deben permanecer intactas: “Ay de quienes adulteran el libro con sus manos y luego dicen: “esto emana de Dios”, para lograr un mezquino beneficio! ¡Ay de ellos por lo que escribieron sus manos! ¡Ay de ellos por lo que lucran!” (Al-Baqara, 2:79).(Esto se refiere a aquellos que cambian las Escrituras Sagradas y las aplican fuera de contexto para su propio beneficio económico).
¿Cuál es la visión de los musulmanes sobre la Naturaleza del Ser humano. El propósito de la Vida y el Más Allá?
En el Sagrado Corán, Allah enseña a los seres humanos que fueron creados para glorificarlo y adorarlo a Él, y que la base de toda devoción verdadera es la conciencia en Dios. Todas las criaturas de Allah lo adoran naturalmente, aunque los seres humanos tienen el libre albedrío de adorar a Allah o rechazarlo. Es un enorme desafío, pero también un gran honor. Dado que las enseñanzas del Islam engloban todos los aspectos de la vida y la ética, la conciencia en Dios debe fomentarse en todos los aspectos de la vida. El Islam deja bien claro que todos los actos del Ser humano, son actos de devoción si se hacen sólo por Dios y según Sus Divinas Leyes y Escrituras. Como tal, la devoción en el Islam no se limita a los ritos religiosos, y por esta razón es conocido como una ‘forma de vida’, más que como una Religión. Las enseñanzas del Islam actúan como un bálsamo para el alma humana, y se fomentan cualidades como la humildad, la sinceridad, la paciencia y la caridad. Además, el Islam condena el orgullo y el carácter santurrón de creerse sabio y mandar a los otros al infierno, dado que solo Dios Todopoderoso es el Único Juez de la probidad humana y quien al final nos juzga y nos da su veredicto.
Las enseñanzas del Corán comprenden una escritura universal dirigida a toda la Humanidad y no a una tribu o ‘pueblo elegido’ en particular.
El Corán es un milagro vivo de la lengua árabe, y es conocido por ser inimitable en su estilo, forma e impacto espiritual, como también por el conocimiento científico único que contiene. El Corán fue descendido en una serie de revelaciones al Profeta Muhammad por un periodo de 23 años.
El Corán ha sido conservado sin alteración alguna, desde su Revelación proveniente de Dios, hasta nuestros días; sin modificación, ni corrupción, siendo así, el único Libro revelado que permanece intacto.
No hay duda de que el Profeta Muhammad, al igual que Moisés y Jesús, que la paz de Dios sea sobre todos ellos, han sido Mensajeros de Dios y la Doctrina que trajeron no era de ellos, sino del que los envió (Dios).
En la Biblia en Deuteronomio 18:22 se lee: "Si el Profeta ha hablado en nombre de Dios y su palabra no tiene efecto, ni se cumple, entonces es cosa que no la ha dicho Dios".
Unos mil quinientos millones de seguidores lo confirman, siendo además, la religión de mayor crecimiento en el Mundo. No hay restricción para el que quiera convertirse a la religión musulmana, haciendo la Shahada, o sea el Testimonio de Fe, en público. Puede hacer ésta, repitiendo en árabe una pequeña frase, palabra por palabra, o incluso sílabas y luego pronunciarla en español: “Ashhadu al-la ilaha illa Allah wa ashhadu anna Muhammadan rasul Allah". (“Doy testimonio que no hay más que un solo Dios, Allah y que Muhammad es su siervo y mensajero”).
Debemos insistir que más allá de todo, está la voluntad de Dios; él podría hacer lo contrario de todo lo que efectivamente ha hecho. Pero no lo hizo. Fijó las leyes y separó la verdad de la mentira. El mal, del bien. Y envió a sus Mensajeros, entre otros (Abraham, Moisés, Jesús y Muhammad), para que nos enseñaran el camino recto y no, el camino de los descarriados.
La unicidad de Dios, al igual que en el judaísmo, es básica en el Islam. En árabe: la ilaha ila Allah (No hay más que un solo Dios). Y en hebreo Adonai, Elohenu, Adonai Ehad (El Señor nuestro Dios, el señor es uno). Como puede verse Eloh, Allah, Ilah - Dios, y de allí Elohenu, Alahumma (nuestro Dios); Ahad, Ehad (uno); Elohi, Allahi, Ilahi (Dios Mio) mencionan, tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo Testamento y en el Corán, al único Dios, al Dios de todo, todos y todas; y que incluso Jesús, lo mencionó en la Cruz, según la Biblia, al pronunciar ilahi (elohi) lamma sabactani.
Las raíces alef, lam, ha, son iguales en árabe, arameo y hebreo y su pronunciación vocálica difiere, debido a su puntuación externa. Allah (con sus diferencias fonéticas) es así, el nombre de Dios, en los libros originales del cristianismo, judaísmo y el Islam. Vale una aclaración muy importante, Allah, no es un dios árabe, es Dios en idioma árabe. La Unicidad de Dios en Su Dominio significa que Dios, El Creador, que originó los Cielos y la Tierra, tiene un dominio perfecto del Universo. Sólo Él hace que las cosas sucedan. Él es el único que ofrece sustento y que determina la vida y la muerte. Él es el Todo Poderoso, El Omnipotente, Absolutamente Perfecto y libre de cualquier defecto. Nadie comparte Su dominio. Nadie puede resistirse a Su Decreto. Él es el Único que nos creó a todos nosotros y a todo lo existente, tanto de los Mundos visibles como invisibles.
Ni una hoja de un árbol puede caer sin Su permiso. Todo se mantiene bajo Su preciso control. El es muy superior a lo que podamos imaginar. Él es tan poderoso que para crear cualquier cosa basta con que diga: ¡Sé! Y es. Él creó todos los mundos conocidos y desconocidos, pero no es parte de ninguno de ellos. El propósito del Islam es alejar a la gente de la adoración a los seres creados y dirigirla solo al Creador. Si bien la mayoría de las religiones enseñan que existe un Creador, que creó todo lo que existe, casi todas poseen alguna forma de politeísmo (idolatría) con respecto a la adoración. Estas religiones convocan a sus fieles a adorar a otros seres además de Dios, o les exigen a sus fieles a que acudan a otros seres como intercesores entre ellos y Dios y peor aún, ponen a otros dioses junto a Él. Sin embargo, todos los Profetas y Mensajeros de Dios, incluyendo a Jesús, llamaban a la gente a adorar sólo a Dios, sin socios ni intermediarios.
Dios creó a los seres humanos con una inclinación innata y natural a adorarlo sólo a Él. Satán por otro lado, hace lo imposible para que la gente se aleje del monoteísmo, tentando a la Humanidad a adorar a distintos seres creados (idolatría). La mayoría de las personas tiende a desviar su devoción a algo que puedan ver, algo imaginable, aún cuando tienen el conocimiento instintivo de que El Creador del Universo es mucho más grande que cualquier cosa que puedan imaginar.
As-salam aleikumwa Rahmatu Allah wa barakatuhu
Que la paz de Dios, su misericordia y Sus bendiciones, se derramen sobre toda la Humanidad.
Amín