Las fuerzas de seguridad iraquíes y combatientes tribales suníes han lanzado una ofensiva para desalojar Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIL) combatientes de grupos y asegurar una ruta de abastecimiento en la provincia de Anbar, la policía y fuentes tribales dicho.
La ofensiva llegó como atentados afirmaron en todo el país murieron al menos 32 personas - sólo días después de un ataque de ISIL, en la provincia oriental de Diyala,dejó más de 100 muertos.
El ataque más mortífero ocurrió el martes cuando un coche cargado de explosivos fue detonado en el barrio principalmente chiíta de Nueva Bagdad, en el noreste de Bagdad, matando a 16 personas e hiriendo a 48.
La ofensiva oficialista abordó ISIL cerca del puesto fronterizo occidental de Haditha, en un intento de asegurar una ruta a la base militar de Ain al-Asad cerca.
Los residentes de la ciudad de Anbar valiente amenaza constante ISIL
Haditha y su cercana presa están en uno de los pocos lugares de la provincia suní de Anbar todavía bajo el control de las fuerzas del gobierno liderado por los chiítas de Irak, que fueron expulsados ​​de la capital provincial de Ramadi en mayo.
La ofensiva comenzó con el ejército y las fuerzas policiales apoyados por combatientes tribales suníes que atacan la zona Albu Hayat, a 20 km al sureste de Haditha, la policía y fuentes tribales dijeron a la agencia de noticias Reuters.
ISIL combatientes han utilizado el área de huelga la ruta de suministro de Ain al-Asad, donde los marines estadounidenses están entrenando a las tropas iraquíes.
"Estamos atacando Daesh desde tres direcciones y no vamos a retroceder hasta retomar Albu Hayat para asegurar no sólo Haditha pero la ruta de suministro a la base", dijo el líder tribal sunita Khalid al-Mijbil Nimrawi, utilizando otro término para ISIL.
Por otra parte, al menos seis soldados y policías murieron en un ataque suicida en un puesto de control en la ciudad central de Tarmiya, a unos 25 kilómetros al norte de Bagdad, la policía y fuentes médicas.
Otras ocho personas murieron y 16 resultaron heridas cuando un coche bomba estalló en una calle comercial concurrida en Mandali, una ciudad predominantemente chiíta kurda a unos 100 kilómetros al noreste de Bagdad.
Ningún grupo se atribuyó de inmediato la responsabilidad por cualquiera de los ataques.
Mortal explosión de Diyala
Mientras tanto, en la provincia de Diyala Khan Bani Saad, la ubicación del atentado mortal del viernes en el que murieron más de 100, los residentes dijo a Al Jazeera que han perdido la fe en el gobierno.
"A nadie le importa lo que pasó aquí. Nuestro gobierno ni siquiera ha visitado aquí. Condolencias Incluso [Estados Unidos] El presidente Obama ha enviado. A nadie le importa", dijo el residente de Hamid al-Moussa.
Khan Bani Saad alcalde Abbas Hadi Dulaimi dijo que las autoridades locales necesitan suministros para ayudar a defenderse de ISIL.
"Necesitamos más de todo para protegernos a nosotros mismos. Más bomba equipo de detección, más cámaras. Más policías y soldados que conocen la zona y nos pueden proteger contra ISIL locales", dijo.
Fuente:  Al Jazeera y Reuters