Reflexiones sobre la revelación

Reflexiones sobre la revelación De Adán –as- a Muhammad –saws- 08/10/2012 - Autor: Iahia ibn Said Al Andalusi - Fuente: Webislam espiritualidad islam pensamiento sufismo 0 El descenso de la revelaciónNo debería existir la menor duda al declarar que la propia existencia de Dios (Al-Lah en árabe) implica la factibilidad de una comunicación sagrada entre Allah swt y las personas, en cuanto estas últimas son espíritus alojados en cuerpos temporalmente, y destinados, tal y como afirma el Corán, a retornar a Allah swt. A esta comunicación Divina, la llamamos revelación. Algunas personas de pocas luces, dudan que en cada momento del paulatino descenso de la revelación, esta fuera el Islam en toda su perfección. Esta duda contradice de plano el Corán, donde las revelaciones anteriores son rememoradas frecuentemente. Sin alternativa posible, cuando Jesús, Isa –as-, predicó el Islam, tal y como antes lo hicieron Ibrahim y Musa –as- . Luego de la muerte de estos Profetas, sus revelaciones se vieron rápidamente coptadas por castas sacerdotales deseosas de constituirse en depositarios de la revelación, en sus conservadores e interpretes, la interpretación de la revelación es tal vez una de las cuestiones más espinosas a las que se puede enfrentar un espíritu. Nunca se debe confundir la adhesión al principio tradicional, a la pureza de la revelación, con un conservadurismo formalista que conduce a la fosilificación y el ritualismo. Este conservadurismo mal planteado, más la suma de intereses que poco tienen que ver con la realidad, es decir con lo espiritual, sino más bien con lo aparente, que es el mundo sensible, fue en definitiva lo que condujo a los judíos a negar a Jesús y caer en el error, lo mismo, con la adición de una importante y sustancial deformación de lo revelado en cuanto a la figura del propio Profeta Jesús (al menos entre los trinitarios) dejó a los cristianos privados del Sello de los Profetas y por ende de la revelación en su culminación. Realidad aparente y realidad esencial En verdad la realidad esencial, no puede ser captada por los sentidos externos solamente, pero estos juegan un rol importante en la comprensión y la inteligencia humanas. Sin embargo el mayor desafío al que observamos se ha enfrentado el espíritu es la interpretación ritualista de lo revelado, lógicamente, cada Profeta habló a los que los escucharon, en términos comprensibles para aquellas gentes. Pretender hoy hacer una lectura literal de esas palabras y aplicarlas con puntos y comas sin considerar sus objetivos reales, esotéricos y metafísicos, es la más abyecta herejía. Sin embargo, la interpretación pseudo-literalista es hoy algo bastante de moda, es la base de cada secta modernista, esta simplonería en la lectura del texto sagrado, es muy acorde a los valores pervertidos y simplones de la modernidad, por ende, no debe extrañar que por un lado las sectas heréticas modernistas realicen estas imterpretaciones y que por el otro se auto-asignen ser los más eminentes representantes de la ortodoxia.