Un gran muftí saudí admite que sus leyes son similares a las del ISIS
Adel al-Kalbani reconoce que el autoproclamado califato ha tomado sus principios de la tradición saudí, aunque advierte: "Nosotros los aplicamos de otra manera".
Arturo García
Viernes, 29. Enero 2016 - 10:17
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Un gran muftí ha admitido que la ideología de Arabia Saudí y el Estado Islámico es "muy similar", pues ambos siguen la línea de pensamiento salafista, una de las versiones más radicales del Islam y que siempre lleva consigo condenas asociadas a la violencia. No obstante, las autoridades sauditas han batido este mes de enero su propio récord de ejecuciones.
"Seguimos la misma ideología del Estado Islámico, pero la aplicamos de una manera más refinada. Ellos sacan sus ideas de lo que está escrito en nuestros libros, en nuestros principios", ha recordado Adel al-Kalbani, que se niega a criticar la ideología salafista, base del más del millar de atrocidades llevadas a cabo por el autoproclamado califato desde su creación.
De hecho, Al-Kalbani tampoco condena las actividades violentas del Estado Islámico y, a su juicio, la decapitación y ejecución de periodistas y ciudadanos occidentales por parte del ISIS es totalmente admisible dado que estos actos forman parte de las órdenes religiosas (fatwa) salafistas.
"Su sangre fue derramada según fatwas de las enseñanzas salafistas", ha explicado Kalbani, que ha hecho especial alusión a la decapitación del periodista James Foley a manos del yihadista John, el verdugo británico de los yihadistas, recientemente abatido en un ataque de la coalición internacional.
Al-Kalbani ha acusado a las agencias de inteligencia de "muchos países" de proveer armamento y logística a los terroristas: "Desde sus inicios han contado con el apoyo de agentes internacionales muy importantes", ha sentenciado.
Desde sus comienzos, el Estado Islámico ha buscado el respaldo de la comunidad musulmana mundial y sus campañas mediáticas han logrado captar a numerosos combatientes en países occidentales y el norte de África. Las decapitaciones públicas han conseguido atraer la atención mundial de un gran número de personajes políticos, analistas y funcionarios.
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