Israel prepara nuevas medidas para fortalecer a los asentamientos: más armas y quita de beneficios a palestinos
TEL AVIV.– En medio del temor a una escalada de la ola de violencia y de los llamados a la moderación de la comunidad internacional, el gobierno de Israel preparaba hoy una batería de medidas para fortalecer a los asentamientos en territorios disputados y castigar a futuros agresores luego de dos ataques palestinos contra israelíes en Jerusalén.
Funcionarios israelíes acordonaron la casa de la familia en Jerusalén del atacante palestino que mató a siete personas frente a una sinagoga en las afueras de la ciudad, dijo la policía, después de que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, prometiera “una respuesta rápida”.
Al frente de un gobierno ultraderechista y presionado por sus socios de coalición más radicalizados, Netanyahu anunció que su gabinete buscaría sanciones contra las familias de los agresores y que presentaría medidas esta semana para “fortalecer los asentamientos”, cuya expansión es rechazada por la comunidad internacional.
La decisión se tomó antes de la visita del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, que llegó hoy a Egipto para iniciar una breve gira por Oriente Medio, que incluirá una etapa en Jerusalén y otra en Ramala. La administración Biden se opone a la construcción de asentamientos israelíes en Cisjordania y Jerusalén Este, territorios reclamados por los palestinos para un futuro estado.
La oficina del premier dijo que el gabinete de seguridad acordó sellar la casa del atacante de la sinagoga para su demolición.
Los ministros acordaron que la casa de otro palestino, uno de 13 años, que ayer hirió a dos israelíes en otro ataque a tiros en Jerusalén Este, también será precintada, dijo el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, tras la reunión de gabinete.
El chico palestino fue herido de un tiro y hospitalizado. Gvir dijo que los ministros del nuevo gobierno de Israel, que es el más de derecha de su historia, aprobaron modificar el criterio para precintar y derribar las casas de la familia de atacantes palestinos incluso cuando no haya víctimas mortales en el atentado.
El precintado de la vivienda de un atacante palestino suele ser el paso previo a su demolición, aunque es un proceso que suele tardar varios meses por los trabajos previos y los recursos de su familia, que pueden llegar hasta el Tribunal Supremo israelí.
Palestina, la ONU y organizaciones internacionales han condenado esta práctica de larga data de Israel de demoler las casas familiares de palestinos autores de ataques contra israelíes, a la que califican de “castigo colectivo”.
El gabinete de Netanyahu también dijo que planea una serie de otras medidas punitivas, incluida la cancelación de los beneficios de la seguridad social para las familias de los atacantes, y que tomaría medidas para “fortalecer los asentamientos” esta semana como parte de la respuesta del gobierno a los ataques del fin de semana.
Netanyahu dijo que el fortalecimiento de los asentamientos en Cisjordania ocupada tenía como objetivo “enviar un mensaje a los terroristas que buscan desarraigarnos de nuestra tierra de que estamos aquí para quedarnos”.
El gabinete también evaluaba facilitar que los israelíes obtengan armas e intensificar los esfuerzos para recolectar armamento ilegal. Entre las iniciativas, el gobierno evalúa relajar las restricciones para acceder a la compra y porte de armas.
El Ministerio de Salud palestino dijo que un joven de 18 años murió este domingo de heridas infligidas por un guardia de seguridad que le disparó cerca de una colonia israelí en Cisjordania. El Ejército israelí dijo que el guardia identificó a un palestino armado con una pistola a la entrada de la colonia y le disparó.
En tanto, el Ministerio de Salud palestino anunció además la muerte de un palestino de 24 años que había sido herido durante una incursión militar israelí que dejó otros nueve palestinos muertos la semana pasada en el campamento de refugiados de Jenin, en el norte de Cisjordania. En total, 34 palestinos murieron este mes por disparos de fuerzas de seguridad israelíes.
Agencias AFP y AP
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