México, los y las migrantes necesitamos a Alejandro Solalinde; es urgente que el gobierno active los mecanismos para su protección

Pronunciamiento

México D.F., 26 de julio de 2012 (MPJD).- El Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD) saluda el regreso a México del padre Alejandro Solalinde, director del albergue para migrantes Hermanos en el Camino en Ixtepec, Oaxaca. Desde el MPJD lo reconocemos como un gran ejemplo en la defensa de los derechos humanos de las y los migrantes en su camino hacia los Estados Unidos y hacemos un llamado a las autoridades para que lo protejan de manera efectiva.

El padre Alejandro Solalinde salió del país el pasado 21 de mayo, luego de que aumentara el nivel de riesgo de sufrir una agresión; sin embargo, y a pesar de que su vida sigue corriendo peligro, ha decidido regresar a sus labores como director del albergue.

El MPJD respalda esta decisión y apoya al padre en su convicción y vocación de continuar defendiendo a nuestro hermanos y hermanas migrantes; pero consideramos que es urgente que el Estado brinde las garantías necesarias para su protección y la de todo el personal del albergue Hermanos en el Camino, ya que la situación de peligro de estos defensores es más palpable que nunca.

Recientemente el padre ha compartido con los medios que “dos integrantes del cártel de Los Zetas me dijeron aquí, dentro del albergue: ‘¿crees que no te podemos matar? No lo hacemos porque si te matamos cierran el albergue y entonces ya los migrantes van andar por todos lados, los vamos a andar buscando por todos lados. Preferimos que estén aquí’”.

Además, la condición de vulnerabilidad de los migrantes y el padre Solalinde quedó expuesta una ves más, luego de que a su regreso al albergue, el pasado 12 de julio, le fuera robada su computadora.

Ante las reiteradas amenazas y actos de hostigamiento que ha recibido el padre, resulta urgente que las autoridades competentes diseñen e implementen un plan de protección adecuado para que el padre Alejandro Solalinde continúe ejerciendo su labor como defensor de derechos humanos al mismo tiempo que su integridad esté resguardada.

En este sentido instamos a la Secretaría de Gobernación a implementar la Ley de Protección a Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas y que ésta se haga con la plena participación de la sociedad civil abocada a la defensa de los derechos humanos quienes conocen las necesidades de protección de ambas poblaciones y que han estado involucradas en el proceso de construcción de dicha ley.

Finalmente, no podemos dejar de lado que las agresiones contra los y las hermanas migrantes y contra quienes los defienden continúan sin ser atendidas por las autoridades en todo el territorio nacional, y se acumulan frente a un olvido sistemático e impune por parte del Estado. Ejemplo de ello es la crisis humanitaria que se ha presentado luego del cierre del albergue en Lechería, Tultitlan, Estado de México, y la agresión con disparos de bala contra el comedor de Huehuetoca, también en el Estado de México y, recientemente abierto para intentar amortiguar el cierre del albergue.

Le recordamos al Estado mexicano que la violación sistemática de los derechos humanos de los migrantes y quienes los defienden es un retrato más de la Emergencia Nacional, aún a la espera de ser atendida.

Atentamente

Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad