RENACIMIENTO CULTURAL OLMECA A.C.

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“El Retorno de Quetzalcoatl”
Equinoccio de Primavera 2010.

Primero fue Teotihuacán, en la pirámide del Sol, después Chichen-Itzá, en la pirámide de Kukulkán, luego el Tajín, en la pirámide de los Nichos y ahora es Las Lomas de Tacojalpa en la pirámide observatorio, en el Municipio de Minatitlán, Ver., donde vivirás el retorno de los ciclos.







Evento que de acuerdo a las investigaciones realizadas durante el 2007, el Dr. Delfino Álvarez Blanca define concretamente en su libro “Los Olmecas, el Anáhuac, el Cielo”, la gran importancia de lo que representa el sitio arqueológico de Las Lomas, Municipio de Minatitlán, Veracruz, México., quien refiere que...

Los Olmecas lograron la demarcación de su territorio basándose en los pasos cenitales del Sol para lo que construyeron edificios de medición, de los cuales enseguida daremos una pequeña explicación.
El paso cenital se realiza cuando al medio día el sol se encuentra exactamente en el centro del cielo y sus rayos caen verticalmente en un lugar determinado sobre la tierra. Este evento ocurre dos veces por año entre las líneas marcadas por los Trópicos de Cáncer y Capricornio. Se medían de varias formas, aquí presentaremos dos:



1.- Este observatorio construido en forma de pirámide, se encuentra en la zona arqueológica de Xochicalco, Morelos. En la fotografía, podemos ver los rayos del sol entrando verticalmente en la cámara de observación, cuando al medio día, el sol se encuentra exactamente en el centro del cielo (cenit); en este lugar, el evento ocurre el 14 de mayo y 30 de julio, en la imagen virtual vemos la forma en que se encontraba el observatorio cenital cuando estuvo activo (epiclásico 700 a 900 d.C.).

La imagen es de un medidor cenital maya, consta de una plataforma con cuatro escaleras y una estela en el centro. Cuando el sol realiza sus dos pasos cenitales en esta región, ninguno de los cuatro lados de la estela proyecta sombra.




Imagen tomada del libro Sagrado Trece, escrito por Frank Díaz
En la imagen anterior, el antropólogo Frank Díaz y su colaborador el arqueo-astrónomo Antonio Gómez Miranda muestran lo que en tiempos prehispánicos fue el Anáhuac. Al no conocer la existencia de la zona arqueológica de Las Lomas de Tacojalpa, Municipio de Minatitlán, Veracruz. Los investigadores ponen como centro del Anáhuac o capital religiosa, a la zona arqueológica de la Venta Tabasco, ubicada a 6 kilómetros del paralelo 18.

Frank Díaz y Antonio Gómez fueron invitados al encuentro cultural, El Retorno del Quetzalcóatl Olmeca; realizado el 17 y 18 de junio del 2006 en la ciudad de Minatitlán y en la zona arqueológica de Las Lomas de Tacojalpa. Al conocer las investigaciones del doctor Delfino Álvarez Blanca, reconocen que el centro del Anáhuac no es la Venta, sino la zona arqueológica de Las Lomas de Tacojalpa, ya que esta se encuentra exactamente en el paralelo 18; con estos datos podemos entender porque los Olmecas construyeron en medio de dos ríos, en un lugar inundable, una monumental Isla con la forma de Serpiente-Jaguar.

Los pasos cenitales brevemente explicados en páginas anteriores además de ser utilizados por los Olmecas para fundar sus ciudades, y demarcar su territorio, les sirvieron para ordenar los signos y números que dieron nombre a los días, años y ciclos de su gran creación, el calendario de Anáhuac. El más antiguo y exacto del mundo, por lo cual, los mexicanos de hoy debemos estar orgullosos, pero además tenemos la obligación de rescatarlo.

La asociación civil Renacimiento Cultural Olmeca se ha basado en el calendario de Anáhuac para elegir los días en que se realizará el gran encuentro cultural llamado: “El Retorno de Quetzalcóatl”,

Desde los olmecas, hasta los aztecas los pueblos del México antiguo utilizaron varios tipos de año o calendario:

A.- El Lunar o Tonalpohualli, de 260 días, del que derivan los demás tipos de año, ya que los veinte signos y 13 números que lo componen fueron utilizados en las otras versiones calendáricas. El Tonalpohualli se utilizo para las cosas sagradas.

B.- El Tun, de 360 días, utilizado exclusivamente por Olmecas y Mayas, con el se computo la cuenta larga y la cuenta corta, uno de sus ciclos termina en el 2012 y esto ha generado que algunos supersticiosos pronostiquen el fin del mundo. Esto no es así, solo termina un ciclo y comienza otro.

C.- El Xihwitl-Haab, es el calendario de 365 días, los pueblos mayas lo conocieron como Haab, los hablantes del Náhuatl y demás culturas Mesoamericanas lo llamaron Xihwitl (estación), hoy lo conocemos como calendario azteca. Este calendario también llamado del sol se utilizo para calcular su movimiento a lo largo del año, en el se guiaban para saber el día que comenzaban las estaciones, cuando ocurrirían los eclipses de sol y de luna, las fechas para sembrar y recoger los granos que cultivaban.

*En adelante por razon de sus inventores, al calendario Xihwitl-Haab, le llamaremos: Calendario Olmeca.

La tierra tiene dos movimientos: De rotación. Lo realiza sobre su eje y tarda 24 horas, y de traslación. Es el recorrido alrededor del sol, el cual, lo realiza en 365 días y casi 6 horas aproximadamente; debido a la desviación de 23 grados y medio de su eje, se generan las estaciones, y hace que desde nuestra perspectiva en la tierra, el sol aparentemente se mueva de norte a sur a lo largo del año, ese movimiento permitió que la mayoría de los pueblos del mundo calcularan el año solar. Aquí no vamos a discutir si los pueblos antiguos, incluyendo a los Olmecas, supieron que la tierra se movía, lo que nos interesa saber es que esas casi 6 horas, completan un día cada cuatro años y por esa razón, sus calendarios constaban de 366 y no de 365 como los tres anteriores, a ese año hoy le llamamos bisiesto. Aumentarle un día cada cuatro años genera otro problema, al cabo de 130 años se acumula un día y el cómputo del calendario solar comienza un día después debido a que el recorrido del sol no es de 365 días y 6 horas completas, sino 365 días 5 horas 48 minutos y 46 segundos. Los Olmecas, supieron de ese desfase y lo corrigieron, ese es uno de los motivos por los cuales el calendario de los Olmecas sea el más exacto de la tierra, Los pueblos del viejo mundo curiosamente corrigieron el desfase algunas décadas después de la conquista de México (algunos investigadores opinan que se basaron en el calendario de los Olmecas).
El ajuste que realizaron los Olmecas a su calendario se llama anti-bisiesto, la lógica dicta que el día acumulado, cada 130 años por exceso de bisiestos debe suprimirse al haberse cumplido ese lapso de tiempo; pero los Olmecas por cuestiones religiosas que tienen que ver con el Computo de los años y Ciclos de Venus, el Sol y la Luna, el ajuste lo realizaban suprimiendo 4 días al inicio de su nuevo ciclo, esto es cada 520 años. El último ajuste, lo realizaron los pueblos mayas que aun no habían sido conquistados por los españoles, en 1528.

El sol se encontrará en la latitud de los 18 grados o centro del Anáhuac, El 11 de mayo próximo equivalente al 5 Ocelote del calendario Olmeca, es una fecha muy importante porque comienza el Año Cenital, el cual se utilizaba para los ajustes anti-bisiestos, además a este día los Olmecas le llamaron Cargador (en Náhuatl Tameme), porque es el encargado de transportar al año sobre sus hombros, así que todo el año llevará ese nombre; El 11 de mayo del 2008 equivale al 5 Ocelote del calendario Olmeca. El cargador debería caer el 13 de mayo como ocurría en tiempos del imperio azteca; hoy cae dos días antes, como dijimos anteriormente, el 11 de mayo, debido a que este año es bisiesto, y el calendario gregoriano se encuentra desfasado con el cielo con un día, este problema se corregirá en el 2100.

Después de la explicación anterior, ya sabemos que el cargador se utilizaba para iniciar y darle nombre al año cenital, y que a su vez el año cenital se utilizaba cada 520 años para suprimir los cuatro días del exceso de bisiesto; solo nos queda comentar que los Olmecas y los pueblos posteriores hasta la llegada de los conquistadores, realizaban una gran fiesta cada año un día antes de la caída del cargador, al atardecer cuando se ponía el Sol simbólicamente ataban y enterraban las imágenes que representaban el año que terminaba, después apagaban los fogones y en el primer minuto del nuevo día encendían el fuego nuevo para rendir culto a la imagen que representaba al dios que llevaría sobre sus hombros el año nuevo; al medio día en la plaza principal, reunidos alrededor del marcador cenital esperaban con gran religiosidad que el sol se ubicara sobre él, para recibirlo y rendirle culto. Esta fiesta se realizaba con más suntuosidad cada 520 años, donde apagaban los fogones y se enterraban a los dioses que representaban al ciclo terminado; se encendía el fuego nuevo, se esperaba el paso cenital y se rendía culto a los dioses recién nacidos, los cuales, tenían distintos nombres que los del ciclo anterior, se dice que renovaban todos sus utensilios y remodelaban sus ciudades, incluso inauguraban una ciudad que se tenía construía para esta fecha.

Los días que utilizaron nuestros antepasados para sus ceremonias fueron 10, 11, 12, y 13, de mayo; para este año 2008 utilizaremos los dias 10 y 11 para celebrar el Gran Evento Cultural “El Retorno de Quetzalcóatl”, los equivalentes a estos, en el calendario Olmeca para este año se llamaran 4 Caña y 5 Ocelote, esperamos realizar esta gran fiesta cada año, como preámbulo a la que celebrará la nueva generación de Anahuacas en mayo del 2049, donde se suprimirán los 4 días de exceso de biciesto, y el nuevo ciclo comenzara el 8 de mayo Gregoriano, en el calendario Olmeca el cargador se llamara 3 Águila.

Solo falta explicar que el 30 de Julio es la otra fecha de paso cenital en el paralelo 18, donde se encuentra la capital del Anáhuac, La ciudad Serpiente-Jaguar, esta se cumple con el retorno del sol hacia el sur, después de haber alcanzado el trópico de cáncer el 21 de junio, este segundo paso cenital lo tomaron los mayas para colocar su cargador, en esto difiere el Haab del Xihwitl. Como antes vimos el otro paso cenital en la latitud 18 se realiza el 12 de mayo y pertenece al cargador del Xihwitl. La capital del Anáhuac es a donde todas las culturas mesoamericanas, incluso las que no se encontraban dentro de ese territorio seguramente peregrinaban a pedir favores y orar a sus dioses; por lo menos eso demuestra el calendario Xihwitl-Haab ya que es uno, pero su cargador lo convierte en dos. El antropólogo, Frank Díaz, en su Libro Sagrado Trece refiere, que en algún momento de la historia, la casta sacerdotal Maya probablemente decidio independizarse, por esa razón colocaron su cargador en el segundo paso Cenital. El Doctor, Delfino Álvarez Blanca, opina que esto se decidió desde que los Olmecas idearon el calendario y de esta forma dividieron en dos, el territorio sagrado en que moraban, no para crear desacuerdos entre los pueblos, sino para encomendar a cada región el cuidado y tributo religioso que debían dar a su dios, “el Sol”, cuando transitaba por su territorio.

Un claro ejemplo de esas peregrinaciones religiosas, al río Coatzacoalcos, donde está el centro del Anáhuac, lo confirma la tradición oral y los códices o libros prehispánicos, pues afirman que Ce Acatl Topilzin Quetzalcóatl fue originario de un poblado cerca de Tepoztlán, en el actual estado de Mórelos, al nacer él, su madre, Chimalma, murió y fue criado por sus abuelos, siendo ya joven vivió en Culhuacán (Distrito Federal), en compañía de su padre, Mixcóatl, quien gobernaba esa ciudad. Ce Acatl huyó de Culhuacán porque su padre fue asesinado, llegó al actual Estado de Hidalgo donde construyo la ciudad de Tula y la gobernó a finales del 900 d.C., pero tuvo que salir de Tula, por haber cometido incesto en contra de su hermana, se fue a la ciudad antigua de Cholula (en el estado de Puebla) en donde vivió por un lapso de 10 años, luego partió hacía el Tlillan Tlapallan, la Tierra del Conocimiento, donde se encontraba el río sagrado, el Coatzacoalco, en donde después de incinerarse, se convirtió en la estrella de la mañana: Venus. El mito dice que prometió regresar en el año Uno Caña.

El doctor Delfino Álvarez, defiende la tesis que Ce Acatl Topilzin Quetzalcóatl, peregrinó al río Coatzacoalcos porque en él se encuentra la ciudad Serpiente-Jaguar, capital del Anáhuac. Además nació en Uno caña el día del cargador del Xihwitl que como ya vimos es equivalente al 13 de mayo en del Calendario gregoriano: ese es otro motivo por lo que vino al río Coatzacoalco, palabra que procedente del náhuatl coatlzacoatlco el lugar donde se unen o cruzan las dos serpientes.

“Hace no mucho tiempo, en un lugar llamado Anáhuac, existió un pueblo fascinado por el cielo, que procuró reflejar el movimiento de los astros en su vida diaria. Y para conseguirlo, emprendió una de las más osadas aventuras que haya concebido la mente humana: el calendario de Anáhuac”. Frank Díaz, libro Sagrado Trece.

En conclusión “El Retorno de Quetzalcoatl” representa el eslabón que une la identidad de las culturas de Mesoamérica, y que a través de la creación del gran calendario Olmeca, nos da una perspectiva más amplia sobre los grandes conocimientos astronómicos y calendáricos que legaron a la humanidad.

Nos queda claro que no solo la representación artística y la belleza de sus grandiosos monumentos arquitectónicos son el mayor valor y reconocimiento de lo que hasta ahora se le ha dado a nuestra Cultura nacionalmente, sino por el contrario es una muestra más de la falta del conocimiento de lo que en realidad plasmaron en todas y cada una de las representaciones arquitectónicas de todo el Anáhuac, ya que de ahí parte la precisión matemática del tiempo, creado en el Gran Calendario del Anáhuac.

Por todo esto cabe señalar, el gran compromiso que tenemos los veracruzanos de despertar nuestra conciencia, que por influencia negativa la hemos dejado dormir, hasta el grado de merecer perderla, por consecuencia nuestros valores y nuestra ultrajada identidad; mismos que requieren de elementos positivos, del conocimiento puro ancestral, con el objeto de rescatar la voluntad propia, el concilio consigo mismo, el respeto a nuestras raíces y sobre todo a nuestra historia.