La liberación del creyente y los comerciantes de la fe
El destino del creyente no está escrito por otros hombres, sino por Allah
13/11/2015 - Autor: Ángel Álvarez Hernández - Fuente: Webislam
El sentido religioso de la vida es algo que prácticamente se ha perdido en occidente. Las diferentes religiones han quedado relegadas en muchos casos a una especie de terapia de auto-ayuda. En los centros religiosos se venden diferentes productos religiosos que se ponen al servicio del consumidor, como si de un mercado de las almas y la fe se tratara. Esta religiosidad,“de baja intensidad”, no requiere en la mayoría de casos un compromiso real por parte de su consumidor.
En otros casos la religión se ha convertido en un estandarte de la derecha conservadora, que utiliza la fe de las personas para defender sus intereses, que a menudo suelen estar en contradicciones con la misma religión que manipula.
En la parte del mundo dominada por mayorías religiosas musulmanas, la religión es usada por el poder para perseguir a sus opositores, o para dominar y controlar a la población, manteniéndola en la ignorancia, como se ha hecho en occidente durante muchos siglos, y como se sigue haciendo en muchos casos en Europa o Estados Unidos.
La religión es rehén de los poderosos o comerciantes, que se enriquecen con ella, viviendo a su costa, al compás de sus caprichos y egoísmos.
La religión es rehén de los poderosos o comerciantes, que se enriquecen con ella, viviendo a su costa, al compás de sus caprichos y egoísmos.
Los malos usos y abusos de la religión han hecho que ésta sufra una fuerte sangría de abandonos y descréditos, que la ha dejado vacía de contenido y argumentos.
La fe islámica contiene, entre otros principios, estas dos características:
a) La existencia de una comunidad de creyentes llamada “umma", constituida por todos los musulmanes con independencia de su condición social, sexo, origen nacional, edad o color de la piel.
b) La experiencia personal del creyente y su fidelidad con Allah. En la Sura Al-Anfal, 8:2, se dice:
Los creyentes son aquellos que cuando se menciona a Allah sienten un temblor en sus corazones, y cuya fe es robustecida cuando ven y escuchan Sus manifestaciones'.
La maravilla del creyente sincero, es la posibilidad de poder pulir sus sentimientos, su alma, su corazón y sus acciones, con las palabras de Allah, sabiendo que todos los creyentes somos una misma comunidad y que la creación entera es obra de Allah, donde cada ser humano es revestido de dignidad. La vida es un camino hacia la unión con Allah, y la extinción del yo egoísta.
Dice el Sagrado Corán:
«Dios es el Creador de todo, y es Quien vela por todo lo que existe. Suyas son las llaves de los cielos y de la tierra.» (Corán 39:62,63.) «No existe ser viviente sobre la tierra cuyo sustento no provea Dios. El conoce sus lugares de vida y de muerte.»(Corán 11:6.).
Yalal ad-Din Muhammad Rumi, lo describe de la siguiente manera:
A través de la eternidad
La Belleza descubre Su forma exquisita
En la soledad de la nada;
coloca un espejo ante Su Rostro
y contempla Su propia belleza.
Él es el conocedor y lo conocido,
el observador y lo observado;
ningún ojo excepto el Suyo
ha observado este Universo.
La Belleza descubre Su forma exquisita
En la soledad de la nada;
coloca un espejo ante Su Rostro
y contempla Su propia belleza.
Él es el conocedor y lo conocido,
el observador y lo observado;
ningún ojo excepto el Suyo
ha observado este Universo.
(The Divani Shamsi Tabriz, XIII)
El destino del creyente no está escrito por otros hombres, sino por Allah.
Abdur-Rahman Ibn Qatada dijo: Oí al mensajero de Allah, (PyB) decir: Allah exaltado sea creó a Adán, luego extrajo a su descendencia de su espalda y dijo: estos irán al Paraíso y estos irán al Infierno. Entonces alguien inquirió (de entre los sahabas): Oh mensajero de Allah, ¿para qué obramos entonces (si es que todo se encuentra decidido)? El Profeta, (PyB), dijo: (actuarás) de acuerdo al destino.(Narrado por Ahmad).
Abdur-Rahman Ibn Qatada dijo: Oí al mensajero de Allah, (PyB) decir: Allah exaltado sea creó a Adán, luego extrajo a su descendencia de su espalda y dijo: estos irán al Paraíso y estos irán al Infierno. Entonces alguien inquirió (de entre los sahabas): Oh mensajero de Allah, ¿para qué obramos entonces (si es que todo se encuentra decidido)? El Profeta, (PyB), dijo: (actuarás) de acuerdo al destino.(Narrado por Ahmad).
El creyente no es sumiso, ni se somete a otro ser humano, sino a Allah, y esta es la autentica libertad del creyente. El creyente solo adora a Allah, y su vida es por y para Allah. El creyente no adora el dinero, el poder, la gloria, ni da su vida a los bancos, la compra de bienes, la reputación, el lujo y el placer. El tesoro único del creyente es Allah. El creyente no es esclavo de los Señores de la tierra, de sus intereses y su egoísmo. Allah, hace al creyente libre de todo dominio, en su sumisión al creador, que ha puesto su creación a su servicio, como un regalo, y no como una carga que le tiraniza.
El Sagrado Coran dice:
«¿Adoráis aquello que vosotros mismos esculpís?» (Corán 37:95.)
«Es Allah no hay más Dios que El. El Conocedor de lo oculto y de lo patente. Es el Compasivo, el Misericordioso. Es Allah no hay más Dios que El, el Rey, el Santo, la Paz. El es Quien testimonia con Su propia verdad, el Custodio, el Todopoderoso, el más Fuerte, el Supremo. ¡Gloria a Dios! Está por encima de lo que le asocian. Es Allah El Creador. El Hacedor, El Formador. Posee los nombres más bellos. Los que están en los cielos y en la tierra le glorifican. Es el Todopoderoso, el Sabio.» (Corán 59:22-24.). «Allah No hay más Dios que El, el Viviente, el Subsistente. Ni la somnolencia ni el sueño se apoderan de El. Suyo es lo que hay en los cielos y en la tierra. ¿Quién podrá interceder ante El si no es con su permiso? Conoce su pasado y su futuro mientras que ellos no abarcan nada de Su ciencia, excepto lo que El quiere. Su trono se extiende sobre los cielos y sobre la tierra y su conservación no le resulta onerosa. El es el Altísimo, el Grandioso.» (Corán 2:255.)
Narró Abu Hurairah que el mensajero de Allah, (PyB), dijo: Cuando Allah creo el paraíso le dijo a Yibril: Ve y obsérvalo. Así que fue y lo observó. Entonces volvió y le dijo: Oh Señor, ¡Por tu gloria! quien oyese hablar de él (su descripción) desearía entrar en él. Entonces (Allah) lo rodeó de dificultades y dijo: Oh Yibril! Ve (nuevamente) y obsérvalo. De tal manera que fue y al regresar dijo: ¡Oh Señor, Por tu gloria! Temo que nadie haya de entrar en él. Dijo (el Profeta, -PyB-,): Cuando Allah creó Infierno, dijo: Oh Yibril, ve y obsérvalo. Así que fue y lo observó, al volver le dijo: Oh Señor, ¡Por tu gloria! Ninguno que oyese hablar de él, desearía entrar. Así que lo rodeó de deseos (lujurias, deseos mundanos) y dijo: ¡Oh Yibril! ve y obsérvalo (nuevamente). Al observarlo regresó diciendo: Oh Señor, Por Su gloria! Temo que nadie escape de entrar en él. (Este Hadiz es hasan. Transmitido por Abu Da'ud, Tirmidhi, Nasa'i, Ahmad y Al-Hakim).
El Sagrado Coran dice, a cerca de Allah: "Tu Misericordia abarca todo y también tu saber" (40: 7), y Allah dice: “refrenan la ira y perdonan a los hombres. Allah ama a los que hacen el bien.” (Al-Imran: 134).
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