El verdadero amor por el Profeta Muhammad
El amor y la fe son dos sentimientos que deben estar impregnados en el corazón del creyente
23/09/2013 - Autor: Sh eij Muhammad Al Ruwaili - Fuente: Cciar
Alabado sea Allah, Señor del universo. Le glorificamos, le pedimos perdón por nuestros pecados, y a Él nos encomendamos. Nos refugiamos en Allah del mal que existe en nuestra s propias almas y de las consecuencias que puedan acarrear nuestras malas acciones. A quien Allah guíe nadie lo podrá desviar y transitará, sin duda, por el camino de la luz y la misericordia; y para quien Allah decrete el desvío, nadie podrá guiarlo, y transitará, sin duda, por un camino de tinieblas, de permanentes dudas y tribulaciones. Atestiguo que no hay otra divinidad excepto Allah, Quien no tiene copartícipe alguno y que Muhammad es Su siervo y Mensajero.
¡Siervos de Allah! Entre una de las mejores formas de adoración se encuentra el amor por el Profeta Muhammad (PyB), Abu Hurairah (que Allah se complazca de él) relató que el Mensajero de Allah (PyB) dijo: “No alcanzará la verdadera fe ninguno de vosotros hasta que yo no le resulte más amado que sus padres, sus hijos y que toda la gente” (Al Bujari y Muslim). En otro hadiz dice (PyB): “Tres cualidades que quien las posea habrá alcanzado la dulzura de la fe: Que Allah y su Mensajero sean lo más amado para él, que ame a su hermano por Allah, y que repidie volver a la incredulidad como repudia ser arrojado al fuego”.
Estos dos hadices son las más claras pruebas sobre la obligatoriedad de amar al Profeta (PyB), ya que el creyente debe ser considerado como una persona de fe, pero no se considera entre los que se salvarán hasta que el Mensajero (PyB) sea más amado que sus padres, hijos y toda la humanidad, ésta es una obra del corazón con la que se arma el creyente.
El amor y la fe son dos sentimientos que deben estar impregnados en el corazón del creyente, si uno se incrementa el otro también, y a la inversa. Si al amor del creyente se incrementa da como fruto el incremento de la fe, y así puede el siervo probar la dulzura de la fe. Pero no alcanza el siervo este grado si no se preocupa por hacer lo que a Allah y Su Mensajero le complace, ya sean palabras o acciones. Siempre darle prioridad por sobre todas las cosas deseadas el amor a Allah y a Su Mensajero, esto aumenta el amor por el Profeta en el corazón. Significa remitirse a sus enseñanzas a entender su sunna, a leer y aprender de su historia, y obedecerlo en lo que ordenó y prohibió, es de la sunna dejar de lado lo que dejó el Mensajero de Allah y esta es una prueba firme del amor por él (PyB), porque quien ama a alguien va estar de acuerdo con su amado. Y con respecto al Mensajero de Allah esta situación no se da si no se le obedece y sigue sus enseñanzas, la verdadera felicidad en las dos vidas se remite a seguir las enseñanzas del Profeta (PyB); y la infelicidad (que Allah nos proteja) viene por contradecir y discrepar con sus enseñanzas: “Hay un bello ejemplo en el Mensajero de Allah de valor y firmeza en la fe para quienes tienen esperanza en Allah, anhelan ser recompensados en el Día del Juicio y recuerdan frecuentemente a Allah”. Tú que amas al Mensajero de Allah, obra y deja de hacerlo acorde a cómo obraba el Profeta (PyB) .
En cuanto a aquellos que dicen que aman al Profeta (PyB) pero actúan diferente a lo que enseñó, la mayoría deja de hacer lo que el Profeta no hacía y también dejan de hacer lo que el profeta ordenaba hacer. Esta discrepancia es la que marca la diferencia entre los dos grupos, se evidencia quien ama al Profeta, porque sigue su Sunna, sus órdenes y se abstiene de sus prohibiciones, acepta la legislación, con la seguridad que el Profeta transmitió cabalmente el Mensaje, cumplió con lo que se le había encomendado y aconsejó a su nació para bien, y que la religión fue completada en la vida del Profeta (PyB): “Hoy os he perfeccionado vuestra religión y completado Mis gracias y Me complazco para vosotros con el Islam como religión”.
El amor por el Profeta está marcado por señales claras que indican su sinceridad, huellas que marcan que lo está siguiendo, entre esas señales están cumplir con lo que ordenó, seguir su legislación, abandonar lo que prohibió, respetarlo, tener una actitud correcta cuando se habla de su sunna, pedir paz y bendiciones por él cuando es mencionado y en los momentos establecidos por el Islam.
¡Hermanos musulmanes! El fruto de dicho amor es la obediencia de Allah y ser amado por Él. Allah dice: “Di: Si verdaderamente amáis a Allah ¡Seguidme! Y Allah os amará y os perdonará las faltas. Allah es Absolvedor, Misericordioso” (3:31). Nadie alcanzará el amor de Allah si no ama al Mensajero (PyB), con sinceridad y des de lo profundo de su corazón.
Entre los frutos de amar al Profeta (PyB) es que será reunido con él el Día del Juicio. Un hombre le preguntó ¿Cuándo tendrá lugar el Día del Juicio? El Profeta le preguntó “¿Y qué has preparado para ese día?”, le respondió: El amor por Allah y Su Mensajero, entonces el Profeta (PyB) le dijo: “La persona estará con quienes ame”. Anas exclamó: ¡Qué alegría para el musulmán estas palabras del Profeta de saber que estará con quienes ame, yo amo al Profeta, a Abu Bakr y a Umar, espero que Allah me reúna con ellos aunque mis obras no sean muchas. Hay señales que indican el verdadero amor del musulmán por el Profeta (PyB), no es simplemente decir que uno lo ama, sino que es una realidad de obediencia y de seguir su sunna en la forma de adoración y en el comportamiento con los demás.
El amor por el Profeta es seguir su mensaje de unicidad y adoración a Allah sin asociarle copartícipes, Allah dice: “Diles: No tengo poder para dañaros ni guiaros pues sólo soy un siervo de Allah. Diles: Nadie sino Allah podrá protegerme de Su castigo, y no encontraré refugio alguno fuera de Él” (72:21 - 22)
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