DROGA POPULAR
Por el Profr. y Lic. MIGUEL TREVIÑO RÁBAGO
LA DROGA la tenemos todos en casa. No está escondida en
la última habitación, sino todo lo contrario. Está en nuesta sala, en
nuestra recámara, en nuestra cocina y hay algunos que hasta en el baño
la necesitan. Muchos la presumen ante propios y extraños y se empeñan
en tener la más nueva, la más fresca, la de mejor color y de mayor
volumen. Es la moda, es una necesidad urgente y básica. Entre más
cara, es mejor.
LA DROGA la podemos localizar en todos los niveles
sociales. La clases alta, media, baja y en pobreza extrema, la
utilizan diariamente. Me atrevo a comentar que hombres, mujeres,
jóvenes, ancianos, niños, la pueden consumir hasta 24 horas sin el
menor problema. Duermen con ella, viven con ella, apenas despiertan y
la buscan y muchos hasta se arrullan cuando la tienen por un lado de
su cama. Si faltara sería una catástrofe de proporciones
inimaginables.
LA DROGA ha creado verdaderos adictos que la consumen
día y noche. Es como si estuvieran hipnotizados, idiotizados,
atarantados. Su primer acto reflejo por las mañana, es estirar la mano
para buscar la droga. Una vez que se percatan que allí está, respiran
aliviados. A partir de ese momento, todas sus actividades dentro de la
casa están regidas acompañadas de buenas dosis de la droga
mundialmente conocida.
LA DROGA les ha moldeado su vida. De acuerdo a ese
potente narcótico, ellos supuestamente "deciden" qué comer, cómo
vestirse, cómo peinarse, dónde comprar su despensa, qué bebidas
consumir, cuál disco comprar, a cuál evento asistir, por cuál
candidato votar, por que calles conducir, qué marca de condones usar,
cuál ropa los hace lucir más sexys para conquistar, dónde vacacionar,
que alimentos comprar, cuáles medicinas curan todo, qué cerveza o
licor los emborracha mejor, qué producto les atenúa la "cruda", cuál
auto los lleva más veloz a la muerte, bueno, esa droga, les lleva
hasta la bendición papal a domicilio sin necesidad de ir a pararse en
una de las mil iglesias y religiones que se han inventado.
LA DROGA es una fábrica de ilusiones hermosas. La
realidad fuera del hogar puede ser brutal, sangrienta, apestosa, pero
la "cosa" esa que tenemos en casa en el sitio de honor, nos transporta
a otro mundo. Nada afuera es cierto o verdadero, la "droga" la usa el
mismo gobierno tambaleante y asustado, para decirnos que "todo está
bien", que no debemos preocuparnos, que "ellos" nos están cuidando y
que apenas levantemos un teléfono y marquemos tres números, allí
estarán para "salvarnos". Así la droga nos hace dependientes, pero muy
felices porque nos adormece y embrutece bien bonito.
LA DROGA nos ayuda a divertirnos, no importa que no
tengamos empleo, ni comida, ni medicina, ni casa, ni familia. Muchos
hombres, mujeres, niños y ancianos saben que la droga, es como su
familia. Los acompaña en su soledad, les habla bonito, les abre una
ventana al mundo en donde se pueden asomar, no importa que nunca en su
vida puedan viajar al poblado más próximo. Con la "droga" te vas a
Veracruz, a Puerto Vallarta, a los "Acapulcos" a las "Europas" a las
montañas, a los palacios de los ricos, a los barcotes y a los
avionzotes, bueno, te lleva hasta las recámaras de las mujeres más
buenotas del universo. Pinche "droga" que viajezotes nos hace dar.
LA DROGA es la mejor universidad del mundo. Muchos
jóvenes aprenden con ella día y noche. "Qué hueva ir a la escuela"
dicen. Mejor aquí desde la casa, desde el sillón o la cama aprenden
las cosas de la vida. Pueden estar en calzones o encuerados y se
divierten. La señoras y señores ya no necesitan leer, las historias
llegan a ellos y los hacen reír y llorar. Sí, es que así es la vida.
Igualita. Los jóvenes bailan y saltan con la "droga", se revuelcan con
los chistes idiotas, aprenden albures y leperadas, los niños se
"aplacan" con caricaturas y payasos "chafos" con trajes desteñidos que
hablan como retrasados mentales. Sí, la droga es hoy en día la gran
educadora en el hogar.
LA DROGA ha sustituído a libros, periódicos, revistas y
hasta enciclopedias. Un ex-presidente hasta felicitó a una ciudadana
por no leer periódicos, "porque dicen puras mentiras". Mejor aún, la
"droga" nos informa, deforma y conforma. ¿ Para que gastar en libros y
periódicos ? No, nada de eso. Las noticias allí están, fresquecitas,
chorreando miel o sangre. Los amoríos que indignan a las señoras y
emocionan a lo señores; los artistas que enloquecen a los jóvenes y
los muertos todavía tirados con los agujeros humeantes. Todo en tiempo
real -como dicen ahora- en vivo y en directo "desde el lugar de los
hechos" porque nada mejor, cuando usted está comiendo, con su familia,
que presentarle diferentes cortes de carne para que se le abra más el
apetito.
LA DROGA le permite apoyar desde casa a su equipo
favorito. Usted nomás se pone la camiseta, agarra la bandera, se pinta
como payaso, llena el refri de "chelas" no importa que no haya comida,
se compra sus botanas chatarra, junta a sus cuates y la "droga" lo
hace sentir alli mero en la primera fila del estadio; eso no le
impedirá a usted gritar -delante de hijos e hijas- majaderías,
mentadas de madre al árbitro vendido, pendejear a cualquiera de los 22
tipos que corren desaforados detrás de un balón. Todo es emoción sin
salir de casa, y si se trata de la selección nacional, más les vale
ganar, porque el orgullo nacional va de por medio entre las patas de
los "monitos verdes".
LA DROGA ya es parte de nuestra cultura. Es lo último
en tecnología. Las bibliotecas son para "ratones". El cine es para los
y las fresas que prefieren los "churros" gringos. En las cintas
mexicanas, 7 de cada 10 palabras son leperadas; los museos estan sólos
y los teatros sobreviven con obras "ligeritas", comerciales, sin
calidad ni profundidad. En cambio la "droga" tiene concursos donde
niños de primaria "derrotan" a los analfabetas funcionales previamente
seleccionados para hacer el completo ridículo y ser el hazmerreír
nacional. "Fíjate ese niño de 2o. año sabe más que el viejo de la
tiendita". ¿ Invitar a universitarios o profesionistas ? de ninguna
manera. Menos aún, invitar a maestros que demuestren saber más que los
alumnos. ¡Sería el acabose del SNTE!....
LA DROGA en fin es lo máximo. Es ya la unica manera de
engañar bobos y hacerlos felices. Nos hace creer que vivimos en el
primer mundo, cuando ya ni siquiera pertenecemos al tercero. Lo peor
es que esa "droga" nadie la regula. Nadie la controla. Nadie la
supervisa. Nos hace creer que los tiraderos de basura se reciclan en
dinero y que los pepenadores alguna vez serán millonarios. Dos o tres
vivales son los dueños de la "droga" que equivalen a dos o tres
monopolios que han convertido a millones de ciudadanos en "adictos"
enajenados con cerebro oxidado y repleto de sustancias fecales, dicho
ésto, sin doble sentido, aunque válido para los que todavía tienen
criterios políticos.
LA DROGA está destruyendo a los hombres y mujeres de
todo el mundo. México está como está, por la delincuencia organizada
que controla la "droga" llamada TELEVISIÓN, que por encima de un
gobierno sin rumbo y sin mando, se ha convertido en la "rectora" de la
vida nacional. ¡¡ Hágame usted el recabrito favor !!....Porfavor
estimado lector (a) "Compre un libro y apague el televisor". Sus hijos
y nietos merecen lo mejor, no permita que les pudran su mente.
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