¿CONTROL Y MANIPULACIÓN DE LA OPINIÓN PÚBLICA?
Noam Chomsky, uno de los más agudos críticos de la política exterior de los Estados Unidos, estudia los medios masivos de comunicación como factor de control, manipulación y dominación de la opinión pública. Chomsky, focaliza su análisis crítico en una problemática central para la teoría política contemporánea: los mecanismos utilizados por los medios de comunicación masivos-radio, televisión, prensa- para construir un consenso siempre a favor de la política oficial del sistema. Chomsky analizando la sociedad norteamericana, plantea el criterio de que no es posible dominar a la población estadounidense ni al resto del mundo únicamente a través de la fuerza -invasiones, represiones, torturas, dictaduras, etc. -Este ejercicio material de la fuerza debe ir acompañado por un control del pensamiento, una construcción del consenso, una paciente pero ininterrumpida elaboración de la hegemonía.
Si nosotros tomamos el ejemplo de Chomsky y nos planteamos analizar los medios de comunicación existentes en nuestra sociedad peruana y ayacuchana desde un punto de vista crítico, diríamos, que las cosas están replanteándose para cumplir mejor tales objetivos: Para el control, la manipulación y dominación de la opinión pública. Un ejemplo de ello podría ser la “Revista Con Sentido” dirigido por Carlos Infante, que apenas de su reaparición, cuenta ya con el auspicio del Gobierno Regional de Ayacucho, y sus páginas, cubriendo prácticamente las actividades del presidente regional Wilfredo Oscorima. La fama de “revista de izquierda”, quedará en el cliché; pero le servirá probablemente, para lavar su imagen alicaída después de su paso por el Gobierno Regional dirigida por Wilfredo Oscorima.
Pero esto no queda acá. Los que también están rápidamente queriendo “limpiar su imagen” frente a la población, ahora como los “neo-fiscalizadores” –a través de su programa dominical-son Íber Maraví y Jans Cavero. Nuevo o “neo-fiscalizadores” de un Gobierno Regional que ellos mismos ayudaron a llegar al poder. A mi modo de ver, las cosas que se hacen en Ayacucho con la mano y se grita a voz en cuello, se borra con el codo como si nada pasara. Es decir el ¡olvido! y ¡borrón y cuenta nueva!, podría volverse de acá a un tiempo práctica poblana sin ningún tipo de censura. La apelación, al control, la manipulación y dominio de la opinión pública- para “limpiar sus imágenes”- probablemente sea su constante de ahora en adelante, pues no les queda otra.
Un ejemplo de esta tergiversación interesada, que Chomsky ve como “un sistema casi perfecto de doble pensamiento y que emplea determinados criterios sólo cuando conviene”; se puede ver en las elecciones en nuestro país y región, donde usualmente se manipulan símbolos para dar una imagen positiva y las palabras “democracia” o “paz” son relativizadas o meramente distorsionadas. Todo esto con lleva al silenciamiento y frecuentemente, al olvido de toda disidencia; un hecho que tiene relaciones directas con la idea de construcción de la memoria y la cultura. ¿Qué dice usted señor lector? Es así o no.
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