(Reuters) -
Si estás al tanto de las noticias sobre ISIS (que ahora se hace llamar Estado Islámico [EI]), tal vez pienses que por error hiciste clic en un relato histórico sobre unos bárbaros del milenio pasado.
En cuestión de meses, el grupo tomó territorios tanto en Iraq como en Siria, declaró un califato islámico y en el ínter celebró su impactante masacre.
"No veo que el resto del mundo esté poniendo atención", dijo un miembro de la minoría yazidí a la revista estadounidense
The New Yorker. "En un día mataron a más de 2,000 yazidíes en Sinjar y todo el mundo dice: 'Salven a Gaza, salven a Gaza'".
En Siria, el grupo colocó en palos las cabezas de algunas de sus víctimas. En uno de los videos más recientes sobre las crueldades, se ve a un hombre cristiano al que obligan a arrodillarse, rodeado de militantes enmascarados que en el video se identifican como miembros de ISIS. Obligan al hombre, a punta de pistola, a convertirse al islam. Luego lo decapitan.
ISIS ha atacado a los miembros de varios de los grupos minoritarios de la región: monjas cristianas, turcomanos y chabaquíes, de acuerdo con Human Rights Watch.
Francia convocó a una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU el jueves 7 de agosto. El canciller de Francia, Laurent Fabius, dijo que su país "está sumamente preocupado por los avances recientes de ISIS en el norte de Iraq y por
la toma de Qaraqosh, la mayor ciudad cristiana de Iraq, y los actos horribles de violencia que se están cometiendo".
A principios de esta semana, los combatientes de ISIS trataron de tomar el control de la mayor presa hidroeléctrica de Iraq, pero las fuerzas kurdas los repelieron, señaló el director de la presa.
"Si el 'EI' logra consolidar su territorio y conservar su legitimidad, entonces se considerará que es viable una yihad ofensiva contra todos los demás países", escribió Jonathan Russell de Quilliam, un grupo de estudios que se creó para combatir el extremismo.
El papa encabeza un llamado a la acción
Mientras surgen historias de terror desde las zonas que ISIS controla —incluida Mosul, la mayor ciudad de Iraq— un coro creciente pide al mundo que actúe. La voz más prominente es la del papa Francisco.
"El santo padre está atento y muy preocupado por las dramáticas noticias que llegan desde el norte de Iraq, relativas a las poblaciones indefensas", señaló el Vaticano en un comunicado el jueves. "Las comunidades cristianas se han visto particularmente afectadas.
La gente huye de sus hogares a causa de la violencia que cunde y abruma a la región en estos días".
"Queridos hermanos y hermanas tan perseguidos, sé lo mucho que sufren y sé que les quitaron todo. Estoy con ustedes en la fe y con Él que ha conquistado al mal", dijo el papa recientemente durante el Ángelus.
"Su Santidad también hace un llamado urgente a la comunidad internacional para que trabajen para poner fin a la crisis humana y proteger a quienes se han visto afectados o amenazados por la violencia; para asegurar la ayuda necesaria, especialmente la más urgente, para tanta gente sin hogar cuyo destino depende exclusivamente de la solidaridad de los demás", señaló el Vaticano.
"Están exterminando a una religión entera de la faz de la Tierra", dijo Vian Dakhil, miembro de la comunidad yazidí, en un llamado al parlamento iraquí. Dijo que era un "genocidio".
Los yazidíes son una de las minorías más pequeñas de Iraq y descienden de los kurdos; se considera que su religión es una secta preislámica que se deriva del cristianismo, el judaísmo y el zoroastrismo.
Analistas: Occidente debe armar a los kurdos
"El mundo enfrenta ahora dos retos urgentes: evitar el genocidio de los yazidíes e impedir que ISIS siga conquistando grandes porciones de Medio Oriente", escribió la columnista de asuntos mundiales de CNN, Frida Ghitis.
"Si se bombardean las posiciones de ISIS se podría salvar a los yazidíes, pero es esencial apoyar a los kurdos para tener éxito en ambas misiones".
El ejército kurdo iraquí, conocido como Peshmerga, ha combatido a ISIS pero los superan en armas en parte porque el Ejército iraquí abandonó sus armas "y huyó cuando ISIS avanzó desde Siria y tomó Mosul", explica Ghitis.
Estados Unidos se ha mostrado renuente a hacerlo porque le preocupa que los kurdos traten de separarse de Iraq y formar un Estado independiente mientras Washington trata de impulsar un gobierno central en Bagdad.
"Si Estados Unidos decidiera ayudar a los kurdos, no habría garantías de que los kurdos no usen esas armas después para satisfacer sus propios intereses", escribió Dexter Filkins en la revista The New Yorker. "Pero ¿qué otra opción hay?".
Filkins señaló que Iraq emprendió ataques aéreos con el fin de ayudar a los kurdos, pero "el Ejército iraquí ha demostrado que es sumamente ineficiente en el combate a ISIS", afirmó.
La Fuerza Aérea iraquí atacó el 6 de agosto un edificio en Mosul que se creía que ISIS usaba; murieron 76 personas, según informó un funcionario iraquí a CNN. Sin embargo, las autoridades locales señalaron que docenas de las víctimas eran civiles que se habían opuesto al Estado Islámico.
Masrour Barzani, jefe de los servicios kurdos de seguridad e inteligencia, llamó a Estados Unidos a brindar asistencia militar directa en entrevista con el diario estadounidense The Washington Post.
"Tenemos que ayudar a nuestros aliados a defenderse", dijo David Schenker, director del Programa de Políticas Árabes del Instituto Washington, otro de los personajes que está a favor de que se arme a los kurdos.
"La otra parte de la ecuación es trabajar con la oposición moderada de Siria y proporcionarles capacidades sólidas para combatir al régimen y a ISIS".
ISIS podría provocar su caída
Sin embargo, Occidente tal vez tenga razones para no tomar medidas inmediatas, explicó Fahad Nazer, analista de terrorismo de la empresa JTG Inc.
"A diferencia de otras ramas de al Qaeda, parece que ISIS no está ansiosa por atacar a Occidente. Tiene demasiado que perder", escribió para CNN.
"Aunque Occidente nunca se ha sentido cómodo con la presencia de Hamas en Gaza o de Hezbolá en Líbano, en gran medida ha dejado que los países de Medio Oriente lidien con estas organizaciones militantes islamistas", escribió.
Además, "a Occidente tal vez le consuele que ISIS tiene muchos enemigos en los mundos musulmán y árabe", escribió. Como hay tantos grupos perseguidos y aterrorizados, una "ideología tan violenta y la brutalidad reducen las probabilidades de que esto persista a largo plazo".
Occidente podría trabajar con la población de la región para defenderse del terrorismo como lo hizo con los Consejos Despertar de Iraq, quienes se pusieron en contra de al Qaeda en 2006, explica Schenker.
También cabe la posibilidad de que al Qaeda e ISIS se enfrenten tan intensamente que se provoquen muchas bajas y se debiliten el uno al otro. Pero los riesgos de la inacción de Occidente en el futuro inmediato podrían ser muy altos, dice Schenker.
"ISIS está decidido a consolidar sus triunfos —dice—, lo que dificultará mucho más combatirlos a largo plazo".
