¡Oh Creyentes! Debemos comprender de qué se trataba verdaderamente Canakkal

 ¡Oh Creyentes! Debemos comprender de qué se trataba verdaderamente Canakkale. Canakkale fue la última defensa del Islam en contra de los enemigos cuyo único objetivo era destruir el Khilafat y destruir el Islam. Y es por eso que Canakkale es la Segunda Badr. Porque en Badr, el objetivo del Quraysh era erradicar el Islam de este mundo. Es por eso que el Santo Profeta (AS) hizo el Dua en Badr diciendo “Ya Allah, cumple para mí lo que me has prometido. Ya Allah, haz que se realice lo que me has prometido. Ya Allah, si este pequeño grupo de musulmanes es destruido, no serás adorado en la tierra.” Y esa era la misma condición en Canakkale.

Y un evento así, además de Badr y Canakkale, no sucedió en la historia del Islam. Incluso cuando los mongoles llegaron a Bagdad, no pretendían destruir por completo el Islam. Incluso cuando los cruzados llegaron a Quds, su objetivo no era destruir por completo el Islam. Pero cuando los incrédulos trajeron sus enormes barcos al Estrecho de los Dardanelos, tenían un solo objetivo: ir a Istanbul y destruir el Khilafat.

¿Y quién se puso de pie para proteger al Khalifah? Con el mundo musulmán que se extendía desde África hasta Indonesia, ¿quién acudió a toda prisa en Auxilio del Khilafat? ¿Quién vino a Honrar su Beyat a la Sombra de Allah sobre la Tierra? Muy pocos. Muy pocos. Y fueron en su mayoría turcos. Hubo algunos de otras naciones que lo dejaron todo y corrieron. Corrieron. Algunos sin tener zapatos, sin verdaderas armas, sin comida, corrieron y dijeron “que nuestras vidas sean sacrificadas por el Khilafat y el Khalifatullah.”

Los turcos seculares de hoy están diciendo que ellos no pelearon por Allah, que pelearon por su propia patria. Esa es una mentira en contra de los Leones de Canakkale y de su memoria. Miren sus memorias, miren sus diarios, miren sus cuadernos. Miren lo que escribieron. Miren lo que esos jóvenes estuvieron escribiendo. No estuvieron escribiendo “Turkiye, Turkiye.” Estuvieron escribiendo “Ya Allah, Ya Muhammad, Ya Abu Bakr, Ya Umar, Ya Osman, Ya Ali, Ya Hasan, Ya Huseyin.” Estuvieron haciendo dibujos de la Espada de Hz. Ali en sus cuadernos. Estuvieron escribiendo el Ayat “La Ayuda de Allah y una cercana Victoria, y dale buenas nuevas a los creyentes, Ya Muhammad.” Esos leones lucharon por el Islam. No lucharon por su patria.

Y si no fuera por ellos, hoy no tendríamos Islam. Esta no es una exageración, esto es real. Si los no-musulmanes hubieran entrado en Istanbul y hubieran ocupado la oficina del Khilafat, no tendríamos nuestra fe en Allah y en Su Profeta. No tendríamos la libertad para decir “somos musulmanes”. Es gracias a ellos que todavía tenemos este honor. Nuestra fe es una Sadaqa de ellos. Nuestra religión es una flor que ha brotado de su sangre.

- Sheykh Lokman Efendi Hz.