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sábado, 1 de junio de 2024

Palestina. Llamamiento a la Acción: Coalición Internacional para detener el genocidio en Palestina, denuncia los brutales ataques de “Israel” contra Rafah

 

Palestina. Llamamiento a la Acción: Coalición Internacional para detener el genocidio en Palestina, denuncia los brutales ataques de “Israel” contra Rafah

Resumen Medio Oriente, 31 de mayo de 2024

Llamamiento a los movimientos sociales de todo el mundo para que se unan al
movimiento Universidad Popular para Gaza y exijan a las Naciones Unidas y a la
Autoridad Palestina que declaren inmediatamente Gaza zona afectada por la
hambruna.
La Coalición Internacional para Detener el Genocidio en Palestina (ICSGP) aborrece la
brutal matanza perpetrada en los últimos días por las Fuerzas de Ocupación israelíes
contra palestinos desplazados que vivían en tiendas de campaña en Rafah. Se trata de
una violación flagrante de la orden dictada el 24 de mayo por la Corte Internacional de
Justicia, a petición de Sudáfrica, de que Israel cesara sus operaciones en ese lugar.
Tras casi ocho meses de ataques genocidas, incluida una hambruna inducida, estas
masacres no dejan lugar a dudas sobre la intención de Israel de aniquilar a la población
de Gaza, incluso cuando ha intensificado los ataques genocidas en Cisjordania.
El ICSGP hace un llamamiento a los movimientos sociales, sindicatos, organizaciones
de derechos humanos y de justicia de todo el mundo para que exijan en los términos
más enérgicos posibles a sus respectivos Estados y a las instituciones internacionales
que actúen de inmediato para hacer cumplir la orden de la Corte Mundial y poner fin al
genocidio en Palestina.

En particular, el ICSGP pide a los movimientos de todo el mundo que se unan a
nuestras organizaciones miembros palestinas para:

  1. Exigira las Naciones Unidas y la Autoridad Palestina que declaren
    inmediatamente a Gaza zona asolada por la hambruna debido a la inanición
    intencionada, la contaminación ambiental y la propagación de enfermedades.
    Pulse aquí para firmar;
  2. Solidarizarse con los organizadores universitarios, cuyos líderes han sido
    brutalizados y criminalizados por las administraciones universitarias sionistas y
    sus cómplices policiales militarizados.

El ICSGP aplaude los tremendos éxitos de los organizadores universitarios de todo el
mundo para detener el genocidio en curso. Entre ellos se incluyen los casos de
estudiantes que han conseguido que las universidades de Estados Unidos y de muchos
otros países exijan una mayor transparencia fiscal y estudien la posibilidad de
desinvertir en Israel, y en algunos casos han logrado un compromiso total de
desinversión.

“Los estudiantes se han guiado históricamente por valores morales que los
gobernantes olvidan a menudo por matices políticos a corto plazo; el movimiento estudiantil representa hoy la brújula moral de las masas populares”, declaró
UbaiAboudi, director del Centro Bisan de Investigación y Desarrollo -una organización
miembro del ICSGP-, subrayando además que los movimientos populares deben estar
ahora junto a los estudiantes, tanto dentro como fuera del campus, en su apoyo a
Palestina.

Estudiantes de todo el mundo se han apresurado a adoptar la táctica de ocupar sus
campus en solidaridad con Palestina, siguiendo el ejemplo de sus compañeros a escala
internacional y en respuesta al llamamiento del movimiento estudiantil palestino en la
Franja de Gaza, a pesar de los riesgos. Kevin Bueno, estudiante de la Universidade
Estadual Paulista “Júlio de MesquitaFilho” de Río Claro (Brasil) y activista del Comitê
contra o genocídio do povo palestino de Río Claro, organización miembro del ICSGP,
destacó la importancia de las conexiones del movimiento mundial.

“La administración de nuestra universidad es muy sionista, así que cuando los
estudiantes nos organizamos en apoyo del derecho palestino a la autodeterminación,
hemos sido censurados y la administración nos ha acusado de ser antisemitas y de
apoyar el terrorismo. Es un verdadero reto construir la solidaridad con Palestina en
Brasil porque el sionismo está muy potente aquí, incluso entre la izquierda. Pero
seguimos organizándonos en la universidad todos los días, y estamos creciendo. La
fuerza del movimiento estudiantil mundial nos ha inspirado y nos ha dado la motivación
para seguir organizándonos a pesar de los obstáculos, y el apoyo de los movimientos
locales y nacionales aquí en Brasil también ha sido fundamental para nuestra
capacidad de resistir los ataques sionistas y exigir el fin del genocidio en curso.”

Los organizadores estudiantiles de Estados Unidos y de todo el mundo también han
insistido en la necesidad de derribar las barreras a la organización que la torre de marfil
intenta imponerles para aislar y criminalizar el movimiento. Cuando los mismos
administradores universitarios y funcionarios públicos que presumensus esfuerzos de
“integración con la comunidad” desde la educación superior acusan a los activistas
universitarios de albergar “infiltrados externos” en los espacios públicos universitarios,
lo hacen en un esfuerzo por deslegitimar el amplio movimiento de solidaridad
universitaria, y como excusa para llamar a la policía militarizada para brutalizar a los
activistas.

Marie Adele Grosso, estudiante de tercer curso de Sociología y Derechos Humanos
dela escuela de Barnard (parte de la universidad de Columbia, en Nueva York), afirma:
“Rechazamos la falsa dicotomía de estudiante frente a forastero en nuestra lucha
colectiva por la liberación de Palestina, que es inextricable de nuestras luchas por la
liberación aquí en Estados Unidos y en todo el mundo. Las comunidades que rodean a
las universidades forman parte del entorno universitario y la universidad desempeña un
papel central en las vidas de los miembros de la comunidad. Esto es especialmente
cierto en el caso de instituciones como la Universidad de Columbia, que es la mayor
terrateniente de la ciudad de Nueva York. Los estudiantes y los miembros de la
comunidad estamos unidos en nuestras demandas originales, incluida la de que las
universidades desinviertan de la maquinaria de guerra genocida sionista, y nuestras demandas posteriores de que las universidades -como actores públicos y presencias
importantes en nuestras comunidades- protejan la libertad de expresión, retiren todos
los cargos contra manifestantes pacíficos y pongan fin a la brutal represión de los
movimientos universitarios. A medida que las universidades públicas y privadas se
exponen cada vez más como poco más que corporaciones fascistas que otorgan
títulos, damos la bienvenida a los movimientos sociales y a los miembros del público a
‘matricularse’ junto a nosotros en la Universidad Popular de Gaza, en la lucha vital por
la justicia, la liberación y la recuperación de las tierras expropiadas para el genocidio y
la opresión.”

En todo Estados Unidos, mientras los estudiantes activistas han sido criminalizados y
sus universidades les han prohibido recibir sus diplomas, numerosas comunidades han
celebrado en las últimas semanas graduaciones de la Universidad Popular para Gaza.
En estos actos, estudiantes, educadores, activistas y otros miembros de la comunidad
comprometidos con la justicia han celebrado su incorporación a un movimiento mundial
en el que cada espacio es un lugar de resistencia y cada participante se dedica a
desmantelar los sistemas de opresión.

La Coalición Internacional para Detener el Genocidio en Palestina insta a los
movimientos sociales mundiales a apoyar las Iniciativas Clave del Movimiento de la
Universidad Popular para Gaza, que incluyen:

  1. Crear coaliciones locales: Trabajar en solidaridad con los movimientos
    estudiantiles locales que trabajan para poner fin al genocidio. Apoyarlos
    proporcionándoles suministros, formación, participación y luchando por la
    desestimación de todos los cargos contra los manifestantes, creando coaliciones
    que trasciendan los límites de la torre de marfil como parte de la formación de
    una red mundial de resistencia. Los sindicatos de trabajadores también pueden
    ir a la huelga u organizar otras acciones para apoyar las reivindicaciones
    estudiantiles, como han hecho en California y Ontario (Canadá).
  2. Pedagogía del Oprimido: siguiendo las enseñanzas de Freire, trabajar para
    transformar cada espacio, tanto dentro como fuera de los muros tradicionales de
    la universidad, en un sitio para la educación revolucionaria centrada en la
    liberación de Palestina, y en la liberación colectiva de la humanidad.
  3. Tácticas estratégicas de ocupación: tomando como modelo las ocupaciones
    estudiantiles de la primavera de 2024 de las universidades sionistas, ocupar y
    reclamar estratégicamente los espacios de opresión. Estos espacios deben ser
    repatriados a la comunidad, transformando los lugares de injusticia en centros
    de liberación.

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