México. En el 2019, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) invirtió 65 millones de pesos para la remodelación del Estadio Francisco Carranza Limón; una sede del equipo de beisbol Algodoneros de Guasave.
El proyecto fue beneficiado con una inversión total de 136 millones de pesos, cifra que se utilizó para ampliar el aforo del estadio a 8 mil asientos, adquirir una pantalla gigante y construir palcos nuevos y hasta un estacionamiento.
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Sin embargo, de acuerdo con una investigación de Animal Político, el dueño del recinto deportivo; Alfredo Aramburo Nájar, forma parte de una presunta red de empresas denunciadas por el propio gobierno federal por defraudación fiscal y lavado de dinero.
Dicho medio argumenta que Aramburo Nájar, recibió un estadio remodelado con dinero público y que además obtuvo una concesión para «explotarlo» económicamente durante 15 años. Aunado a esto, fue apoyado por López Obrador para convertir en un lugar digno de espectáculos deportivos al recinto de béisbol.
De esta manera, el medio de comunicación expone que el empresario fue beneficiado por el gobierno. Sin importar que Aramburo Najar, formará parte de una red de empresas fantasma; empresas que al parecer se encuentran involucradas en un fraude fiscal por 55 mil millones de pesos.