Ex mandos militares de Israel discuten posible colapso del régimen
Al menos un centenar de ex altos mandos militare israelíes discutieron las vías de responder a un posible colapso del régimen en medio de la profunda crisis interna.
La polémica reforma del sistema judicial, impulsada por el actual gabinete extremista del primer ministro, Benjamín Netanyahu, lleva desatando protestas por más de 30 semanas consecutivas y salta las alarmas sobre el eventual colapso de la entidad sionista.
Ante tal circunstancia, unos 100 ex altos responsables del ejército, del servicio de espionaje (el Mossad), del servicio de seguridad interna (Shin Bet) y de la policía de Israel asistieron a una reunión de emergencia para discutir el peor escenario, es decir una situación en la que la galopante crisis política y constitucional ponga en jaque la supervivencia del régimen israelí, según ha informado este sábado la cadena Al Jazeera, citando al diario israelí Yedioth Ahronoth.
El informe detalla que los participantes en la conferencia abordaron métodos de trabajo para proteger a la corte suprema, el ejército y la policía “en caso de colapso” del régimen.
Los participantes discutieron planes de acción para defender a la corte suprema, el ejército y la policía “en situaciones de crisis” dentro de la entidad israelí, particularmente si la corte suprema anula las decisiones del gabinete, “lo que resulta en una crisis constitucional sin precedentes en Israel”, agregó el informe.
El supremo israelí sostuvo largas deliberaciones el jueves con respecto a las peticiones que piden revocar una controvertida ley —aprobada recientemente por el parlamento— que restringe la destitución del primer ministro. La corte cerró las discusiones, sin tomar ninguna decisión al respecto.
Los oponentes consideran la reforma como un golpe judicial, y argumentan que está diseñada para brindar protección a Netanyahu, quien está siendo acusado de soborno, abuso de confianza y fraude.
En general, la reforma ha provocado una fuerte polarización entre los israelíes y ha puesto al desnudo las profundas divisiones internas que aceleran el colapso del régimen.
El profundo cisma se ha extendido además al ejército israelí, donde cientos de oficiales y reservistas de distintas ramas de fuerzas armadas han dejado de servir en señal de protesta, lo que ha creado la “peor crisis” en Israel desde su creación y ha puesto a este régimen en camino de una implosión y una “guerra civil”.
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