[Más abajo se incluyen archivos adjuntos de BERNARDO CAAMAL ITZA]

Ante la crisis ¿Que hacemos por México?
· Crisis en el campo mexicano debido a la falta de acompañamiento real de las políticas públicas.
· Comunidades indígenas mexicanas enteras sufren los estragos de la caída de las remesas.
· ¿Cómo diseñar un futuro prometedor a nuestros hijos?
· El Pacto por México ¿A quién le beneficia realmente?
Peto, Yucatán, México a 25 de marzo de 2013 (Bernardo Caamal Itzá).
Cómo conservar nuestras tierras en tiempos de intensa crisis, sobre todo de un sistema que le niega de manera sistemática, atenderlo de manera integral, donde se replantee un sistema educativo acorde a los tiempos actuales y la aplicación de un modelo donde sólo campeen los intereses de los mexicanos.
En éstos tiempos de crisis, cómo devolverle a nuestros hijos esa esperanza para que ellos con optimismo diseñen ese futuro deseado, cuando en la práctica eso no sucede. ¿Cómo diseñar un modelo de país en donde los “vividores -y que por unos cuantos años se sienten dioses” y que dicen que “nos representan y que trabajan por nosotros” en las altas tribunas de los estados y de nuestro país, no vemos con efectividad ese trabajo legislativo, y mucho menos a que le retribuyan con trabajo ese espacio que detentan- le exijamos que cumplan con el trabajo encomendado ¡Conste! “No queremos rollos” sino resultados.
Los recursos cada vez son menos, y nuestras necesidades aumentan, debido a la falta de atención real a los problemas que nos aquejan, y sobre todo a quienes se dedican al trabajo y hacer producir la tierra.
Muchos emigraron en busca de oportunidades, sin embargo, especialistas hablan de que las cosas no andan muy bien con nuestros paisanos emigrantes.
“He estado dando seguimiento al envío de remesas por más de diez años. Hace algunos años, México era el segundo país a nivel mundial en recibir más remesas procedentes de sus nacionales que trabajan en el extranjero. Año con año, aumentaba de manera sustancial el monto total en miles de millones de dólares!, pese a las trabas y altas comisiones impuestas por los norteamericanos. Sin embargo, en los años recientes el monto total enviado viene disminuyendo y puede deberse a dos factores principales: uno, los trabajadores mexicanos que viven en el extranjero, básicamente en E.U., se están quedando con la mayor parte de lo ahorrado, para asegurar su futuro afuera, el otro es, que el gobierno estadounidense, bancos y agencias intermediarias se están quedando con una tajada cada vez más grande, dada su enorme voracidad a costa del esfuerzo de los trabajadores mexicanos”, señaló de uno de los especialistas en el tema
En cuanto a la cuestión de la disminución de las remesas que envían los paisanos a México, se aclara la realidad en los últimos cinco años. “Comunidades enteras sufren los estragos de la caída de las remesas, por ejemplo, hace 12 años, municipios del Estado de Puebla impulsaban obras y proyectos con el dinero que enviaban los familiares en Estados Unidos, pero hoy el panorama es muy distinto. Entre 2007 y 2012, los ingresos por remesas cayeron 13.9 por ciento en todo México al pasar de 26 mil 58 millones de dólares a 22 mil 445 millones, es decir, 3 mil 613 millones de dólares menos, según datos del Banco de México”.
Esta breve radiofografía muestra la situación en que vivimos todos los mexicanos. Hubo un tiempo en que la gente del sector rural creyó en un momento en que si sus hijos si “los refugia en algún momento en la educación occidental para conseguir empleo”, pero se enfrentó nuevamente a “una competencia desleal”porque en este lugar sólo está destinado a los privilegiados que siempre viven del sistema y a los que hicieron campaña; mientras que a los grupos políticos para que vivan a sus anchas, a los aglutinan en un “Pacto por México” para que sigan “mamando” y se les olvide su papel que tienen con las personas que les depósito su confianza.
En este Pacto de la Hipocresía (PH) casi nadie habla, hay mucho temor de ser excluido por lo menos en 3 o 6 años ¡Es mucho! dicen; mientras la crisis campea por todos lados y muchos se mueren debido a la falta de recursos para atender sus necesidades personales de salud, alimentación y de vivienda, pero la hipocresía reina y sólo atiende a 400 municipios y en el caso de Yucatán, sólo es el sur de Mérida y a la comunidad de Tahdziu, donde el PRI no reina como partido en el primero sino lo hace el PAN y el segundo “aparente gobierna un PRI” pero saben que sólo es un títere más, que sólo sabe que tiene dinero para usarlo a sus anchas y no hay ni la mínima intención de detonar capacidades reales.
En realidad mientras la crisis campea y afecta a todos los estratos sociales, el presidente de los mexicanos recibe la bendición del nuevo papá, para mandar mensaje subliminal “de que Gobierna con Dios”, y no con el Diablo ¿Aunque quien sabe?
México, necesita más que nunca articular una política pública integral para trabajar con todos. Ningún político o Gobierno puede atender el problema de la pobreza, repartiendo pollitos para paliar sus efectos y mucho menos, autorizando el cultivo de las semillas “mejoradas” –que no se sabe si es transgénica- para hacer producir al campo. Aun hay muchos interrogantes que las autoridades gubernamentales no han podido explicar, aunque de antemano sus actitudes lo traicionan como el simple hecho de no hablar de frente al pueblo para posicionar su postura como Gobierno -aunque haya “comprado consciencias y el voto”-, pero está al frente del timón del país y tiene que respetar la soberana decisión de impedir el cultivo del maíz transgénico y evitar el traspaso del petróleo a los intereses internacionales.
Los mexicanos debemos aprender a pedir cuentas y hacer uso de las leyes que aun no han sido mutilados por el “Pacto por México” y sigamos demandando esos espacios haciendo uso de la libertad de expresión para continuar en la búsqueda de ese camino que nos conduzca a “esa tierra prometida” –Aztlán- , tal como hicieron nuestros abuelos y cuya simbología lo encontramos a diario en el escudo de nuestra bandera nacional.
Cada día se escucha los susurros por doquier “el nacionalismo no da de comer”, pero la realidad es otra, quien no defiende su casa, cómo le podrá hacer frente a los múltiples problemas que lo aquejan. El nacionalismo, es como el amor que le depositamos a una mujer que tanto queremos, a nuestra madre o a la novia de la infancia, o basta recordar momentos de nuestras infancias, cuando nos traen el regalo nuevo, la diferencia es que hay que saber un poco de historia y conocer de lleno lo que significa nuestra constitución y tener una postura crítica y autocrítica.
Entonces, los que queremos a México tenemos que conocerlo y cuidarlo. Nadie debe tener miedo “a pedir cuentas” a nuestras justas demandas, sino hacer valer ese derecho para recordarles a los que están en el poder, y que en éstos días articulan mil formas para perpetuarse, primero que no somos zombíes -acarreados en los mítines y cuya única misión es la de aplaudir, aunque te mueras de hambre-, y segundo, como mexicanos seamos coherente con nuestro pasado, presente y futuro, por eso urge la necesidad de apostarle a generar oportunidades a nuestros hijos, tal como lo hicieron un día, Miguel Hidalgo, Benito Juárez, Francisco Villa, Venustiano Carranza, Francisco I. Madero, Felipe Carrillo Puerto y el general Lázaro Cárdenas.
Hay que abrir los ojos, para tener con claridad para saber con exactitud lo que está pasando en nuestro país, porque en nombre de la pobreza se practica un “mimetismo”de trabajar por los que menos tienen, y cuando en la práctica, solo trabajan para los que financiaron sus campañas.
¿A que le tienen miedo los políticos y porque le niegan a los grupos indígenas de México, ese derecho para reproducir su cosmovisión y replantear su desarrollo?
Las cosas están más claras que el agua, por el momento es visible la agenda no está acorde a los intereses nacionales, por eso le han dado la espalda a 66 pueblos indígenas, al negarles el derecho a sus propios medios de comunicación, y ahora en varias localidades indígenas, llegan sobres “para informarles de que dado que estas familias han superado la pobreza” dejan de recibir el programa “Oportunidades”.
¿Será castigo debido a la encuesta que aplicó el PRI hace un año para identificar a sus opositores? ¿Seguiremos como zombies para no denunciar estos atropellos que hace este Gobierno en nombre de la soberbia y la hipocresía? Hay que decirle que si representa a nuestro país, su gobierno, no debe atender sólo a los de su partido, porque a la hora en que se cobran los impuestos, todos pagamos, y los bienes nacionales es de todos quienes vivimos en este país.