Descubre @AlfredoJalife pacto secreto EPN-AMLO vía @LVidegaray y Aspe… y Poncho Romo
Pero Poncho Romo es el empresario que más apoya a Andrés Manuel López Obrador. Pues bien, sigamos con la lógica de Jalife y demos a la reforma de una buena vez su nombre completo: “reforma energética Peña/Videgaray/Aspe/Romo/AMLO”.
Ser experto en geopolítica, como el señor Alfredo Jalife, da para mucho. Un especialista en esta ciencia fundada (dice Wikipedia) por el geógrafo Rudolf Kjellén es capaz de ver lo que jamás podremos percibir los seres humanos comunes y corrientes.
Las columnas del señor Jalife, publicadas en La Jornada, nos dan valiosas pistas para entender la gran conspiración que amenaza al petróleo mexicano. Se trata de un gigantesco complot, lo dice claramente el geopolitólogo Alfredo Jalife, diseñado, promovido y hasta el momento ejecutado con gran éxito por dos personajes clave de la política mexicana: Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador, que se han puesto de acuerdo en todo.
Pensaban que les iba a salir el numerito, pero no contaban con la astucia de don Jalife. Sintetizo las ideas de Jalife tan como las da a conocer hoy domingo en La Jornada:
1.- Hay “brutales exigencias perentorias de Estados Unidos y Gran Bretaña para privatizar Pemex hasta la sectaria descomposición del ‘gran Medio Oriente’, donde pesa enormemente el factor Arabia Saudita, en que llamó la atención la sorprendente declaración del multimillonario príncipe saudita Alwaleed bin Talal, sobrino del rey Abdalá, quien adopta la teoría de la tecnología fracking del shale gas”
2.- El analista Philip Verleger anuncia “El fin de la crisis del petróleo” debido al auge del shale gas (gas esquisto/lutitas) en 2020”.
3.- Hablan de “choque petrolero”, “como esboza Paul Stevens, becario del think tank británico Chatham House, el segundo think tank más influyente del mundo”.
4.- “Se han intensificado las advertencias catastrofistas sobre un desplome del precio del petróleo para colocarse entre 35 y 60 dólares el barril y a las que se ha sumado Alexie Kudrin, anterior ministro de Finanzas de Rusia”.
5.- “Un ex ministro ecuatoriano, a su paso por México el año pasado, confesó los mismos temores sobre un deliberado desplome del “oro negro”.
Muy bien, las de Alfredo Jalife son palabras absolutamente prudentes y sabias. Pero, ¿dónde y cómo demuestra que los jefes del complot son EPN y AMLO, par de perversos unidos para controlar el petróleo?
Carajo, ¡si Jalife lo expresa en cada una de sus columnas! Y no me había yo dado cuenta.
Alfredo Jalife, brillante y audaz, le pone nombres y apellidos a la reforma energética: “reforma energética Peña/Videgaray/Aspe”.
Todo está claro, gracias señor Jalife. ¿Aspe? Sí, Pedro Aspe, ex secretario de Hacienda. ¿Qué tiene que ver Aspe con EPN y el actual titular de Hacienda, Luis Videgaray? A Jalife nada se le escapa. Aunque era el secreto mejor guardado del mundo, Alfredo Jalife descubrió que Videgaray trabajó con Aspe, en el gobierno y en una empresa privada.
Una vez entendido ese mensaje de Jalife, lo demás es sencillo: como Videgaray trabajó para Aspe, luego entonces la reforma es la “reforma energética Peña/Videgaray/Aspe”.
Sigamos con la lógica del maestro Jalife: como Aspe trabajó para el empresario regiomontano Alfonso Romo, entonces, así lo ordena el claro razonamiento del geopolitólogo Jalife, la reforma también podría llamarse ““reforma energética Peña/Videgaray/Aspe/Romo”.
Pero Poncho Romo es el empresario que más apoya a Andrés Manuel López Obrador. Pues bien, sigamos con la lógica de Jalife y demos a la reforma de una buena vez su nombre completo: “reforma energética Peña/Videgaray/Aspe/Romo/AMLO”.
Son cinco padrinos los de la reforma, pero de ellos los meros jefes, todo el mundo lo sabe, son el primero y el quinto (Videgaray y Aspe obedecen a EPN, y Romo a AMLO), luego entonces debemos dejarnos ya de misterios y bautizar a la reforma con su verdadero nombre, tal como lo ordena el geopolitólogo Alfredo Jalife: “reforma energética EPN/AMLO”.
¿Eso qué significa? Pues que Jalife tiene razón….
Jalife nos dice, entre líneas, desde luego solo para que lo entendamos algunos privilegiados iniciados en su doctrina, que AMLO hizo fracasar la reforma de Calderón para que ahora el que se luzca sea Peña Nieto.
Y todo empezó hace años, cuando Videgaray hizo su tesis de doctorado en 1998, como afirma Jalife, “bajo el padrinazgo del latinófobo Rudiger Dornbusch”, que en otra parte Jalife descubre que “fue coautor de varios libros con Pedro Aspe”.
Gracias, Jalife. Ya todo está claro.
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