"En Francia la islamofobia reemplaza al antisemitismo", expertos académicos

Varios expertos dicen que los musulmanes están tomando el lugar histórico de la comunidad judía en Francia como chivos expiatorios para los problemas del país.

Merve Berker   |24.10.2020

PARÍS, FRANCIA - 10 DE NOVIEMBRE: Cientos de manifestantes se congregan en las calles de París para protestar contra la islamofobia, cerca a Gare du Nord, en la capital francesa, el 10 de noviembre de 2019. (Mustafa Yalçın - Agencia Anadolu).

    

Ankara

Según varios analistas turcos, el comportamiento islamófobo de Francia mientras lidia con las consecuencias económicas causadas por la nueva pandemia de coronavirus es similar al antisemitismo generalizado que atacó a los judíos al inicio de la Segunda Guerra Mundial.

La identificación del Islam y la imagen musulmana con el terrorismo, especialmente tras los ataques a las Torres Gemelas el 11 de septiembre de 2001, en los EEUU, aumentó la islamofobia en Francia y en todo el mundo.

Otro acontecimiento clave que ayudó a desencadenar el aumento de la islamofobia en Francia fueron los disturbios de 2005, tras la muerte accidental de jóvenes norteafricanos que huyeron de la Policía que realizaba controles de identidad se desencadenó una cadena de protestas en el país que duró tres semanas.

El atentado de enero de 2015 contra la revista satírica Charlie Hedbo en París también avivó la islamofobia en el país. De hecho, precipitó un aumento de los crímenes de odio islamofóbicos en varios países europeos, especialmente en Francia, donde el ataque había matado a 132 personas y luego fue reclamado por el grupo terrorista ISIS/Daesh en noviembre de 2015.

Recientemente, dos mujeres musulmanas fueron apuñaladas cerca de la Torre Eiffel en Francia, mientras que una mujer se quejó a la Policía sobre el comportamiento de su marido, que es católico, por ser un "islamista radical". Estos eventos son considerados por muchos como una manifestación de la percepción negativa del Islam y los musulmanes en el país.

Serhat Ulagli de la Universidad de Marmara en Estambul, así como Ihsan Karli y Zeynep Benan Dondurucu de la Universidad de Kocaeli en el noroeste de Turquía, debatieron un reciente proyecto de ley sobre la lucha contra las ideas "separatistas" preparado por la administración del presidente francés Emmanuel Macron y un intento de cerrar las asociaciones y organizaciones no gubernamentales musulmanas, en medio de la creciente ola de incidentes islamófobos en todo el país.

La mancha negra

En una entrevista con la Agencia Anadolu, Ulagli dijo que la islamofobia, que ha vuelto a estallar en Francia con la quema de una mezquita en Lyon, la expulsión de 150 imanes y el aumento del odio en todo el país, lo que es preocupante.

"La opinión de que las pequeñas minorías radicales y anticuadas que no cumplen ninguna norma del Islam representan toda la geografía islámica es una gran injusticia e ilusión. Es un juicio injusto tratar de establecer tales imágenes en las mentes de las sociedades. Esta representación negativa reproducida por los políticos de hoy no es diferente de la denigración que Hitler hizo de la comunidad judía, haciendo que parezca que ellos fueron responsables de todos los malos acontecimientos que ocurrieron en el país", aseguró el experto en islamofobia.

Ulagli argumentó que la opinión de que "el Islam es la fuente intelectual del desorden en los países desarrollados" en los principales medios de comunicación y en el ámbito político es una manifestación moderna de las ideologías de las Cruzadas y de la Segunda Guerra Mundial del pasado, mezclada con el globalismo.

"Con una población que supera los 7 millones de habitantes, el grupo más numeroso después del cristianismo en Francia son sin duda los musulmanes", dijo, y subrayó que los musulmanes estaban siendo marginados de la vida pública.

Esta hostilidad se manifiesta en Francia tanto hacia su comunidad musulmana doméstica, como hacia los adherentes a la religión en todo el mundo, añadió Ulagli. "Es imperativo que las sociedades musulmanas desarrollen políticas sociales que protejan los derechos personales. De lo contrario, Occidente se verá privado de la rica herencia y el brillante futuro de la creciente cultura oriental. A largo plazo, Francia ocupará su lugar en el escenario de la historia como una mancha negra en la política mundial", señaló.

Crímenes de odio

Ihsan Karli identificó las razones económicas, sociales y culturales de la islamofobia en Francia. "La prohibición del uso de pañuelos de cabeza por parte de las mujeres en el Gobierno en 2003 y la prohibición de usar ropa que cubra completamente el rostro en público por parte del parlamento francés en 2010 aumentaron el conflicto entre las comunidades musulmanas y la identidad nacional francesa. El agresivo estilo informativo de los medios de comunicación de la derecha francesa y las imágenes que utilizan desempeñaron un papel decisivo en la conformación de las percepciones islamofóbicas. Tanto en el ámbito político como en los medios de comunicación, el hecho de que se ataque a los ciudadanos musulmanes como elementos que dañan la seguridad y la integridad del país ha dado lugar a un aumento de los delitos de odio cometidos contra mezquitas y lugares de culto", señaló Karli.

De igual manera, advirtió que los intentos del Gobierno de cerrar asociaciones y grupos musulmanes legales solo porque defienden los derechos de las comunidades musulmanas aumentarán aún más la islamofobia en el país, en lugar de reducir los conflictos, y no frenarían las actividades de los grupos radicales.

La islamofobia reemplaza al antisemitismo

Zeynep Benan Dondurucu subrayó que las medidas adoptadas contra los musulmanes desde el decenio de 2000 eran, en esencia, muy similares al antisemitismo de la Segunda Guerra Mundial. "En lugar de los judíos, esta vez los musulmanes son vistos como responsables de los problemas económicos del país y como elementos que dañan la identidad nacional francesa. Esta ideología pretende restringir la libertad de culto y de reunión de las comunidades islámicas.

"Esto demuestra que cuando se firmó la Declaración Universal de Derechos Humanos y los Derechos del Ciudadano en 1789, los derechos básicos de vida, libertad, seguridad y resistencia a la opresión defendidos por el país sólo se aplicaban a sus ciudadanos con identidad francesa", agregó.

También comparó los recientes incidentes islamófobos en Francia con los sucesos anteriores a la Segunda Guerra Mundial, diciendo: "En 2020, mientras Francia trata de hacer frente a los problemas económicos al igual que el mundo entero debido a las repercusiones de la epidemia de COVID-19, la agitación está causando la marginación de los ciudadanos que no coinciden con la identidad ideológica francesa por motivos de raza o religión, como antes de la Segunda Guerra Mundial".

*José Ricardo Báez G. contribuyó con la redacción de este análisis.