Tanto Donald Trump y Hillary Clinton lamen las botas de los soldados israelíes

Tanto Donald Trump y Hillary Clinton se lame las botas de los soldados israelíes por Uri Avnery Al-Jazeera, CCUN ​​2 de agosto, el año 2016

El hombre de color naranja

Aqui estamos. Cualquiera de Donald Trump o Hillary Clinton será nuestro próximo presidente. "Nuestro"? No soy un ciudadano de los EE.UU., y no tienen ningún deseo de ser uno. Pero vivir en un mundo en el que los EE.UU. es la única superpotencia, en el que cada decisión del gobierno de Estados Unidos tiene un impacto en la vida de cada ser humano. PARA Yo como ciudadano de Israel, este impacto es mucho mayor que para la mayoría y mucho más inmediato. Acabo de ver una caricatura que muestra tanto Trump y Hillary arrastrándose por el suelo y lamer las botas de un soldado israelí . Esto no es demasiado exagerado. Ambos candidatos afirman estar firme partidarios de "Israel". Pero ¿qué significa eso? ¿Son compatibles con todos los sectores de la sociedad israelí? Por supuesto que no. Ellos apoyan una cierta parte de Israel:. El gobierno ultraderechista de Binyamin Netanyahu, que es apoyado por los multimillonarios judíos americanos que contribuyen a sus arcas Apoyo Netanyahu y ​​su aun más socios de la coalición de derecha significa actuar contra mí ya millones de israelíes que se puede ver que Netanyahu está llevando a nuestro estado de desastre. sin embargo, no tengo derecho a voto. Es un caso claro de "representación", impuesta a mí y algunos miles de millones de otros seres humanos. Sea como fuere, tengo un claro interés en esta elección. Así que quiero al menos para expresar mi opinión. Desde el comienzo, escribí que Donald Trump me recordaba en algunos aspectos de Adolf Hitler. Ahora, después de todas las primarias y convenciones, ya que la carrera asume su forma final, me temo que debo repetir ese terrible evaluación. Por supuesto, hay enormes diferencias. El hombre tiene un aspecto diferente. Él tiene el pelo de color naranja. Su lenguaje corporal es diferente, y también lo es su forma de hablar. Los diferentes tiempos. Diferentes paises. Diferentes circunstancias. Y, en primer lugar, diferentes medios de comunicación. Hitler era un producto de la radio. Era su voz, un instrumento único, que conquistó a las masas alemanas. Me han dicho que los jóvenes alemanes de hoy en día se echaron a reír cuando ven viejos clips de los discursos de Hitler. Trump es una creación de la era de la televisión. Él domina la pequeña pantalla. Venció a todos sus rivales en la televisión. Le ganará fácilmente Hillary en la televisión. Si la batalla se libró sólo en la televisión, ya se habría decidido para siempre. Existe la similitud entre Trump y Hitler en un nivel diferente. En el centro de toda la campaña de Trump se alza una palabra, de hecho una carta: "I". No hay un "nosotros". Ninguna ideología normal. Ningún programa real. Se trata de "I", sobre Trump. Trump vendrá. Trump se solucionará todo. Esa fue la esencia del hitlerismo, también. El hombre no tenía un programa real. (Sí, había algo que se llama "los 24", elaborado por los ideólogos del partido, pero Hitler no les hizo caso por completo una vez exclamó con desesperación: ".! Me gustaría que nunca había oído hablar de ellos") Este fue también el caso de la el hombre que inventó el fascismo: Mussolini. El dictador italiano, profesor de Hitler en muchos aspectos, no conocía la palabra "que" tampoco. El primero de los "Diez Mandamientos" del fascismo fue: "Mussolini siempre tiene la razón". Así que con Trump. La centralidad absoluta del líder es el sello distintivo del fascismo. El programa de Trump es Trump. Siendo esto así, todas las declaraciones de Trump y declaraciones de política son totalmente sin importancia. Expertos que ellos analizan, que los convierten una y otra vez, que buscan significados ocultos, sólo están perdiendo su tiempo. No hay ningún significado real, ya sea abierta o escondida. Las declaraciones se hacen en el calor del momento, ya que se adaptan a Trump en ese momento.Ellos se olvidan al siguiente, a veces para ser reemplazado por el contrario. Son un instrumento, nada más. Es por esto que es tan fácil de coger Trump decir una mentira. He visto las listas de decenas de ellos, uno más flagrante que el anterior. También en este caso tenemos el ejemplo de Adolf Hitler. En su libro "Mein Kampf" ( "Mi lucha") habla de esto abiertamente. El libro en sí es bastante aburrida, el producto de una mente de tercera categoría, sino que incluye varios capítulos sobre "propaganda", que son fascinantes. (Muchas personas de crédito Joseph Goebbels con la invención de la propaganda nazi. Pero el "doctorcito" fue sólo un discípulo del propio Führer.) Como un soldado de primera línea a lo largo de los cuatro años de la Primera Guerra Mundial (sin embargo, nunca se levanta sobre el rango de cabo interino) Hitler fue inmensamente impresionado por el esfuerzo de propaganda británica dirigida a las líneas alemanas. Hitler admiraba las consignas británicas, que para él eran una sarta de mentiras. Una de sus conclusiones fue que cuanto más grande es la mentira, más grandes sus posibilidades de ser creído, ya que una persona simple no puede imaginar que nadie se atrevería a mentir tanto. (En realidad, Hitler enormemente sobreestimado la eficacia de la propaganda británica. Empezó a sólo tendrá efecto cuando las líneas alemanas ya se desmoronaban.) no parece haber ninguna mentira demasiado grande para Donald Trump. Sus seguidores no les importa. La verdad no significa nada para ellos. Trump triunfa sobre la verdad en todo momento. Hillary Clinton es un buen político, ordinaria.Su atributo más notable es que ella es una mujer. Eso, por sí mismo, es muy importante. Aunque Golda Meir me enseñó que una mujer puede ser tan catastrófico como un hombre. Puede, con la garantía de feria, imaginar lo que una presidencia, Hillary Clinton, se vería así. Ella es fiable, predecible. Más de lo mismo, pero sin el encanto de Barack (y Michelle!) Obama. Nadie puede predecir una presidencia Trump. Cada predicción es un salto en la oscuridad. Una cosa parece real: su admiración por Vladimir Putin. A pesar de que es todo lo contrario de la fría, calculadora, audaz pero prudente ex miembro del aparato de la KGB, Trump parece admirarlo. No hay mucha evidencia de que la admiración es mutua, pero parece cierto que los sucesores de hoy de la KGB están interfiriendo activamente en las elecciones estadounidenses, haciendo todo lo posible para ayudar a Trump y sabotear Hillary. Trump ya ha declarado que no vendría automáticamente a la ayuda de Letonia, que [si] este antiguo país de la OTAN Soviética y ahora fueron atacados por Rusia. Letonia ha pagado por su defensa? ( "Señor Presidente, el ejército ruso solo ha invadido Letonia Vamos a enviar a nuestras tropas en!?" - "Espera, espera Primero verifique si los malditos letones han pagado sus cuotas a la OTAN!")   un acercamiento entre Estados Unidos y Rusia puede ser una buena cosa. La presente hostilidad visceral americana hacia todo lo ruso es un remanente de la Guerra Fría y malo para el mundo en general. No veo por qué los dos poderes no pueden cooperar en muchos campos. Hacia la tercera potencia, China, la actitud Trump es lo opuesto.Él quiere anular los acuerdos comerciales y llevar a los puestos de trabajo de vuelta a casa. Incluso yo, un no-economista, puedo ver que esto no tiene sentido. Y así sucesivamente. Todo es como ver a un hombre a punto de saltar desde el techo por pura curiosidad.   Los alemanes que votaron en abril de 1933 por Adolf Hitler y su partido no soñó sobre la Segunda Guerra Mundial, aunque Hitler ya estaba resuelto a la conquista de Europa del Este y abrirlo para la colonización alemana. Que fueron hipnotizados por la personalidad de Hitler. Y - a diferencia del Presidente de los EE.UU. - el canciller del Reich alemán no era el líder más importante del mundo. No me gusta la elección del mal menor. En veinte campañas electorales israelíes (excepto los cuatro en los que yo mismo era un candidato) He votado a favor de las partes que no me gusta mucho y para los candidatos que no confiaba en nada. Pero esto es un hecho de la vida. Si no hay un candidato que puede arraigar para, se toma el único que puede causar el daño mínimo. En 1933 mi padre votó por un partido conservador alemán, porque creía que eran los únicos que tenían la oportunidad de detener a los nazis. Como Pierre Mendes-France dijo una vez: "vivir es elegir". Quiero decir a todos mis amigos americanos: Ir a votar por Hillary, si le gusta o no. Gusto en realidad no entran en ella. No se quede en casa. No significa que votan por Trump votación. Una vieja broma judía habla de un rico Judio, que fue detestado por todos en la comunidad.Cuando murió, nadie estaba preparado para hacer el discurso fúnebre, en el que se permite por la costumbre sólo para decir cosas positivas. Por fin una persona se ofreció voluntariamente. "Todos sabemos que el querido fallecido era una persona horrible," dijo. "Sin embargo, en comparación con su hijo que era un ángel!" Bueno, Hillary Clinton no es horrible. Ella es un candidato aceptable. Pero en comparación con Donald Trump, ella es un ángel.